Capítulo 19

2.1K 300 74
                                    

Kong POV

Nunca he conocido a un idiota más grande y más crédulo que P'Arthit. Es casi imposible humanamente ser más ingenuo. Incluso un tonto ciego podría ver que ella no se estaba comportando ni remotamente como alguien que acababa de ser botado. Si no más bien como una persona que acababa de regresar con su ex.

¿Solo tres semanas? ¿Se estaba volviendo loco enserio? La única persona que ella pretendía que se mudara en tres semanas era yo. Mientras que la pobre e indefensa Nam regresaba permanentemente a este apartamento, así como a su vida.

Ugghhh!

Si no estuviera enojado con él en este momento, habría marchado afuera, lo habría arrastrado a mi habitación y lo habría mantenido encerrado aquí para asegurar la mayor distancia posible entre ellos, pero él merecía al menos una noche en el sofá. Estaba acostado boca abajo en mi cama, tratando de enterrar mi cabeza lo más profundamente posible debajo de las almohadas para bloquear su conversación afuera. Pero dudo que hubiera suficientes almohadas en el mundo como para no haberla escuchado ofreciéndose a compartir su propia cama con él.

¿Estás bromeando?

¿Qué damisela en apuros quiere dormir al lado de su ex novio mientras ella supuestamente todavía está suspirando por su actual? ¿Acaso P'Arthit tenía algodón metido en la cabeza donde debería haber estado su cerebro cada vez que su ex estaba interesada? Supongo que necesito concederle este round a ella. Pero que ni piense que se deshará de mí tan fácilmente, porque no lo voy a permitir. Porque no hay absolutamente ninguna manera bajo el sol que permita que P'Arthit vuelva junto con esa manipuladora del demonio. No había sacrificado mi foto de identificación y limpiado este basurero con mis manos y rodillas debido al desastre que causó por nada.

Así que voy a aprovechar esta noche para lanzar todas las maldiciones mentales que he aprendido en todos los idiomas posibles en P'Arthit. Déjalo sufrir un poco por su cuenta en el sofá, incómodamente. Y a partir de mañana descubriremos cuán cruel puedo ser realmente cuando realmente me empeño. 

Pero parece que no fui el único que sufrió una noche de insomnio. Estaba muy consciente de que cada vez que ella salía de la habitación para hacer un viaje aparentemente inocente a través de la sala de estar pasaba justo a lado del sofá, donde se suponía que P'Arthit estaba durmiendo. Y después de la 15ª vez, no pude evitar gemir en voz alta.

Por el amor de Dios, por favor, solo duérmete. Estoy tratando de idear un plan de juego aquí.

Por lo tanto, no fue del todo sorprendente cuando los tres, asemejándonos inquietantemente a unos mapaches, tuvimos un desayuno bastante silencioso a la mañana siguiente. Ni listo para ser el primero en soltar temas incómodos por el momento. Aparentemente, teníamos tres semanas para bajar esa lista.

—Me voy a ir ahora, P'Nam, ¿qué tal si te llevo al trabajo?

Tuve dos cabezas en mi dirección, ambas me miraron boquiabiertas con sorpresa no disimulada.

—¿Quieres darle un paseo a Nam? Pensé que iba a ir...

—No te preocupes, P', conseguí anteojos mientras no estabas ayer. No pondré en peligro la preciosa vida de P'Nam.

—Uh... no... eso no es lo que quise decir...

—¿Estás lista P'Nam?

—Ummm ... sí, claro. ¿Por qué no? Seria bueno pasar más tiempo contigo. Si me voy a quedar aquí, es mejor que nos conozcamos un poco mejor.

Bajo mi techo // Under my roof [COMPLETA]Where stories live. Discover now