Negándome Al Amor (CAMREN)

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POV Camila

Uno, dos, tres, cuatro y cinco pasos me llevo al caminar de la cocina al sofá de la sala. Estábamos en un lugar nuevo, mi padre y yo nos habíamos mudado recién, luego de que en Manhatan mi mamá y mi hermana murieran quemadas en un auto por un accidente, ¿que si lo había superado? pues no aun me cuesta entender que ya no están y que debo aprender mas a valerme por mi sola.

Le ofrecí el emparedado y un vaso de jugo a mi padre, lo sostuve por unos segundos y sentí como los tomo, me sentí bien al darme cuenta que al menos podría darle una simple merienda a mi padre y servir la comida.

Ya sabia ubicarme en la casa, sabia donde estaba mi habitación, la de mi padre, la cocina, el baño, la sala, la puerta delantera y la trasera; antes que mi madre muriera había estado enseñándome a cocinar, logre aprender hacer emparedados, ensaladas, panquecas y omelet.

Se como vestirme, como colocar mis zapatos y peinarme. No siempre fui ciega, perdí mi visión a los diez años por una extraña degeneración en mis córneas, aun no se encuentra la cura pero pienso que lo ultimo que se pierde es la esperanza que de que con el tiempo, la medicina avance y descubran una cura aunque alguna vez uno de los médicos hablo sobre un trasplante.

Tengo diecinueve años, he acabado la escuela con el método de brailer no fue fácil al principio pero lo logre, mi padre trabaja como taxista no vivimos bien ni mal nos da lo suficiente, pero últimamente ha tenido problemas de salud y con esto de mi madre y mi hermana se ha visto mas afectado.

Alejandro:_Kaki tendré que salir por unas medicinas en un rato ¿quieres ir o te quedaras? -lo escucho hablar con la boca llena.

Camila:_Es mejor que vayas tú, sabes que si voy tardamos mas y se hará de noche. -dije contando los pasos para volver a la cocina por mi emparedado.

Alejandro:_No me molestas, asi sales y respiras aire fresco. -hablaba desde la sala aun sigue con la boca llena, vaya si que tenia hambre.

Camila:_No pa, ve tranquilo. -digo tanteando hasta encontrar un vaso para servirme jugo.

Alejandro:_Como quieras cariño. -hablo una vez mas.

Serví mi jugo tantie hasta llegar a mi plato y comencé a comer mi emparedado, estaba delicioso. Luego de que termine de comer lave lo que había ensuciado y guarde en el refri la jarra de jugo, me fui a mi habitación y coloque la radio a bajo volumen, camine hasta mi cama y me acosté.

Últimamente estaba pensando mucho en mi futuro, se que mi ceguera no es una limitación para estudiar una buena carrera, podía hacerlo por audio vídeos y grabaciones pero si había un verdadero problema... el dinero, era demasiado costoso estudiar y no podía hacer como los demás... Trabajar para pagar mis estudios, con mi condición seria complicado encontrar trabajo.

Desperté luego de escuchar ruido fuera de mi habitación, era el típico ruido que hace mi padre por la mañana antes de irse a trabajar, alistándose y haciendo el desayuno. Me levante busque la toalla ropa limpia y de una me fui al baño. Veinte minutos después ya estaba duchada y peinada, regresando a mi habitación para devolver la toalla y la ropa sucia en la cesta de lavabo.

Conté los pasos para ir a la cocina, olía realmente delicioso, escuche la voz de mi padre y Sonreí.

Alejandro:_Buenos días princesa. -se acerco y me abrazo le correspondi- ¿Como amaneces? -me guió hasta una silla y me senté.

Camila:_Buenos días papá, bien con mucha hambre . -ambos reímos.

Alejandro:_Camila, tú, con apetito como siempre. -suspiro- Al menos me alegra que ya lo recuperaste y estás bien, no imaginas como me preocupe porque después de lo que paso con tu madre y tu hermana dejaste de comer. -recordé eso y baje mi cabeza, era verdad me había deprimido un poco no es para menos.