Capítulo #35

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Salí de la habitación y busqué a Sarah, sólo se me ocurre un lugar y queda justo al lado de la habitación de Ander, abrí la puerta con cuidado y el cuarto de Aryan estaba hecho un desastre, botellas tiradas por todas partes, la ropa de él y la de Sarah en el balcón, luces de Navidad en el espejo y un olor a alcohol por toda la habitación, me acerqué a la cama y en efecto estaba Sarah con el brazo de Aryan en su cintura, la moví y ella despertó.

- ¿Kenz? ¿Aún sigues aquí?- se movió con cuidado y yo le di su ropa.

- Si, vine por ti, tenemos que irnos ya.

- ¿Por que?- miro a Aryan- se va a enojar si me voy así sin más.

- Créeme no es el único pero ni modo.

- Por que tanta prisa- se terminó de vestir.

- Será incómodo sentir miradas de mucha gente si nos ven bajar con ellos créeme, venga vamos, luego le explicas- salimos de la habitación y bajamos al salón, habían varias personas tiradas en el suelo durmiendo al igual que en el jardín, todo está hecho un desastre.

- ¡Que asco!- la miré y había pisado vomito.

- Señal que fue una buena fiesta.

- Eso sí, ha sido la mejor en la que eh estado.

- ¿ Lo dices por Aryan?

- No, por muchas cosas no todo es Aryan, en cambio tú y Ander se divirtieron mucho encerrados en esas cuatro paredes, ¿verdad?- sonreí mientras caminábamos a la salida de la gran mansión.

- ¿Tú que sabes?

- A ver espera- sacó un espejo de su bolso y me lo dio, mire mi cuello y tenía una marca hecha por Ander obviamente.

- Mierda, eso no tenía que pasar pero bueno, con maquillaje se arregla.

- ¿Le diste el regalo?

- Si, lo deje en su mesa- salimos de la casa- y ¿ahora?

- Un taxi, por que esta vez Gibran está en la mierda con todo lo que bebió ayer, somos las únicas despiertas ahora mismo.

- Creo que deberíamos pedir el taxi cuando estemos más lejos de la casa.

- ¿Quieres caminar?

- Recuerda que es casa de mafiosos- lo pensó por un momento.

- Tienes razón.

Caminamos por un buen rato hasta que estuvimos a una distancia prudente para pedir el taxi.

Ander

Desperté con dolor de cabeza, nada raro, para mi sorpresa Kenzie ya no estaba, ósea cogimos como nunca anoche y ahora se larga, ¿que hice mal?.

Me senté en la cama y note que en la mesita de noche, había una caja negra, la tome, leí la tarjeta y sonreí, pensé que su regalo había sido lo de anoche, la abrí y había un llavero en forma de corazón y dentro de el tenía las letras A y K entrelazadas, lo que más me sorprende dio es que era oro puro, se reconocer muy bien cuando es algo de fantasía y algo original, se perfectamente que es oro. Sin pensarlo tome las llaves de la casa y lo puse. Perfecto, pero ahora quiero saber la razón por la cual Kenzie se fue.

Luego de darme una ducha y vestirme, fui al cuarto de mi hermano, el cual estaba ordenando el desastre que había en su habitación.

- No puedo creer el desastre que hay en esta habitación, ¿de donde salieron esas luces?- dijo recogiendo todo.

- Lo mismo pregunto yo- miré la cama y note que estaba vacía- no puedo creerlo, Aryan Rivers no durmió con nadie ayer.

- Si lo hice, dormí con Sarah pero cuando desperté ya no estaba.

- Kenzie igual, se fueron juntas- le ayudé a levantar todo, él puso una mano en mi espalda y yo me quejé del dolor.

- ¿Que tienes?- levanté mi camisa- ¡Madre mía! Buen trabajo eh.

- Duele- marcas de Kenzie hechas con sus uñas.

- ¿Y? Eso significa que lo hiciste bien.

- ¿Tan bien que se fue apenas despertó?

- Hoy las buscaremos y ya está.

- Le voy a escribir, para saber si esta en casa.

*****
Kenzie

Estaba sentada en el estudio tratando de acabar el trabajo que tenía para mañana, estaba vestida con un pantalón de chándal, una blusa corta que dejaba ver parte de mi abdomen y una coleta alta en el cabello. Tenía papeles por todo el suelo al igual que libros, estoy tirada en el suelo al borde de tener una crisis de estrés con todo esto, no se por que escogí está maldita carrera. Aún no se como voy a terminar todo esto.

Tocaron el timbre, mire la hora en mi portátil y eran las cinco y media de la tarde, quien puede ser un Domingo a esta hora, por Dios, me levanté del suelo y fui a la puerta, abrí encontrandome con Leandro.

- Emm, ¿como supiste que donde vivo?

Dangerous love: Ander  [1]Where stories live. Discover now