Piratas

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Magnus



Llegamos molidos de tanto turistear, caminamos casi todo el día, fue divertido andar paseando con él, tengo como un millón de fotos en mi celular, al igual que tengo hambre.

- Que quieres cenar ?

- Mmmmm.- lo piensa un momento y yo ya estoy con el teléfono a la mano.- Pizza.

- Jajaja, Estás en Brasil y pides pizza.

- Que tiene de malo?

- Nada, pero pensé que querrías algo más exótico.

- Nop, quiero pizza.

- Pizza será.- Marco el número y encargo una pizza extragrande con orilla rellena de queso y peperoni, Alec fue a la sala a prender la pantalla, pone Netflix.

- Que quieres ver Maggs ?

- Lo que tu quieras está bien para mi. - me mira con los ojos entrecerrados.- Es que nunca veo películas.

- Estás de broma.

- Enserio.

- Nunca has visto Avengers?

- No.

- Harry Potter.?

- No

- El señor de los anillos ?

- No.

- Rápidos y Furiosos ?

- No.

- Resident Evil?

- No.

A este paso ya tiene los ojos muy abiertos.

- Y los Piratas del Caribe ?

- No.

- No!!?, no has visto los piratas ?

- No.

- Tenemos que arreglar eso ahora mismo,- Se pone a cambiar con el control mientras habla a nadie en particular y yo me divierto viéndolo despotricar hacia la sociedad- que le sucede a las personas hoy en día, no tienen conocimiento alguno por los buenos actores ni las buenas películas, mucho menos de cultura popular, vende drogas pero no sabe nada de en lo que se entretiene su clientela, por el ángel, quien puede vivir sin una dosis de Jack Sparrow circulando por sus venas, eso debería ser pecado.

Trato de no reír porque estoy seguro que cree que me he ido y no lo estoy escuchando, suena el timbre y voy a abrir. Me entregan mi pizza, saco refrescos y los llevo a la sala, Alec ya hizo todo un colchón en la alfombra con los cojines, puso unos muy grandes como respaldo y me espera ahí tirado, la película está en espera.

- Aquí está.

Pongo la pizza cerca en el suelo y le paso una coca cola, me acomodo junto a él y la reproduce, comemos entre risas por las tonterías que hacen los personajes, ese tal Jack es todo un desastre, a mitad de película la pizza se terminó y Alec está cómodamente usandome de almohada, me encanta, tiene un brazo alrededor de mi abdomen y yo uno tras su espalda dibujando círculos, estiro mi brazo y alcanzo una manta, la extiendo cubriéndonos, cuando termina ambos estamos un poco adormilados, nos levantamos y subimos a la habitación, destendemos la cama y nos metemos en boxers a ella, se acurruca en mi de cucharita y yo lo abrazo descansando mi mano entrelazada con la suya.

Ahora me doy cuenta que una pareja no es sólo tener sexo, son conversaciones graciosas, superficiales o profundas, es apreciar como ambos cuerpos encajan a la perfección a pesar de las diferencias físicas, es querer verlo siempre con una sonrisa y nunca triste, que su risa puede alegrar el día, es amar un abrazo, cuando muestra su lado vulnerable, lo es todo, desde el más mínimo detalle, como alza la cejas, como se elevan las comisuras de su boca, como respira al dormir, la manera en que los ojos conectan cómplices, esa actitud que tiene sólo conmigo, las palabras dulces que me desarman, las cosas que dice cuando cree que no lo escucho, todo es perfecto, todo es único, todo es especial.

Creo que ahora comprendo a los que consumen droga, una vez que la pruebas te haces adicto a ella y no la quieres soltar jamás, harías lo que fuera por tenerla, Alexander es mi droga, es tan delicioso, y es mío, sólo mío.

Vete a la Mierda (#malec)Where stories live. Discover now