Capítulo 23: Barbacoa.

1.5K 45 4
                                    

Una semana después

“Barbacoa para comer y piscina en mi casa, ¿os apetece?”

¿Lo dudas? ¿Qué llevamos? – Niall

Esta semana los chicos han estado en el estudio, grabando, organizando y finalizando el que será su tercer disco. Por lo tanto no han tenido mucho tiempo para nosotras. No he hablado casi con ninguno en toda la semana. De vez en cuando decían alguna burrada por el grupo, pero ya no volvían a contestar. La peor parte me la he llevado con Harry, con él antes de esta semana hablaba a casi todas horas, y se me ha hecho bastante pesado. Y eso no es una buena señal.

Esta semana la he pasado la mayor parte con mi padre y con las chicas. Se la ha tomado de vacaciones con el motivo de estar conmigo. Estamos empezando a descubrir que tenemos muchas cosas en común y me estoy dando cuenta de que él no se merecía tanto odio por mi parte. Supongo que quiera o no tengo que entender que el amor a veces se acaba por cualquier razón. En el caso de mis padres el motivo fue que no se entendían, discutían por todo, por cabezotas, y ninguno de los dos cedía a nada.

“De ahí que yo sea una cabezona, gracias eh, papá…” Le decía el otro día. Tampoco eso quería decir que también me vaya a pasar a mí en un futuro. 

“A la 1 en mi casa y lo empezamos a preparar todo. Creo que tengo aquí de todo Niall”

“No importa, algo encontraremos para llevar” - Liam.

Me llegó un mensaje a parte. Vi la conversación con Harry marcada y una sonrisa apareció en mi rosto, mira que soy pava. Pero es que llevo 4 días sin intercambiar ni un simple hola.

“Te echo de menos nena”

“Yo también, no tardéis en venir”

“Vale, no tardo”

Al minuto recibo otro mensaje, Harry.

“Ábreme, que ya estoy”

Bajé corriendo de la cama al segundo de leer el mensaje. Corrí escaleras abajo, procurando de no romperme los dientes en el intento y abrí la puerta. Un sonriente Harry me recibía con los brazos abiertos y yo literalmente me tiré a él gritando de la emoción. Me cogió en peso, rodeé su cintura con mis piernas y escondí la cabeza en su cuello impregnándome de su olor. Me encanta, hoy huele a Harry con menta.

Le cogí la cara con mis manos sin bajar de él y empecé a darle besos de abuela en la mejilla, estos besos que si te pillan un oído te dejan sorda y van todos seguidos y muy rápidos. Harry ponía caras graciosas mientras entraba y cerraba la puerta tras él.

- Necesito respirar nena. – Dijo poniéndome en el suelo.

Se estaba acostumbrando a llamarme nena más seguido a pesar de no estar juntos, a mí ya no me importa que lo haga, es más me gusta, es sexy y sobretodo viniendo de él.

- Idiota, llevo mucho tiempo sin verte, esperaba un poco más de afecto por tu parte.

- Ven pequeña. – Cogió mi cara entre sus manos e imitó mi sesión de besos por toda la cara.

Riendo subimos los dos a mi habitación. Entró y cerré la puerta tras de mí. Se acostó en la cama y apoyó su cabeza en un brazo. Palmeó el sitio junto a él y me acosté allí.

- ¿Esos pantalones no son demasiado cortos? ¿Ya estamos provocando de parte mañana?

- No Harry, ves lo que quieres ver. – Reí y él también.

- Vamos nena… Llevamos una semana sin vernos, y más de una semana a dos velas, ahora mismo no estoy viendo lo que quiero… – Reí más fuerte, pobrecito.

Extrañas coincidencias (Harry Styles) Terminada/Editando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora