Un ojo para cada realidad

No entiendes la parte del dolor interno pero no profundo

Sabes que es un dolor de cabeza. Pero no sabes lo que es mi dolor de cabeza. Intentas vivir la vida de otra persona, intentas que otra persona viva tu vida. Las partes rotas no quedan en su lugar, en medio del desastre sólo puede pensar en tirar lo que no sirve y acomodar el desorden. ¿Quién en su sano juicio puede dejar las cosas en el mismo orden que al principio?

Sin duda alguna no entenderás lo que leas después de tiempo, y te reirás de todo lo que se escribe en tinta virtual. Saber que estás enfermo y no atenderte no es negligencia. No es un libro de niños pero tiene rompecabezas.

Hay 5 pilares que han forjado el edificio Meibothy, lleva años en construcción y al parecer nadie ha podido determinar para que será el edificio, ni el mejor diseño del mismo. Tanta veces se han reformulado la teoría de que sin ningún ladrillo no podría levantarse tal edificio.

Yo me opongo.

Era un día normal, aunque normal es relativo. Era un día como cualquiera. Y de pronto sucedió. En medio de gritos ensordecedores, de vidrios rotos y rocío matutino me encontraba tratando de atar lo que parecía ser un juicio mental entorpecido. Así es, perdí la memoria. No, no sufrí un golpe contra el piso, ni mi cabeza rebotó contra el pavimento, mi realidad se estrelló con la desgracia.

No me he presentado, tengo muchos nombres.

Cada parte de mi vida se cuenta de acuerdo al momento que viví.

Prixton era mi mejor amigo, nos peleamos pues quería que le obedeciera en todo y siempre me metía en problemas, Andrew me ayudó en muchas ocasiones pero me llevó a lugares donde nunca debí haber entrado. Los primeros dos años, sus primeros dos pasos determinan lo que complementaron en mí. Como de costumbre mis padres tenían amistades en común las cuales por consiguiente sus hijos estaban determinados a ser mis mejores amigos, lo quisiera o no, y aunque me hicieron fuerte en muchos aspectos, debo admitir que los odio a los dos.

Andrew siempre es el primero en llegar a las reuniones, es bueno que sea puntual, antes no se quedaba tanto tiempo, pero después de la llegada de Prixton, que, de verdad no sé en que momento llegó y mucho menos en que momento sé convirtió en mi mejor amigo, este no permitía que Andrew se fuera. Aunque muy diferentes, comenzaron a tener muchas cosas en común y encontrar la manera de poder ser el alma de la fiesta y controlar todo lo que se les viniera a la mano, aunque claro, Prixton es el desgraciado de la historia.

De nuevo, no me he presentado, mi nombre es .....................................

"La identidad se pierde ante la identidad de los demás, y la recuperas cuando crees que has perdido, no has ganado nada pero tampoco lo tienes todo"