Día 18: Tic Tac

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Cuando escribí este capitulo fue como... ¿de verdad esto es una opción? Entonces se me imagino un silencio incomodo y el reloj de fondo...

A continuación les dejo el Día 18, pieza número 13

. En este capitulo hay una frase que me gusta mucho, ¿pueden descubrir cuál es?

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palabras: 742

beteado por princessqueen

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Mes LadyNoir

Día 18

~El Tic Tac del Reloj~

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El «Tic-tac» del reloj de la sala de los Dupain-Cheng era el único sonido que se escuchaba, pese a que estaban reunidas ahí, cuatro personas.

Tras terminar de hablar de todos sus males y más tranquilos, Ladybug le había pedido a Chat Noir que la acompañara a casa por algo para comer. En un inicio, ambos se veían nerviosos de la idea de perder la transformación frente al otro, pero era algo que ya habían hecho de palabra.

Se habían escondido en un callejón cercano a la panadería y le pidieron a sus Kwamis que descansaran. Ambos miraron a sus portadores, en silencio, sin atreverse a comentar nada, ni siquiera Plagg, que sabía por todo lo que estaba pasando el chico.

Marinette observaba a Adrien, esperando sentir ese nerviosismo histérico que siempre se apoderaba de ella, pero no estaba. Sorprendida, miró al chico con más detenimiento, incluso se acercó a él más de la cuenta, haciendo que se sonrojara, pero nada. Su corazón si estaba agitado por la cercanía, pero no había nerviosismo.

—Adrien —y cuando pudo pronunciar su nombre, comprobó que tampoco había tartamudeo.

—¿Marinette? —preguntó con curiosidad, pero la chica solo negó con la cabeza.

—Nada. Vamos —le tomó de la mano con la misma confianza que tenía cuando era Ladybug y él la siguió con la misma lealtad de cuando era Chat Noir.

...

Ahora estaban sentados frente a los padres de la chica. Sabine los miraba con una sonrisa encantadora en sus labios, pero Tom estaba cruzado de brazos, mirando fijamente a Adrien. Él sabía que su hija amaba a ese chico y ver que realmente era correspondida, lo hacía sentir de una forma curiosa, quizás contento por su hija, pero preocupado por sus sentimientos. ¿Y sí volvía a sentirse herida?

Adrien pareció leerle los pensamientos, pues tomó la mano de Marinette y luego miró fijamente a Tom Dupain. Recordaba muy bien sus golpes como para querer volver a vivir algo así.

—Sé que esto es repentino, pero me gustaría solicitarles permiso para frecuentar a su hija —dijo, viendo a la chica que lo miraba, sorprendida. Ellos solo habían ido a comer algo, no a pedir permiso para salir.

—¡Adrien! —protestó la chica, sumamente avergonzada.

—¿Qué sucede, Marinette? —preguntó, mirándola con una sonrisa que, aunque parecía derretirla, también la encabronaba. Ahora Adrien era un perfecto equilibrio entre sus dos partes.

—¿Podemos conversar en privado? —le dijo, señalando con la cabeza, la escalera que daba a su habitación— Mamá, papá, dejaré la trampilla abierta...

—Sí, no te preocupes, cariño, confiamos en ti —dijo Sabine. Tom miró a la pareja subir las escaleras en silencio y cuando desaparecieron, al fin se volteó a su esposa con los ojos llorosos, pero de la emoción.

—¿Nuestra Marinette al fin tiene a su príncipe?

—Sí, sí, Tom —dijo Sabine, palmeando la mano derecha de su esposo—. Hay que esperar que su cariño dure tanto como el de nosotros...

—¡¿Por qué hiciste eso?! —protestó Marinette observando al rubio, al que lejos de importarle lo que le gritaba la chica, observaba la habitación. Hace tiempo que no estaba ahí.

—¿Qué hiciste con mis fotos? —preguntó.

—Las tengo guardadas, ahora respóndeme —y en eso, se caló abruptamente al ver la sonrisa traviesa del muchacho.

—Ay, my lady —se acercó a ella para abrazarla—, tenía que aprovechar la oportunidad, ahora que aun soy alguien... ¡Auch! —Marinette le había pegado en la espalda con algo de brusquedad.

—¡Tonto! —se aferró con fuerza a su espalda—. Siempre serás alguien para mí. No importa lo que haya hecho tu padre, o Nathalie —se separó un poco de él para poder ver esos ojos verdes que tanto le gustaban—. Quien eres conmigo es lo que me importa. Eres uno de mis mejores amigos en mi vida normal y mi compañero más leal en mi vida de superhéroe. Eres alguien irremplazable y no eres culpable de lo que hagan los demás.

—Marinette, yo... —pero la chica lo volvió a golpear— ¡Tienes la mano pesada!

—Lo sé y será más pesada si no te quedas callado —lo amenazó. Adrien sonrió sin ganas y se aferró a la chica, para volverla a abrazar.

De nuevo, el tic tac del reloj de la sala de los Dupain-Cheng, llenaba todos los espacios.

Porque, así como los minutos iban pasando, ese abrazo los recargaba de energía para todo lo que aún debían enfrentar.

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El rinconcito de la que escribe:

¿Supieron cuál fue mi frase favorita?

"Le tomó de la mano con la misma confianza que tenía cuando era Ladybug y él la siguió con la misma lealtad de cuando era Chat Noir."

Creo que de todo lo que he escrito es de mis frases favoritas.

Y desde aquí empezamos con los capítulos que revelan la trama. Este capitulo va justo antes de cuando enfrentan a Gabriel como Hawk Moth y curiosamente, después del capitulo de Mañana xD

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Gracias por sus comentarios y votos 

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Nos leemos mañana!

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Próxima actualización: 19 = Revelación de identidades

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Nos estamos leyendo

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Aquatic Fuera

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18 de Julio de 2019

Lucha ConjuntaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora