Capítulo 24: Ya es inevitable.

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Está decidido, hoy hablaré con Harry seriamente, esta noche no me acuesto sin que esté todo zanjado. Anduve hasta el barrio de los chicos y llegué a la casa, presiono el timbre y me abre la puerta Ros. ¿ROS?

- ¿Tú que haces aquí? – Dije con los ojos muy abiertos.

- Hola Ade, buenos días, yo también me alegro de verte, ¿qué tal has dormido? – Dijo con una sonrisa en la cara.

- Si, si, hola. – Me acerqué a ella y besé su mejilla. – Tu y yo tenemos que hablar seriamente. – Empezó a reírse por lo bajo y cuando apareció Niall por la puerta de la cocina se le cortó de momento. – ¡Hola irlandés!

- ¡Hola española! – Me estrechó el rubio fuerte entre sus brazos y cuando me soltó cogió la mano de Ros. – Ven, que no sé si se está quemando. Estamos cocinando, ¿sabes? – Me dijo sonriente.

- De ahí tu alegría, ¿no? – Se carcajeó y asintió efusivamente.

- Si buscas a Harry está en el ático haciendo ejercicio.

- ¿Por la mañana?

- Sí, eso significa que está meditando. – Dijo gesticulando con sus manos. – Cuando se come la cabeza con algo, hace ejercicio para pensa.r – Aclara éste.

Subí al ático y abrí la puerta, pero no se enteró, la música estaba muy alta. Sonaba Closer to the Edge de Thirty Seconds To Mars, canción perfecta donde las haya para inyectarte un subidón de adrenalina mientras haces ejercicio.

Cerré la puerta y me quedé ahí observando sus movimientos. Colgado de una barra casi tumbado en el suelo, levantando el peso de su cuerpo con sus brazos. Unos deportivos de correr, unos pantalones de Nike blancos cortos, su pelo recogido hacia atrás con un turbante. Le observaba de espaldas y por dios… lo que haría ahora mismo con él en esa misma pose… Puedo ver su espalda contraerse mientras sube y expandirse mientras baja.

Ha acabado la canción y empieza otra. Ahora es Figured You Out, de Nickelback. Estas dos canciones me suenan, aparte de que las conozco y me encantan, son de la playlist que le hice, es igual que la que tengo yo cuando salgo a correr.

“I like your pants around your feet” (Me gustan tus pantalones alrededor de tus pies).Solté un gemido sin darme cuenta, pero no me escuchó. Dios santo, justo lo que yo estaba pensando. Tengo que parar esto, no he venido a echar un polvo mañanero con Harry, concéntrate Ade. Tenemos que hablar, tenemos que hablar, no hay marcha atrás.

- ¡Buena canción! – Grité para que me escuchara, éste se dio la vuelta bruscamente y me vio ahí parada, una sonrisa asomó por su rostro y otra por el mío.

- ¿Cuánto llevas ahí parada? – Cogió una toalla, paró la música y se secó la cara de camino a mí.

- Unos minutos. – Me dio un beso en la mejilla pasando un brazo por mi espalda y me acercó un poco a él. – Harry, para, estás sudado. – Dije riendo.

- Ya, cómo que no te gusta. – Dijo con una sonrisa pícara, capullo… y tanto que me gusta, está jodidamente sexy.

- Calla… ¿te apetece ir a pasear…? Y hablamos y tal. – Dije nerviosa, intentando aparentar normalidad.

- Claro, sí, voy a ducharme, ven a mi habitación.

- ¡No! – He gritado demasiado, mierda, no quiero ir, no me controlaré. – Te espero abajo, que están Ros y Niall.

- Vale, como quieras, no tardo nena. – Volvió a darme un beso en la frente y bajó las escaleras.

Suspiré y bajé yo también hasta la cocina. Cuando fui a entrar por la puerta, mejor no haberlo hecho, Niall y Ros estaban besándose, me quedé paralizada con los ojos muy abiertos y caminé hacia atrás, desde fuera grité.

Extrañas coincidencias (Harry Styles) Terminada/Editando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora