Los hijos de Severus Snape

Capítulo 43: Acampando en el Cementerio

Kendra...

 

-De cuando acá, debemos acampar en el cementerio.

-Hoy es el día de mi liberación, se mas...

-¿Mas qué? Liberación.

-Te lo diré después del contrato, por cierto, yo no soy el que va a cuidar de ti sino el siguiente elegido para convertirse en el anillo, yo voy a ser libre.

-¿Que tú qué? No se supone que tú serias siempre el guardián del anillo...

-No siempre... tu antepasado te explicara las nuevas clausulas.

-¿Mi antepasado qué?

-Que él te explicara todo, los métodos del control sobre el guardián han cambiado, ya no es tan esclavizado como antes.

-¿Exclavique?

-Somos guardianes, no esclavos. No soy un elfo domestico al que puedas mandonear.

-Yo no te he mandoneado, ha sido al revés.

-Pues tus antecesoras, si lo han hecho...

-Bueno, lo siento... me disculpo por ellas, pero de seguro has sido su niñera...

-En muchos de los casos sí, me dejaban a la nueva portadora, el mismo día que estas nacían, si era algo así como su niñera, como dije antes, en muchos de los casos.

-No me digas que después de tu liberación, crearas un tipo de ley en contra de encerrar a los magos, en objetos inanimados.

-No me iré, lejos de este continente a vivir mi retiro en paz, más de cuatro milenios encerrado en esa cosa. Dijo señalando al anillo que llevaba encima.

-Si es que su eminencia te lo permite, talvez termines siendo la niñera de mi nuevo guardián.

-¡Soy un anciano! Y estoy muy cansado.

-Pues no lo pareces.

-Que lo soy niña insensata...

-De acuerdo, serás todo lo que tú quieras, pero que carácter.

Salí del que podría llamarse su territorio (bueno del territorio de mi antepasado, el lado designado a Salazar Slytherin estaba destrozado en su mayoría. Estaba decidida a explorar los alrededores; el muy pesado y economizador según él, me había tenido a pan y agua, después de un mes, era mi primer día al aire libre.

-¿Adónde vas?

-Tranquilo no voy a huir. Solo iré a explorar un poco, he escuchado que después de un tiempo de cautiverio, estirar las piernas es lo mejor.

-Ni que la hubieras pasado tan mal.

-No llegue a morir de hambruna, pero el aburrimiento casi me mato. Y mejor no me quedo aquí por más rato, estoy cansada de discutir con un anciano, con una apariencia engañosa de 25 años.

-Llévate contigo este reloj de bolsillo, chequea la hora con regularidad, te quiero aquí a más tardar a las 11, aunque si me preguntas una hora, yo diría que a las 10 p.m. estaría bien.

-De acuerdo.

-Ni un minuto más, ni un minuto menos.

-De acuerdo, señor quisquilloso.

Salí de su zona de poder antes de que caiga en cuenta que lo había insultado de una manera u otra, porque para él eso era un insulto y luego decía que yo era la niña.

*Comencé a recorrer el lugar, ya no me daba tantos escalofríos como la primera vez que vine aquí. (Creo que al principio no era para tanto)

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Bueno este sería un capitulo nuevo después de unos días de desaparición...

Me disculpo por haberlos abandonado, aunque ustedes también me abandonaron al no haber comentado...

***En MULTIMEDIA les dejo la imagen de quien sería el Anillo (me refiero a su forma humana)***

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