Richard Z. Kruspe y Alena Haider Lerman luchan por el amor de Paul H. Landers.
un joven muy guapo que asiste en la Universidad Libre de Berlín es la mayor de las cuatro universidades de Berlín y una de las más grandes y prestigiosas de Alemania, ju...
Till y Flake ya habían llegado a la guarida, asegurándose de que hubiera buena cantidad de refrescos, botanas y lo mas importante alcohol.
— Todo listo.
— Así es, lo mejor es que mañana no hay clases.
— Si qué bien.
Todos empezaban a llegar en excepción de Lena mientras Till se encargaba de preparar las bebidas y Flake a repartir los demás estaban sentados en los sillones.
— Tomen, es gratis todo no tienen que dar nada.
— Yo ni iba a dar. —río Richard. Mientras se escuchaba el timbre.
— Jajaja.
— ¡Pequeño, abre es Alena!.
— Enseguida mamá.
Bufo, levantándose sintió la penetrante mirada de Kruspe lo cuál ignoró no es buen momento para charlar.
Abriendo la puerta la joven se aventó a sus brazos de éste mientras la abrazaba, Kruspe moría de rabia al verlo tan serca de esa sujeta, él se preguntaba quién es. Sea quien sea nadie toca así a su enano.
— Paulchen.
— Lena linda, pasa. —sonrío dejándola pasar.
— Hola muchachos.
— ¡Hola Alena!.
Llegando a su pequeña sala, todos se levantaron saludándola hasta llegar con Kruspe quién la miraba de arriba a abajo.
— Hola y tú eres. —dijo amablemente Alena, notando su ego le empezó a molestar.
— Él Richard Zven Kruspe, nuestro querido amigo. Kruspe ella es Alena Haider Lerman nuevo miembro en nuestra pequeña familia.
— Un gusto kruspe.
— Igualmente señorita, Haider. —dijo seriamente.
— Bueno vamos a disfrutar. —interrumpió Till.
Todos asintieron, corriendo hacía la barra Alena y Richard se miraron seriamente. ¿por que?.
— Hey enano, no me saludaste.
— Oh... perdón. —se sonrojó, acercándose a él, éste lo abrazó de sus caderas apegandolo hacía su cuerpo le dió un beso en la mejilla y parte de su cuello mirando a alena con derecho al pequeño. Por otro lado Alena no soportaba verlo tan pegado a él, es decir su paul.
— Mucho gay por hoy. —dijo Till riéndose.
— Te mueres de celos Till. — indirecta hacía alena.
— No, guacala.
Zven soltó a carcajadas mientras se alejaba lentamente de Paul lo miró con amor aún con los lentes podía notar la lujuria y el amor que tiene por él
— Hey Paul.
— ¿Que pasa Lena?.
— Es... tu novio ¿?.
— Quién él. —señalo con su mirada a Richard.— No, no es mi novio... es mi amigo.
— Pensé que eran algo jeje que tonta... tengo una oportunidad verdad ¿?. —lo miró tiernamente.
— ...Pues si... —dijo totalmente sonrojado.
8:40 p.m. aún seguían tomando, bailando y disfrutando. Todos estaban ya tomados en especial Till.
Paul camino al sofá sentándose, Richard aprovecho ésa oportunidad para tomarle una foto.
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«Hermoso».
Mientras tanto Alena, se bajaba el vestido blanco que tenía puesto. Till estaba llorando sobre el hombro de Flake. Oliver y Christoph estaban besándose sin importarle quién se enojara.
— Enano.
— Que pasa Reesh.
— Ven sientante a mi lado.
— De acuerdo.
Camino con él, y así fue se sentó junto a él lo malo fue que quedó en medio de Alena y Richard.
— Hola paulchen. —dijo Alena acariciándole la mejilla.
— Hola lena. —sonrió tiernamente.
— Hey enano.
— ¿Si?. —respondió de la misma forma.
— Te adoro. —dijo abrazándolo, mientras su mano de Alena se quedaba en el aire, Richard lo jaló hacía él. Viéndola triunfante la rubia bufo tomando su gorro de la playera del pequeño, llevándolo hacía ella. Hizo lo mismo.
— Yo te amo paulchen.
— Yo más.
— No, yo más.
— ¡Sueltame a mi enano!.
— ¿Tú enano?.
— ¡Si!.
Fulminandose con miradas, ambos tomaron una mano de Paul llevándolo por do quier, hasta que el enano reaccionó se soltó del agarre de ambos viéndolos confundido.
— Que hacen.
— Yo nada Paulchen, tú amigo que quiere tomarte cómo si fueras suyo.
— Muy pronto lo será, así que puedes darte por vencida, no soy idiota sientes lo mismo que yo por el enano.
— ¿Qué? Tú sientes algo por él... Por favor.
— Cual es tu problema.
Ambos se levantaron, mirándose de nuevo con odio. Tal vez sea producto del alcohol o tal vez es por que sienten lo mismo.
Flake viendo la escena, corrió poniéndose en medio.
— Pasa algo.
— Nada Flake, sólo charlamos
— Así es guapo.
— Bien vamos a seguir.
Ambos asintieron sin dejar de mirarse, Paul sin saber que estaba pasando meneo la cabeza tomando la mano de ambos los llevó al sofá.
— ¿Que pasa?.
— Nada enano cosa entre rivales verdad como te llames.
— ¿Rival mío?, no me hagas reír pero bueno es cierto.
