Capítulo #2

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- ¿Me estás siguiendo?- era el chico de la cafetería solo que ahora iba sin escoltas pero con su arma en la cintura.

- Emm no, solo pasaba por aquí y te encontré, ¿por que?

- Como que por que, ¡me das miedo!- le respondí.

- Tranquila que mis escoltas no están conmigo, pero eso sí, hay que ser respetuosa por que sino mi amigo se pone como loco y se le puede ir la mano.

- Me quedo claro, gracias.

- Y por que tan... ¿arreglada?

- Tengo una fiesta y estoy a punto de entrar a ella así que adiós.

- ¿Vas sola?

- Si y así seguirá siendo por mucho.

- Ya lo veremos- sonrió- Que la pases bien Kenzie.

- ¡¿Como sabes mi nombre?!

- Yo lo sé todo linda- me guiño el ojo y se fue, yo entre a la casa donde la música estaba a todo volumen y la gente a tope.

- ¿Por que tardaste tanto?- me dio un vaso de vodka.

- No encontraba estacionamiento, Hay mucha gente, Samantha es más social de lo que creí.

- Por cierto- se puso al lado de un chico- Te presento a Stiven, un nuevo amigo, Stiven ella es mi mejor amiga Kenzie.

- Un gusto- dijo.

- Lo mismo digo- sonreí y él igual.

- ¿Bailas?- preguntó.

- Claro, con gusto- me llevo a la pista y nos empezamos a mover.

*****
- Kenzie estas muy mal- dijo sosteniendome ya que yo no podía quedarme de pie sola- Te dije que no le recibirás alcohol a Stiven

- Sarah relajate, además está muy bueno.

- ¿Donde está el auto?

- No me acuerdo, yo no me quería ir.

- Dame las llaves, Kenzie, ¿y tu bolso?

- Creo que... lo olvide- reí.

- Por Dios... muy bien, te vas a sentar en esta banca y no te vas a mover de aquí ¿me entendiste?

- Aja- me senté en la banca y me quedé quieta viendo como Sarah se iba.

* al día siguiente *

Desperté con mucho dolor de cabeza, me levanté de la cama y fui al baño, me mire en el espejo y estoy horrible así que me metí a la ducha de inmediato además tengo que salir hacer el super.

Luego de vestirme, fui caminando hacia el supermercado con el presentimiento de que alguien me está siguiendo, volte y en efecto, una de las camionetas negras que se estacióno ese día en la cafetería está atrás mío... Bueno ahora delante obstaculizando mi camino, de ella se baja el chico de ayer que aún no se su nombre.

- Te encuentro hasta en la sopa, déjame en paz, chico sin nombre- dije retrocediendo.

- Ya te dije que no es bueno que sepan mi nombre, ¿tú a donde vas?- me preguntó.

- Que te importa- uno de sus escoltas se me acercó con el arma en la mano.

- Déjala en paz, ella acostumbra a ser así de agresiva, ¿verdad?- medio sonrió.

- Con los que no conozco sí, ahora con permiso que me tengo que dar prisa.

- No, tu vienes con nosotros.

- ¿Que?- dos de sus hombres me subieron a la camioneta y me vendaron los ojos- ¡estas loco! ¡Sueltame ahora!- mi celular vibró.

- Vamos a ver quien es- tomó mi celular.

- ¡Dame mi celular!- le dije.

- un tal Stiven, ¿quien es?

- Alguien que conocí ayer, bueno que te importa?

- a ver dame un segundo, ¿Hola?

- ¡¿Que haces?!

- Emm no... ella no está... soy... soy su primo... ¿le digo algo?... ok, está bien- colgó- Kenzie.

- Que.

- Dijo que te espera en el centro comercial a las cuatro pero adivina que.

- ¿Que?

- No irás, por que a esa hora aún estarás en mi casa.

- ¿Perdón?- si no fuera por que estoy amarrada juro que me tiro del auto.

- Me imagino que estas pensando en tirarte de la camioneta ¿verdad?

- ¿Tu lees mentes o que?

- Con todas las que llevo a casa pasa lo mismo, dudo que contigo sea diferente.

- ¡¿Siempre llevas a chicas a tu casa?! ¡Estas enfermo!

- Un poco, tranquila que mi casa es muy acogedora- los demás rieron.

*****
El auto se detuvo y las puertas se abrieron, en cuestión de segundos ya no tenía la venda, estábamos en una gran mansión con mucha gente caminando de un lado a otro.

- ¿Donde estamos?- pregunté.

- En mi casa niña- respondió mientras él revisaba su celular.

- ¿Por que toda la gente está armada?- lo mire de arriba abajo- ¿Quien eres?- sonrió, se acercó un hombre joven y me miro.

- Hola, ¿nueva conquista?

- Siempre- dijo el que me trajo aquí.

- ¿Disculpa? ¿Que te hace pensar que me voy a enamorar de ti? ¡Estas loco!

- Si ajá todas dicen eso- me dijo sonriendo- esa no es la idea.

- ¿Todas? ¿Quienes son todas?- pregunté.

- Lo ves Ander ya siente celos- dijo el otro chico y el tal Ander lo miro mal ya que había dicho su nombre.

- Lárgate de aquí.

- Lo siento no sabía que ella...

- Vete antes de que sea tarde...

Dangerous love: Ander  [1]Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt