Capítulo #17

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Desperté con las sábanas tapando todo mi cuerpo, anoche fue algo lindo, al menos para mi si lo fue, wow mi primera vez con un mafioso que está bueno nunca lo imaginé así.

Me giré esperando encontrar a Ander, pero no estaba, ni el ni su ropa mucho menos el arma con la que casi tira mi puerta... se fue, supongo que llamará más tarde ahora tengo que arreglarme para ir a trabajar, otro semestre se viene y no quiero tener que recibir llamadas diciendo que tengo un retraso con los pagos.

*****
- Kenzie, a la mesa ocho- Sarah me dio una bandeja con dos cafés y dos pasteles de vainilla- ¡luego este a la mesa cuatro!

-¡Enseguida!- llevé la primera bandeja a la mesa, era una pareja y el chico me quedo mirando mientras la chica me miraba mal, muy mal- dos cafés en leche y dos pasteles de vainilla.

- muchas gracias- el chico miró el nombre en mi tarjeta- Kenzie.

- Con gusto- sonreí y me retiré, fui al mostrador a recoger el otro pedido.

- Oye creo que te vienen a buscar- dijo Sarah y yo sonreí pensando en Ander- Y no... no es tu mafioso es...- me giré y era la chica de antes.

- ¿Te ayudo en algo? ¿Faltó alguna cosa?

- No, no faltó nada tranquila solo quiero saber por que tan sonriente con mi novio- frunci el ceño.

- Yo suelo sonreirle a los clientes, me parece que es mejor que ser cortante y mal encarada.

- Ósea ¿que te gusta andar de fácil con todos?- suspire y cerré los ojos por un segundo tratando de mantener la calma.

Necesitas el trabajo, Comportate.

- No es eso, señorita... sólo.

- mira cállate- tomo un jugo del mostrador- ¡esto es para que aprendas a no ser una zorra!- me tiró todo el jugo encima.

- Le voy a pedir que se retire de inmediato- dijo Sarah poniéndose a mi lado, el chico volvió del baño al parecer y se acercó a nosotras, que vergüenza la gente en vez de comer en paz solo mira la escena con mucha atención.

- ¡¿Te has vuelto loca?! ¡¿Que te hizo?!- Le dijo su novio.

- ¡Te miro muy sonriente!

- Es lo normal, siempre lo hacen cuando con todos los clientes... ¡Me cansé de tus celos! Ahora vámonos que ya le arruinaste el día a la pobre chica que sólo quería ser ¡amable!- me miró- Por favor, perdona ella suele ser así de celosa y loca.

- Tranquilo, sólo... Me limpiaré- dije y ellos se fueron.

- ¿Estas bien?- pregunto Sarah.

- Si, menos mal no fue algo caliente, me iré a cambiar.

- Te acompaño- fuimos a los vestidores y yo me quite el delantal al igual que la blusa- y ¿como vas con tu novio?

- ¿Novio? ¿De que hablas? No tengo novio.

- ¿Y el tal Ander? Su hermano está buenísimo eh.

- Los tres están buenos.

- ¿Tres?

- Si, Ander, Aryan y Aron... son tres hermanos.

- Y todos empiezan por A, vaya, bueno pero ¿como vas con él?

- Ayer- sonreí- ayer fue increíble.

- Algo me dice que ya te lo has tirado- asentí- ¡Que bien! Ya no eres Virgen- la mire mal- siempre quise decírtelo.

- Lo mal fue la manera en como llegó a mi casa, ¡casi tumba la puerta a tiros!

- Pero lo bueno es que has cogido con un tio bueno y con dinero.

- Definitivamente estoy enamorada.

- No puedo hacer nada al respecto así que...- terminé de vestirme y volvimos al turno.

Cuando estaba sirviendo dos chocolates, dos camionetas negras se estacionaron frente la cafetería, de ellas bajaron Aryan y Aron Pero no Ander.

- Que raro- dije.

- Te los dejo a ti eh- dijo mi amiga, me acerqué a ellos y sonrienron ambos.

- ¡¿Trabajas aquí?!- preguntó Aron sorprendido.

- ¿Donde crees que conoció a Ander?- le dijo Aryan.

- Tienes razón, aquí nos conocimos, no de una manera muy amistosa pero algo es algo.

- De seguro entró con sus hombre y armado ¿verdad?- asumió Aron y yo asentí.

- Bueno, ¿que os traigo?

- ¿Que tal el café de aquí?- preguntó Aryan.

- Es tan bueno que esto siempre está a tope de gente- sonrió.

- Que bien, entonces quiero uno- miré a Aron.

- ¿Y tú?

- Yo quiero limonada, para mi el café es solo para la resaca- sonreí.

- Enseguida les traigo- volví al mostrador y le di el pedido a Sarah.

- wow que saludables- reí y ella preparó las bebidas.

*****
Mientras los hermanos tomaban el café y la limonada yo me dedicaba a limpiar las mesas que la gente desocupaba, llegué a la de ellos de nuevo.

- Trabajas demasiado Kenzie- dijo Aryan.

- Si no es así no podré terminar mi carrera.

- ¿Y tus padres?- preguntó Aron.

- De ellos no quiero saber nada- medio sonreí y él se quedó callado...

Dangerous love: Ander  [1]Where stories live. Discover now