𝙂𝙧𝙖𝙛𝙛𝙞𝙩𝙞 𝘾.𝙍.𝙊

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Narra Sol:

- Decile a los pibes que vengan a casa hoy y hacemos una juntada como en los viejos tiempos. - sonreí mientras miraba por la ventana.

- ¿Como en los viejos tiempos?. - le brillaron los ojitos y yo asentí. - Sos la mejor amiga del mundo. - me abrazó y cerró sus ojos.

- Mandemos una siesta y cuando nos levantemos vamos a mi casa, no quiero estar sola. - hablé y el asintió.

me acomode en la cama y nos abrazamos para esperar a que el sueño llegue.

...

- Sol. - me movieron. - Sol levántate. - susurró y me moví.

- ¿Que pasa wacho?. - me estire y lo vi ya cambiado y con el pelo mojado, supuse que se bañó.

- Vamos que tenes que bañarte y cambiarte vos. - sonrió guardando escabio en su mochila y yo me empecé a preparar.

- Vamos. - salimos luego de un rato con rumbo a mi casa.

- ¿Y el crackero?. - elevó la ceja.

- En su casa creo. - miré los arboles. - No hablamos todavía, pero estamos bien. - sonreí.

- ¿Lo vas a invitar hoy?. - miró el piso.

- No, hoy es tiempo para mis amigos. - lo abracé y el sonrió.

- Igual no me molesta. - susurró. - El otro día tuvimos una charla con el wacho. - sonrió y lo miré entre cerrando mis ojos.

- Que habrán hablado ustedes dos. - le pegué y sonrió.

seguimos caminando hasta llegar a casa y al rato cayeron los pibes.

- Que onda. - entró Dani todo confianzudo y sonreí.

saludé a todos mis amigos y Cami dejó en la cocina las pizzas que habían comprado en el camino.

- Yo traje para tomar. - habló Mati.

- En la heladera hay un par de birras, mete todo ahí. - hablé y me puse a elegir un tema en la tele desde YouTube.

- Te extrañe gila. - me abrazó Cami.

- Yo a vos. - tomé un trago de la botella pequeña de cerveza que traía en la mano.

- ¿Tu wacho?. - elevó las cejas y todos me miraron.

- No es mi wacho. - reí. - En la casa creo, no hablé hoy. - sonreí y le puse play a la música.

- Dale wacho que esta noche recordamos los viejos tiempos. - gritó Dani tirándose al sillón y cada uno agarró una cerveza.

- Bueno, se acuerdan el juego?. - Mati nos miró a todos.

- Mas virgo ese juego. - Valen rodó los ojos.

- Bien que te pones en pedo y nos lloras para que juguemos. - Cami le guiñó el ojo y todos gritaron.

la noche pasó entre risas y jodas, yo no prendí el teléfono y mañana tenía que trabajar y la verdad iba a tener una resaca importante.

pero las noches junto a ellos eran lo mejor que podía pasarme.