Vete a la Mierda (#malec)

Idiota

Magnus

Ya llevamos 12 horas buscando a Alexander y nada.

No puede ser posible que lo perdiera, solo me descuide un segundo, no puedo sacar de mi mente la desesperación al ver como lo metían inconciente a una camioneta y se alejaban a toda velocidad.

Matamos a los que nos atacaron, torturamos a uno que soltó la sopa; todo fue obra de Fade, los contrato especialmente para distraerme mientras se lo llevaban, él era el objetivo.

- ¡Por qué!

- Yo tampoco entiendo, Magnus,  pero debes calmarte

Ragnor trata de que no siga rompiendo cosas

- ¿Cómo voy a hacerlo?, puede estar sufriendo un sin fin de atrocidades

No quiero ni imaginar lo que le pueden estar haciendo, no, no, no, simplemente no.

- Ten fé, ya tendremos noticias

Abre la puerta uno de mis hombres sumamente agitado.

- Señor, el chico fue visto en un restaurante

- ¿Cuál?

- Jade Wolf

- ¿Qué?

- !Maldito desgraciado!

Fue una jugada jodidamente buena, lo buscaríamos donde fuera menos ahí, un buen plan.

Nos ponemos chalecos anti balas y tomamos metralletas, no me voy a rendir sin pelear.

El límite de velocidad se fue con Alec así que llegamos en menos de 3 minutos, bajamos todos, más de 30 hombres, no creo que puedan con nosotros.

Entro yo primero y lo que veo me deja de piedra.

Hay todo un ejército.

Pero lo más raro es que no nos prestan la más mínima atención, una mosca habría causado más revuelo.

- Dime que estas viendo lo mismo que yo Ragnor

Mi amigo tiene la boca abierta y se que si está viendo lo mismo que yo.

Alexander está en una mesa con Fade, no hay comensales en el restaurante excepto el dueño, un tipo moreno y grande que tampoco nos mira.

Yo super preocupado y éste mocoso está jugando ajedrez.

Los hombres del alemán están a su alrededor viendo todo con suma concentración, nos acercamos lentamente poniendo atención también, Fade hace un gesto y mueve un alfil, Alec tiene cara de póquer, ni siquiera mira el tablero, sólo tiene ojos para Fade, una furia me hace temblar de pies a cabeza pero la perdería si intervengo, después de un rato mueve una pieza.

- Jaque.

Hay exclamaciónes tan groceras que hacen arder mis oídos. Alec ganó.

- Mierda Sagrada

El alemán lo ve como una deidad, sacude la cabeza y asiente, Se levanta.

- Fue un honor Alec

Él también se pone de pie

- El honor fue mío

- Aquí tienes.

Saca un maletín y se lo entrega.

- Gracias, un placer hacer negocios contigo.

¿De cuando acá estos dos se tutean?

Fade voltea hacia mi.

- Hasta nunca Bane

Se retira con todos sus hombres, uno de ellos se lleva el tablero sin mover ni una pieza, supongo que quiere conservarlo intacto.

- ¿Qué mierda fue eso Alexander?

Me mira con incredulidad y enojo

- ¡Por una vez en tu vida deja de ser un idiota!

Me entrega de forma brusca el maletín y sale muy enojado, jamás lo había escuchado decir una mala palabra, veo a Ragnor.

- ¿Qué hice?

Se encoge en hombros.

- Ábrelo

Lo hago.

- ¿Es lo que creo que es?

Un documento firmado por Fade donde estipula que ni él ni nadie que le pertenezca volvera a poner un pie en el continente ni se acercarán a nosotros nunca más.

- Por eso jugaban

Se lo entrego a Rag y salgo, Alec ya está trepado en un auto, abro la puerta y alcanzo a ver que se limpia una lágrima rápidamente, volteo, Ragnor viene.

- Vámonos.

Partimos a la mansión.