-No quiero irme, mami -susurré abrazándola.
-Ya, cariño, mañana iré al apartamento -susurró tocando me cabello.
-Prométeme que irás todos los fines de semana a hacerme comida -mamá rió y la abracé aún más.
-Claro, y tu tienes que venir aquí también -besó mi mejilla y sonrió- Blaire te está mirando raro, ve con ella porque de seguro después de esto piensa que eres gay.
-Te quiero -besé su mejilla de vuelta y tomé a Alice en brazos- Fueron unas lindas semanas, pequeña.
-¡Eddie, te voy a extrañar! -exclamó.
-Hombre, sí, te voy a extrañar a ti también -rió papá abrazando a Nick.
-Papi, eres el mejor -papá rió y golpeó la espalda de Nick.
-¡Blaire! -chilló Theo corriendo hasta mi novia.
-¡Hey, hey, aleja tus manos! -exclamé.
(...)
-¡Hogar dulce hogar! -grité entrando al apartamento.
-Aw, estoy muy cansado -gruñó Nick tirando su maleta.
-¡Ve a tu habitación entonces! -exclamó Blaire divertida.
-Disimula, amor -susurré en su oído. Blaire frunció el ceño y besó mis labios.
-Es injusto que no tenga a nadie a quién besar -bufó- Iré a la habitación por sí me necesitan, nada de ir a comprarles condones o eso -dijo y se fue.
-Espera diez segundos y se escuchará un grito -reí.
-Uno.
-Dos.
-Tres.
-Cuatro.
-Cinco.
-Seis.
-Sie...
-¡KEEEEEEEEEELS!
-Allí está -rió- Lo mejor es que le dije que se pudiera un vestido así que Nick debe estar besándola justo ahora.
-Quiero ir a escuchar, además, quiero ver a mi cuñada.
-No seas así, Edward -dijo riendo.
-¡Vaaaaamos, a demás, quiero ver si es igual de guapa que tu! -golpeó mi hombro y caminó hasta la cocina.
-Hay que llevar a Izzy a mi habitación -dijo mientras bebía agua.
-Claro que no, Izzy dormirá conmigo -reclamé.
-Edward.
-Blaire.
-Yo soy la madre, las hijas duermen con sus mamás -sonrió.
-Pero las hijas quieren más al papá -Blaire hizo una mueca sintiéndose ofendida y golpeó (por quinta vez en el día) mi hombro.
-Tu siempre olvidas ponerle agua y comida.
-No es cierto -me defendí.
-Si es cierto.
-¡Eddie! -miré la puerta y mis ojos se abrieron a más no poder. Wow, ahora entiendo a Nick, esa chica es caliente.
-Mierda, son iguales -susurró mirándonos a ambos.
Ella no parecía una chica con problema en sus piernas, estaba de pie y sus piernas eran largas, y lindas. Maldita sea, estas hermanas si que son calientes.