005

3.4K 488 69
                                    

Sicheng creía que su amistad con Yuta era especial, se conocían desde los nueve años, habían pasado por un sinfín de cosas juntos, desde problemas de adaptación a una nueva cultura a confundir palabras del coreano, de huir de matones a buscar problemas en la adolescencia, de probar alcohol a cigarrillos, siempre estuvieron cerca, unidos por un lazo tan fuerte que solía estremecerlo.

Podía perder su consola favorita, su cactus o incluso sus pantalones de la suerte, se pondría mal por esas pérdidas pero lo superaría, por mucho que ame aquellas cosas, lo haría. Pero con Yuta era diferente, imaginarse sin él a su lado lo asustaba, causaba estragos en su mente aquella fuerza que lo impulsaba a priorizar a Yuta por sobre todo.

No lo entendía, no entendía porque su corazón se aceleraba con sus abrazos, o sus mejillas se calentaban cuando tenia su atención sobre él.

— ¿Sicheng, estás bien?

La voz de Hyorin lo despertó de su trance, el largo y sedoso cabello negro de su novia estaba desparramado sobre la almohada, su cuerpo envuelto por las sabana de estampado infantil que le había regalado Yuta por navidad hace años atrás.

Yuta, todo siempre terminaba en él, pensó con amargura.

— ¡Sicheng!

— ¿Qué sucede? —Cuestionó levantándose y buscando sus pantalones.

— ¿Qué te sucede a ti? Has estado distraído desde que llegué.

Sicheng suspiró al recordar como había pasado la otra tarde en el estudio, envuelto en los brazos de su mejor amigo hasta quedarse dormido y luego ser despertado por el compañero de trabajo de Yuta.

Kris Wu conocía a Yuta desde secundaria, fue él quien guió a su amigo en el mundo de la música alternativa y el arte de los tatuajes, no se llevaban bien desde que por culpa de él Yuta resultó herido en un concierto underground al que fueron.

El chico no disimuló su desagrado al verlo. — ¿Qué haces aquí? No puedes venir a fastidiar a Yuta hasta en el trabajo.

Lo ignoró y tomó sus cosas dispuesto a ir en búsqueda del mencionado, pero terminó siendo sostenido fuertemente por un molesto Kris quien no midió sus palabras.

— ¿Hasta cuando seguirás corriendo a llorarle tus problemas de pareja a Yuta? ¿Acaso no ves lo que ocasionas?

— ¿De qué estás hablando? —Dijo forcejeando para soltarse.

—Realmente eres un idiota egoísta ¿Acaso no ves cuanto lo lastimas con tus tonterías?

Sicheng no lo entendió, no pudo preguntarle nada más debido a que Yuta había llegado y empujado agresivamente a Kris para que lo soltara.

Se fueron sin decir absolutamente nada, Yuta se limitó a verificar que sus muñecas no estuviesen lastimadas y disculparse por la actitud de su compañero.

—No sucede nada Hyo, sólo estoy algo cansado porque anoche vi toda la saga de Harry Potter con Luhan.

Mordió su labio inferior conteniendo su propio desagrado ante aquella mentira, Yuta y él estuvieron hasta tarde con una serie animada que habían pactado ver juntos.

El desagrado creció al ver el alivio en la mirada de su novia, y más cuando recordaba que hace unas horas había estado acostado en esa misma cama abrazado a su mejor amigo con el corazón a punto de estallar por lo correcto que se sentía aquello.

Falling ; yuwinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora