˗ˏˋ No manners ︔ YuTae. ˎˊ˗

04

Eran ya las 6:00 de la mañana, se había despertado debido a que necesitaba vaciar su vejiga antes de que ésta explotara.

Se dirigió al baño rápidamente, reaccionando en el transcurso de vaciar ésta. Éste no era su baño, ni mucho menos su casa.

De pronto un dolor en su cabeza le atacó, haciendo que se quejara levemente. Sentía su garganta seca y su cuerpo se sentía más pesado que nunca, era la crudez.

Trató de acomodar sus cabellos desordenados mientras se dirigía a donde se encontraba recostado. Johnny se encontraba recostado en el suelo con una chamarra, Ten estaba sobre la mesa de bebida, Lucas en las escaleras.

Se recostó sobre su novio, el cuál soltó un ronco quejido y trató de tirarlo. Se acurrucó en su piel desnuda y volvió a quejarse, el dolor era insoportable.

— Mh, Lee —. Llamó al coreano un par de veces, el cuál le contestó de mala gana.— Me duele mi cabeza, necesito una pastilla —.

— Anda a buscar en el botiquín del baño, déjame dormir Nakamoto —. Se levantó nuevamente, dirigiéndose por segunda vez al baño para buscar una pastilla.

Al encontrarla, se dirigió esta vez hacia la cocina y sirvió un vaso de agua para tomar la pastilla. Volvió a donde su pareja y se recostó sobre él.

Observó su piel que tenía aún las marcas de los rasguños que le había echo días antes, siguió las marcas con uno de sus dedos índices. De vez en cuando el pelinegro se removía, otra veces no.

Volvió a dormirse, ésta vez abrazado a él como un oso de peluche. Y despertó horas después, ahora eran las 12:00 de la tarde.

Todos los demás apenas despertaban, otros se encargaban del almuerzo, mientras que otros más fueron a comprar algo para desaparecer la cruda que causaban los tragos de la noche anterior.

Yuta se dirigió hacia la cocina y comenzó a ayudar a DoYoung, WinWin, JungWoo, JaeMin y Jeno a hacer el almuerzo.

Mientras que TaeYong junto con Mark, Kun y Lucas se dedicaban escombrar aunque sea la mesa para tomar su desayuno a gusto.

Después de unos minutos, Johnny, JaeHyun, Ten y HaeChan llegaron a la casa con six de cervezas, sodas y botana para el día. Ya que el otro día era normal tomarlo como descanso.

Se sentaron todos a desayunar, los novios se encontraban juntos, mientras que los que aún no eran 'amarrados' se sentaban como querían.

Hablaron cosas triviales, temas de conversación divertidos, bromas, entre otras cosas.

— Hablando de amarres, Yuta y TaeYong fue la primera pareja que se hizo, ¿cierto? —. Habló DoYoung, los demás asintieron.— ¿Exactamente cuánto tiempo llevan juntos? —. Ésta vez habló JungWoo, curioso.

— Tres años y cuatro meses —. Respondió el japonés mientras tomaba una fritura y la llevaba hacia su boca.

Los demás, impresionados soltaron un "woah".

— Hablando en serio Yuta, ¿no le diste a Tae agua de calzón? —. Preguntó Lucas de repente. Los demás estallaron en risas.

— Bueno, si me la dio alguna vez. Debo decir que funciona, digo, por si alguno de ustedes la quiere hacer —. Habló esta vez el más alto de la relación, mientras abrazaba por los hombros al japonés.

Algunos comenzaron a susurrarles "te la voy a dar", "¿ya vez?, por eso sigues conmigo", "no hace falta dártela, los amarres también funcionan" entre otras cosas.

— Me alegra ver que Yu y Tae han durado todo éste tiempo, por ellos puedo decir que el amor si existe —. Habló WinWin con sinceridad, mientras era abrazado por su novio Kun.

Los susodichos sonrieron en agradecimiento, tratando de que sus amigos siguieran creyendo que todo seguía siendo como ellos creían.

Pero la verdad era otra, y Yuta se estaba comenzando a hartar de todo aquel teatro que había creado junto a TaeYong durante los últimos dos años.

Porque el primer año fue maravilloso, sin embargo todo comenzó a empeorar, al menos en su vida amorosa junto al chico que le había robado suspiros, que le hizo sentir en las nubes.

Hizo muchas cosas por TaeYong, que ni siquiera lo hizo por nadie más. Se enfrentó contra sus padres para decirles que era gay y estaba enamorado de un chico mayor que él, compró un apartamento con sus ahorros de un viaje que anhelaba mucho a Norteamerica para vivir junto a él, renunció a la universidad creyendo que las mentiras de que se irían después de unos meses eran reales. Se enfadó con su madre, pues ésta hablaba mal de TaeYong.

Habían más cosas que hizo, sacrificó y no hizo por él. Por eso su enojo con él, su rencor hacia Lee TaeYong. No sabía apreciar lo que hizo y sólo se dedicaba a invitarle a beber, tener sexo y besarse. Era lo único que le daba y ahora ya ni siquiera las sobras le daba. ¿Por qué lo haría él?

El día transcurrió mayormente con sus amigos, después de las 8 de la noche ya se encontraban en su departamento. Se dirigió esta vez hacia el baño para tomar una ducha caliente en la bañera.

Quería deshacerse de todo pensamiento que hacía que su cabeza casi estallara y así relajarse sólo media hora. Después, seguiría con sus pesares, problemas y estrés.

Se sumergió en el agua caliente, dejando que su cuerpo cayera suavemente y el agua le empapara hasta el cuello.

Cerró sus ojos, así descansando todo el tiempo que quisiera. No necesitaba nada y si TaeYong quisiera algo, él mismo tenía que ir.

Velas aromáticas rojas rodeaban la bañera, ó solamente la parte de en frente. Le gustaba tomar la ducha así, a oscuras y sólo a la luz de la luna y del fuego.

Minutos después, una mano acariciaba la piel de sus piernas. Le hizo sobresaltar, sin embargo no hizo nada más que alejar aquella mano de su rodilla y seguir con su baño.

Sin embargo seguía insistiendo, a lo que le dio espacio para que pudiera entrar también.

El cuerpo de TaeYong entró en la bañera también, mirándole con picardía y con su sonrisa ladeada. Le observó sin expresión alguna.

Sabía a qué se refería, lo sabia muy bien. Pero no quería, hoy no.

Hola, tanto tiempo sin aparecerme por aquí.
No voy a poner excusas, así que aquí tienen otro capítulo más.
Espero que sus días en cuarentena no sean tan aburridos como los míos, buena suerte chiquis.
Gracias por leer.