Última Oportunidad

5

Entro al cuarto tras haber estado con el psiquiatra y lo que veo es a Holly hablando con Lydia.

—Hola. —saludo captando así su atención.

—Esta chica me agrada. —habla mi amigo.

Que extraño saludo es ese.

—Claro, ¿me extrañaste? —pregunto con un poco de broma.

—Siempre te extraño. —responde haciendo una media sonrisa.

Me sigo sintiendo culpable, Holly a pasado por mucho conmigo, le he hecho daño, lo sé, él no merece eso.

—No te sientas mal Calum.

Su voz me saca de mis pensamientos, lo miro y él me está sonriendo.

—Ven, juguemos a algo con Lydia, este lugar es algo deprimente.

—Deberían pintar las paredes. —comenta la chica.

—Si, quizás de azul. —propone mi amigo.

—O de verde.

—O rosa. —propongo yo.

Ellos asienten y veo una pequeña sonrisa en la chica.

—Quizás de todos esos.

Me siento en la punta de la camilla de Lydia y balanceo mis piernas suavemente.

—¿Por qué estás aquí Lydia? —pregunto.

Silencio, miro a mi amigo y este me está mirando con reproche.

No sé tener la boca cerrada ni dejar de ser imprudente al parecer.

Soy un idiota.

—L-lo siento, soy un idiota... yo no de...

—No te preocupes. —me interrumpe calmada. —Tuve un accidente en moto y ahora mis piernas no me responden... no se sabe cuando lo harán. —cuenta en un hilo de voz.

La miro, sus ojos están brillantes.

Levanta la mirada y parpadea intentando desaparecer sus lágrimas.

—Pero bueno, quiero pensar que la terapia me va a ayudar, así me tome mucho tiempo.

Holly asiente en apoyo mientras que yo guardo silencio, no quiero sonar mal pero no creo eso vaya a ser posible por lo que he visto.

Es mejor que no hable, solo le encuentro lo negativo a las cosas y ella no necesita eso.

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¡Hola!

Espero les esté gustando esta nueva historia, aún no se cada cuanto voy a actualizar así que dependerá de mi imaginación y mi ánimo pero intentaré subir un capitulo por semana.

Espero les guste y voten o comenten, me gustaría saber su opinión.