Days [TodoDeku]

Primera Cita. 3/3

Narra Midoriya

Caminamos por el centro comercial, ya es noche, incluso fuimos a ver una película. Shoto es muy dulce, sus palabras son siempre las indicadas y es más romántico de lo que alguna vez pude imaginar, pero no me toca, se mantiene a una distancia y no me ha besado en toda la cita (me besó cuando me recogió pero ese no cuenta), tal vez le da pena que lo vean conmigo, es decir, a mi me da pena dar muestras de afecto en público además es de mala educación, pero no me importaría tomarle la mano o un pequeño beso.

¿Tanto le importa que lo vean conmigo?

¿Es por el hecho de ser hombres?

Debo dejar de darle vueltas a esto.

— Sh-Shoto...

— ¿Sí?

— ¿Puedo tomar tu mano? Si no quieres no, bueno, tal vez no quieras, digo no lo haz hecho en toda la cita, y ahora yo te lo pido porque yo quiero pero si no quieres no, ¿es porque estamos en público? ¿Te da pena salir con otro hombre?... ¿salir conmigo?...

— Izuku, para, deja de murmurar. Obviamente no me da pena salir contigo, se lo presumiría a todos pero temo que si lo hago se enamoren perdidamente de ti, digo  ¿quién no lo haría?—río. Me toma del rostro con sus manos grandes— Pensé que te sentirías incómodo si lo hiciera en público, ya veo que no, perdón, debí preguntarte antes de decidir no tocarte.

— Está bien, no pidas perdón— aprieta mis mejillas— Shou-chan~—hablo como puedo.

— Ah... eres tan adorable, cariño, ¿puedo besarte?.

Asiento.

Cierro mis ojos, siento la proximidad de mi novio, y, poco después, sus labios sobre los míos. No se mueve, sólo posa sus labios en los míos. Se queda unos segundos y se aleja.

— Vamos a la siguiente parada.

— V-vamos.

Llegamos, Shoto me tapó los ojos.

Subimos unas escaleras, caminamos, abre una puerta, y entramos.

Se coloca detrás de mi.

Me quita la venda.

— Es mi casa, Izuku.

— Es muy linda, Shoto—es grande, con un estilo japonés clásico.

— Gracias... camina, en confianza

Cierra la puerta y cuando entro un poco más y volteo, veo una mesa elegantemente decorada, con dos platos y dos copas, con velas y una nota.

— Oh... No, Shoto... esto es tan lindo—volteo y lo abrazo.

— Todo para ti. También es un festejo por cuatro meses de relación.

— Ahora me siento mal, yo no hice nada, ni te traje algo—digo preocupado. No me lo imaginé, no festejamos los otros meses, no pensé que festejaríamos este.