Mi Misteriosa Reencarnación

Capítulo 4: Ñenduit

Capítulo 4 - Ñenduit

"Hermana, no tengo idea de que estas hablando"

Esas fue lo que me respondió respecto a mi pregunta sobre la magia y/o maná de este mundo, no hay palabras con las que pueda ser capaz de explicar lo confundido que estoy ahora, si de verdad aquí nadie sabe que es el maná y menos aún saben como manejarlo, hasta los Horvath se preguntaron si acaso no había leído muchos cuentos de hadas. 

Pero si ese era el caso, como es que esos alborotadores están realizando tal destructivo y claramente sobrenatural espectáculo?

Por la impresión y confusión, apenas era capaz de entender lo que pasaba en mi entorno, solo sabía que era llevado por Silvia en sus brazos mientras otras personas corrían junto a nosotros en pánico. Luego de varias cuadras, todos entramos en un edificio de dos pisos con gruesos muros grises. Una vez nos sentamos en un largo banco de piedra, por unos momentos nos mantuvimos todos sin decir nada mientras el cuarto en que estábamos retumbaba como si estuviéramos a mitad de un bombardeo de la Segunda Guerra Mundial, parece que fue hecho específicamente para proteger a los civiles de ciertos desastres, como este. 

Entonces Silvia se dirigió a nosotros e intentando mantener la calma nos dijo:

-Bien familia, todo lo que debemos hace es esperar a que las autoridades correspondientes se hagan cargo, cuando ya no haya peligro, entonces vendrán a avisarnos.

Ralf y Eisack entendieron rápidamente, menos yo, seguí sin entender lo que pasó allá atrás. Ahora ya me siento harto, nadie me esta explicando nada, ni siquiera esta mujer que dice tanto ser mi madre que me ama con todo su ser, quiero saber todo ya.

-Madre! -la llamé, la jeruz parecía algo sorprendida, ahora que lo pienso, siempre la he llamado mami hasta este momento.

-Que sucede hija? te ves algo molesta... -dijo ella.

-Si estoy un poco molesta, quiero que me digas como esos sujetos lograron hacer todo eso hace un momento, quiero una explicación completa y sin omitir nada, solo aceptaré eso y nada más madre!

Silvia, al igual que su hijo y esposo, se mostraron sorprendidos por lo dicho por Erina, era casi palpable la determinación en su voz, ella sabía muy desde el interior que no podía seguir evitando las preguntas de su hija, este era el momento de sincerar. Y soltando un profundo suspiro le contestó:

-Tienes razón hija, lamento haber mantenido esto tan en secreto como hasta ahora, pero soy alguien muy tradicional, y solo quería hablarte tanto cuando tuvieras la edad como cuando me fuera posible poder llevarte a este ciudad para que así poder hallar el momento más "adecuado" para poder hablar de la "Gran Gloria" de todo Somari, que son los Ñenduit.

-....Eh? -murmure.

-M-muy bien, Ñenduit, que es el termino para referirse a las prendas especiales fabricadas a partir del pelaje proveniente de unas variadas criaturas llamadas "Betsao", cuyos pelajes les otorgan de ciertas habilidades increíbles en la parte de su cuerpo en que se hallen, como modificando temporalmente tal parte específica del cuerpo. Por ejemplo, los Hassor poseen un pelaje marrón claro desde sus patas hasta sus antebrazos, que les otorgan de fuerza extraordinaria que se activa por su voluntad, lo que hace que cada raíz de los cabellos ingresen bajo su piel sin hacer daño a la extremidad, y entonces la modifican su funcionamiento de manera temporal, aumentando así su fuerza de golpe. Aunque cosas como la fuerza varían según la especie en cuestión. Todavía no se comprenden plenamente como trabajan. Los que los manejan son llamados "Teinduts".

"Con que esos son, um, de alguna manera estos pelajes pueden generar cambios internos en el cuerpo de uno, una cosa semejante no sería posible sin magia pero como desconozco tanto su pleno mecanismo de funcionamiento así como el tipo de ADN que tienen las personas de este mundo, así una cosa como esta podría ser factible para ellos"