Cap 5

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Pasó una semana, el joven rubio se encontraba antipático ante aquella situación, su vida se derrumbaba, la carrera que su padre tanto había cuidado para él se había perdido en cuestión de segundos, su anhelo por convivir con personas normales y estudiar en un colegio igual, quería desaparecer.

-tú porque sigues aquí?- pregunto adrien

Se encontraban en el cuarto de hospital, luka ayudaba a guardar algunas cosas en la maleta de adrien, solo ellos dos, el joven rubio mantenía su vista a una ventana que daba al exterior, mostraba un bello día; la pregunta recorrió por la cabeza de luka y este se acerco al joven omega tomando su mano aunque este no despegara la vista de aquella alejada ventana.

-adrien...se que somos aún muy jóvenes, tal vez nos equivocamos, fuimos muy rápido, pero...ahora quiero protegerte, añorarte y poder estar contigo el resto de nuestras vidas- suplico el joven alfa besando la mano del omega

Adrien lo miró, los ojos verdes del rubio estaban llorosos, no sabía cómo reaccionar, no sabía que decir, no sabía si odiarlo y amarlo.

-nadie me a preguntado cómo me siento- susurro mirando a los ojos de él alfa

Este lo miró sorprendido y acaparó en un abrazo escondiendo el rostro del rubio en su pecho.

-puedes decírmelo todo, yo te escucharé- susurro en su oreja

-trabaje durante años para poder hacer feliz a mi padre, rogué por meses poder ir a una escuela normal, me escondí tras la fachada de un alfa, hice todo eso para acabar así?- se quejaba el rubio mientras intentaba parar sus lágrimas

-asi, como?- decía confundido luka intentando mirar los ojos de adrien

-se suponía que era un omega defectuoso, que mi celó ya tal vez no llegaría, que mi olor sería muy tenue, en cambio de eso....estoy embarazado, tengo dieciséis años- decía mientras un mar de lágrimas lo acompañaban

Luka lo reflexionó, era cierto, todo lo que había que tenido que pasar aquel omega, pero no podía acabar todo ahí, le mostraría lo bueno del mundo, le enseñaría a amarse y amar a otros; luka se levantó y tomó el rostro de adrien entre sus manos obligando a que este lo mirara fijamente, la punta de sus hermosos ojos verdes se encontraba roja, su nariz y mejillas igual, sus labios rosas y carnosos brillosos y su expresión, como la de un pequeño haciendo berrinche, el alfa interior de luka le pedía a gritos hacerlo suyo de nuevo pero su parte razonable le decía que en esos momentos solo debía ayudarlo, le sonrió tiernamente y con sus dedos pulgares acarició sus mejillas.

-déjame estar contigo, no estás solo, yo ayudaré en todo lo que me sea posible, solo...siempre quédate a mi lado- luka le volvió a sonreír

Adrien lo miró directo a los ojos, tenía un gran ojos para detectar mentiras pero esa había sido la verdad más sincera que alguien le había dicho en su vida, asintió levemente y luego sintió como el alfa pegó sus labios en un corto y delicado beso para separarse de él y recoger su maleta.

-voy llevando tus cosas cariño, no tarde- comentó un alfa emocionado

Él omega se sonrojo completamente y lo vio salir por la puerta, tal vez aquella no fue la mejor decisión de su vida pero era la más conveniente en aquellos momentos, toco su estómago, aún no podía sentir nada, algún movimiento o amor maternal, nada.

I kissed a boy Where stories live. Discover now