Capítulo 11

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Maratón 3/3

 

Después del término del banquete, todos los alumnos se pusieron de pie, los de primer año fueron conducidos por los prefectos, hacia las salas asignadas. El Instituto Durmstrang, contaba con cuatro casas, y con tres niveles (pisos) Los dormitorios salas eran en realidad, las torres del castillo, una para cada casa, podría parecer un lugar pequeño a simple vista, pero contaba con un hechizo poderoso, que permitía que todos cupieran dentro, además no estaban apretados, el lugar era amplio, majestuoso y sobre todo acogedor, siempre y cuando no seas muy detallista, porque algo que caracterizaba todas las salas era las paredes de piedra y las antorchas. Rasgo característico de todo el castillo, en sí.

Kendra…

-Niños agrúpense, sean moderados.

-¡Tranquilícense por favor!

Las prefectas estaban demasiado nerviosas, y no sabían cómo manejarnos a todos. Bueno según lo que nos habían explicado en el Instituto Durmstrang. Los prefectos eran elegidos por sorteo, entre los mejores alumnos de la casa, tanto chicas como chicos, pero este año ningún chico cumplía con las actitudes, por lo cual dos chicas fueron seleccionadas para la misión, y créanme no lo estaban asciendo demasiado bien. Una de ella incluso nos tenía miedo, ni que fuéramos unos monstros. Bueno tal vez desde la perspectiva de ellas, si lo fuéramos.

-Que les parce si se callan y le hacen caso a las prefectas, alguno de nosotros queremos entrar ya a la sala.-Rayos, para que hable, todos se me quedaron mirando como si fuera un bicho raro.

-Gracias, pequeña- Fue lo que me dijo, la prefecta miedosa, pero muy cálida y amable.

Al parecer los demás ya se habían callado y se estaban comportando. Pero aun así me seguían mirando raro, Bel por otro lado me miraba radiante y con una sonrisa imborrable.

Ambas prefectas se pararon frente a un muro de roca y dijeron alto y claro “Salto y Seña” el muro comenzó a temblar, y las piedras se movieron creando una puerta o algo más similar a un arco de piedra.

-Adelante, pasen- dijeron las prefectas al unísono.

Nadie pasaba, supongo que tenían miedo a que las rocas les cayeran encima, dado que daban la apariencia de ser inestables.

Di un paso adelante, como siempre yo soy la imprudente y temeraria. Lo que me sorprendió fue que Bel dio un paso también.

-Si tú pasas, yo también lo hago.

-¿Juntas?

-Juntas.

Estábamos avanzando, cuando todos sentimos que el piso comenzaba a temblar. Ambas estábamos prácticamente debajo del arco, las rocas comenzaban a desprenderse; tenía que actuar rápido, como auto reflejo empuje a Bel hacia donde estaban los demás niños. No creía que mi fin llegaría tan pronto, después de todo solo era una niña y me faltaba mucho por vivir, ni siquiera había terminado mi primer año. Escuche el grito de Bel, pero nunca sentí el impacto de las rocas. En vez de ello escuche unos aplausos.

-Has pasado la prueba, ahora eres un verdadero miembro de la casa.

-Pero que….

-A sido eso-Bel completo mi frase.

-Bueno en esta casa en particular tenemos tradiciones, cada casa tiene distintas tradiciones, aquí tenemos tradiciones de valor y nobleza. Y tu pequeña ya has pasado tu prueba.

Mi prueba, pero si eso había sido de lo más extraño. A todo esto donde estaba mi hermano cuando más lo necesitaba, acabo de darme el susto de mi vida, y él ni aparece. ¿Qué ha sucedido con nuestra conexión?

-¿Cómo te llamas pequeña?

-Lucinda Kendra Prince.- No sabía si me preguntaba mi nombre de pila, o todo mi nombre así que opte por la segunda opción.

-Lucinda bienvenida seas a Levton.

Ambas prefectas me sonreían, como podían sonreírme después de darme un susto de muerte.

Vincent (Leo)

 

Me sentía intranquilo, podía sentir lo que Kendra sentía, y las sensaciones no eran agradables, ella estaba en problemas y tenía que ir a por ella, solo que me vi atrapado entre mis compañeros y los prefectos. Una vez dentro de mi sala, me fue imposible salir. Estaba desesperado, se me había ocurrido un plan de improviso, solo espero que funcione. Me senté en uno de los sofás de la sala, y cerré los ojos.

(Vincent) ¿Estas bien?

(Kendra) Eso creo.

(Vincent) ¿Dime que ocurrió?

(Kendra) Me tendieron una trampa, aunque ellos lo llamaron reto, y lo mezclaron con tradición.

Kendra me relato lo que había pasado, y no los iba a perdonar. Nadie se metía con mi hermanita menor y salía ileso. No me interesa que fuera una tradición, esa persona se arrepentiría.

(Kendra) ¿No crees que exageras?

(Vincent) Creí que ya te habías ido.

(Kendra) Todavía no.

(Vincent) Buenas noches, Kendra.

(Kendra) Buenas noches, Vincent.

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Bueno sé que es muy corto, pero es lo que hay...

Aunque definitivamente los compensare en el transcurso de esta semana. 

:D

Saludos a todos…

Posdata: quien comente primero, a esa persona le dedicare el próximo capítulo…

Espero comentarios y botos :D

Los hijos de Severus SnapeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora