Cap 10

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Adrien sabía, tenía en cuenta, su padre y luka tenían un trato, él solo era un objeto, un recipiente. Admitiría que sentía algo por aquel pelo negro con puntas azules pero no algo tan fuerte como para perdonar el echo de que fuera un simple trato.

Cuando se dio cuenta su expresión estaba fruncida y miraba bruscamente la ropa de bebés haciendo llamar la atención de muchas personas en la tienda.

-adrien, cariño, te encuentras bien?, acaso tú y los bebés quieren un helado- comentó el pelo azul sonriente con intensiones de calmar a su "pareja"

Los susurros dentro de la tienda se hicieron presentes, omegas lo miraban extraño, era muy joven, el lo sabía, sentía como poco a poco se hacía cada vez más pequeño, la presión social no la soportaba, sus ojos se cristalizaron; tal vez por la marca o por el echo de cómo se encontraba luka lo noto y rápidamente lo tomó de la mano y escondió en su pecho dando pequeñas porciones de fermonas para tranquilizarlo, sacando de aquel lugar rápidamente.

Adrien no entendía, porque se empeñaba a protegerlo, porque traía a sus bebés en su vientre, porque aquel aroma solo perteneciente a él lograba calmarlo tan fácilmente; ya se encontraba fuera de aquel local, los susurros habían cesado, las manos del alfa se acomodaban en su cuerpo, una en su cintura, protegiendo todo su ser, otra en su nuca, con sus dedos dentro de su rubio pelo, acariciando, su cabeza recargada sobre la rubia, encajaban perfectamente cuál rompecabezas, porque seguía siendo de esa manera.

-ya déjame- grito el rubio soltándose del agarre

Adrien se volteó y tomó rumbo a otro local, el alfa sorprendido y confundido lo siguió, ambos se sentían pésimos, no entendían porque el otro actuaba como lo hacía; adrien llevó su mano a su vientre y lo acaricio, había echo muchos movimientos seguidos y al parecer las cosas dentro de él no les gustaba eso.

-cariño estás bien?- pregunto luka acercándose rápidamente al ver como adrien se retorcía un poco

-creo que no...- decía mientras se retorcía del dolor

Su pequeño vientre se endureció, era extraño, luka rápidamente fue por alguna silla de ruedas más cercana y sentó a su omega en ella, tomando su celular marco rápidamente al padre de adrien el cual no dejó que sonara la primera timbrada cuando contestó.

-ocurre algo?- contestó de forma fría este, algo común en el

-estaremos en el hospital- comentó este alfa un tanto desesperado empujando la silla de ruedas del omega el cual alertó a su padre cuando soltó un grito ahogado

-nos vemos allá- le respondió y corto la llamada

Luka guardó su celular y rápidamente se dirigió al estacionamiento donde se encontraba el auto que Gabriel les había dado para ellos.

I kissed a boy Where stories live. Discover now