In The Backstage

De vuelta a la Realidad...

Llegué bastante tarde a casa, encontré en la entrada los duplicados de las llaves de Alejandro y una carta de despedida, que más que una carta era una hoja con reclamos, decidí no darle importancia y subir a dormir.

Pasaron varios días en lo que volvíamos a la oficina, ya que nos habían dado un gran descanso por el arduo trabajo que habíamos dado para el evento, pero ya mañana sería un nuevo día y muy importante, porque al llegar seguro mi jefe iba a comentarme algo sobre aquella noche.

Al despertar, estaba muy nerviosa, creo un poco más que la noche anterior porque ahora si sabría lo que opinaban los directores y dueños acerca del evento, nos enteraríamos de quién de las dos agencias había logrado obtener el trabajo con la otra televisora, y sobre todo lo que mi jefe opinaba de mi trabajo, en pocas palabras, si seguiría teniendo uno o ya no.

Al llegar a la oficina, todo se veía igual de apagado como siempre, caminé por ese largo pasillo blanco lleno de reconocimientos y fotografías, al fondo de este mi puerta, justo a un lado de la oficina de Paola

-Buenos días, Sam, ¿Cómo te la pasaste anoche?

-Buenos días, Paola, creo que puedo decir que fue una buena noche.- Sonreí y me dispuse a abrir la puerta de mi oficina

En cuanto abrí, de nuevo había alguien sentado en mi silla, esta vez era mi jefe. En la pared pude notar que había un extraño trozo de tela colgado, mire la tela en la pared, mire a mi jefe y luego ya no supe a donde voltear.

-Cierra la puerta, Samantha

Cerré la puerta y me senté en un pequeño sillón rojo que había dentro de mi oficina.

-Niña quita esa cara, no esta en un funeral .- dijo mi jefe mientras se reía.- Se que el día de hoy tu esperas muchas respuestas y bueno, ¿por dónde comienzo?, el evento de anoche fue realmente increíble, se notó bastante que le pusieron mucho empeño a la organización y todos se la pasaron felicitándonos por la noche tan magnifica.

-Señor, no se que decirle, en verdad me alegro mucho de que el evento haya salido como todos lo esperaban.- Estaba tan emocionada que las palabras no salían de mi boca

-Eso no lo es todo, señorita, gracias a usted.- hizo una pausa y reveló la placa de la pared.- hemos ganado el reconocimiento de la televisora, y me están pidiendo al equipo de trabajo que vamos a enviar a España para trabajar allá con la nueva televisora, así que Samantha, dígame, ¿Quiénes se van con usted?

No podía creer lo que estaba viendo, ni lo que estaba escuchando, todo ese esfuerzo había valido la pena, voltee la mirada y vi a mi jefe realmente orgulloso de lo que habíamos logrado, arme mi equipo de trabajo con Paola y unos cuantos chicos del staff que me habían ayudado de manera increíble en cuanto al montaje.

No podía esperar a contarle a alguien lo que acababa de ocurrir, así que recordé que había guardado el número de Raúl en mi cartera, lo tomé y decidí llamarle, cuando me contesto comenzamos a hablar y me dijo que quería que le contará todos los detalles en persona, así que quedamos en vernos en un café cerca de la agencia.

Al llegar a la cafetería, lo vi muy sonriente esperando por mi en una mesa arrinconada en el local.

-¿Cómo se encuentra mi nueva española? .- Se veía bastante emocionado al preguntar.

Comenzó a felicitarme y le comenté todo lo que me había dicho mi jefe, pensé que sería un poco incomodo ya que el estaba luchando por el mismo reconocimiento y su empresa no lo consiguió, pero en vez de quejarse, reclamar o hacerme un drama, estaba realmente feliz por mis logros.

Pasamos otra gran tarde increíble, riendo y platicando sobre como sería mi nueva vida en el viejo continente, también me pregunto por Alejandro y como iba manejando la ruptura, es algo que aun dolía bastante, no lo puedo negar, uno no olvida a alguien a quien le dio 7 años de su vida de la noche a la mañana, pero creo lo estoy sobrellevando bastante bien, y simplemente quería cambiar de página.

Mi madre tampoco se había enterado de nada aun, estaba bastante furiosa cuando supo que ya no estábamos juntos porque lo veía como el yerno perfecto, aunque realmente nunca fue así.

Raúl y yo, quedamos en vernos de nuevo antes de mi viaje.