Tu nombre

-X-

Vegeta no atinó a contestar nada, así que bostezó, cerró los ojos e intentó descansar. Goku giró el cuerpo entero hacia él e hizo sonar las silabas del modo menos infantil que pudo.

-Así que... ¿Te gusto desde que me transformé en Súper Sayajin?-

El ceño de Vegeta se frunció con la misma levedad que su voz. Hablar de emociones no era lo suyo y menos después de un arduo "entrenamiento."

-Sí que te pones hablador después del sexo. Quisiera decir que me sorprende.-

-¡Hablemos un poco más! Nunca habíamos tenido una conversación tan abierta antes.-

-Me gustas desde el primer momento en que te vi. Ahora déjame en paz.-

El más alto sintió una colonia de mariposas pululando por su vientre.

-¿Entonces por qué mencionaste el Súper Sayajin?-

-Esa atracción aumentó cuando te vi transformado, porque fue un golpe a mi orgullo. Me obsesionaba la idea de que un Sayajin gentil pudiera lo que yo no.-

-Ahora que lo mencionas, me recorriste con la mirada ese día.- Tras un breve intervalo, sonrió enamorado. -Me sentí tan animado al verte resucitado. Tuve más fuerzas para seguir con la pelea.-

-No podía creerlo. Estaba emocionado y ansioso de que Freezer sufriera las consecuencias de habernos esclavizado por tantos años, pero también estaba fascinado contigo. Pensé que estaba loco por haber recibido tantos golpes y haber vuelto de la muerte, que saldría de eso en pocos días. Por eso, cuando supe que probablemente habías muerto en Namek, me puse contento. Tenía mi venganza cumplida y sacándote de la ecuación, no había nadie capaz de superarme.- Se dio un momento para recordar. -Pero luego de enterarme de que seguías vivo no pude controlar mis ganas de encontrarte. Mis anhelos por ti crecieron. Salí a buscarte al espacio y fue frustrante volver sin nada, ni si quiera información.-

-Pero estuvo Bulma para consolarte.- Su tono fue desinteresado, aunque sincero.

-¿Kakaroto, estás celoso?- Por fin sonrió.

-No es eso, Vegeta.-

-Quién diría que te pondrías celoso tan rápido. Me confesé hace unas horas.-

-¿Seguirás... acostándote con ella? Me refiero a que... supongo que sí, pero...-

-No.- La intensidad de su pregunta le hizo sentir culpa y provocó que conteste con la más consistente verdad. -Seguiré durmiendo con ella, pero hasta un tonto como tú puede concluir que después de esto no sentiría nada teniendo sexo, incluso si lo hago.-

Dándose cuenta de que no planeaba contestar, Vegeta entró en pánico.

-Como sea, creo que ya debes saber que Trunks fue un error.-

-¡Vegeta, no digas eso!-

-A lo que me refiero es que no fue deseado en su momento. Estar con Bulma pareció inevitable. Ambos estábamos muy solitarios. Sabes que Yamcha la engañó.-

-Había escuchado.-

-Con el tiempo fui tomándole cariño a ella y al bebé, pero desde el principio en lo único que pensaba era en ti. Mil veces me acosté con ella para sentirme vivo, para sentir algo, pero no se compara en lo más mínimo a lo que sentí hoy, Kakaroto. Tú me haces sentir invencible con solo besarte, pero no puedo dejarla sola. Lo hice con Trunks, no haré lo mismo con Bra.- Hizo una larga pausa. -¿Me estás escuchando?-

-Sí, pero no tienes por qué darme explicaciones.-

-¿Sigues sin arrepentirte?-

Tardó en responder y el príncipe sintió que se hundía por cada segundo hueco, sin una respuesta positiva. Si era negativa, no quería oírla.