Capítulo 25

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Estaban en el CoffeeGram, sintiendo la máxima felicidad. Todas -junto a Steven y Peter- celebraban que el pequeño era libre, y crecería como un niño normal. Aunque bueno, tratándose de esa gran familia que ahora tenía, lo normal estaba sobrevalorado.

-¿Qué pasará ahora, _____? -preguntó la morena.

-Supongo que quisiera cambiar el apellido de Peter -lo observó, estaba fuera de la cafetería, jugando con Lauren y Ally.

-¿Crees que tu padre este de acuerdo? -la Polinesia tomó su mano.

-Claro que sí. Por primera vez hice algo de lo que deba estar orgulloso.

-Te ayudaremos cómo podamos, _____, ¿lo sabes, no? -preguntó Steve. Ambos habían mantenido solo unas cuantas conversaciones en el pasado, pues él ya conocía a Normani. Pero nunca habían convivido como lo estaban haciendo ese día.

-Sí, lo sé, aún debo pagar la escuela de Peter -suspiró.

-¿Es suficiente con lo que ganas en la biblioteca? -musitó Camila, tomando su Frappe.

-Espero que lo sea -sonrió al ver a su pequeña familia entrar a la cafetería. Observó confundida a Lauren y Ally que reían sin parar. El pequeño subió al regazo de _____. -¿Qué es tan gracioso?

-Acabamos de conocer a la futura novia de Peter -dijo Ally, riendo más al ver la expresión de la pelinegra.

-¿Ves a la niña de allá? -la ojiverde señaló por el ventanal a una pequeña de cabello rubio, que jugaba con los que supondría eran sus padres. -Jugó unos momentos con Peter, ¿cierto, cariño? -dirigiéndose al pequeño.

-Era muy agradable -sonrió. -Creo que le caí bien.

La pelinegra lo observó seria. -Estás muy pequeño para novias, mocoso.

-¡Tú tienes novia! -se cruzó de brazos. -Ya soy todo un hombre, también puedo tener novias.

Lauren tomó asiento en la silla vacía junto a ellos. -Déjalo, _____, no es para tanto.

-¿No es para tanto? -volteó hacia la ojiverde. -Estás diciendo que no es para tanto que mi hijo piense en novias a esta edad?

-También es mi hijo.

-Vaya, acaban de ganar el caso y ya lo tratan como su hijo -se burló Dinah.

-Es nuestro hijo, dedos largos. Cállate ya -la ojiverde la regañó.

-¿Por qué le dices dedos largos? -cuestionó la pelinegra.

Camila bufó, riendo. -Solo mira sus dedos, malota.

-¿Te gustan mis dedos? -dijo la Polinesia, levantó sus cejas hacia Camila.

-Santo Dios -Ally rodó los ojos.

-Es mi chica, Camila -advirtió Steven, recibiendo un codazo en las costillas por parte de Dinah.

-Solo digo que toda chica quisiera probar esos dedos -levantó los hombros.

-Yo no -contradijo Lauren.

-No te hagas, claro que los quieres probar -musitó la Polinesia, haciendo movimientos con sus dos dedos.

-Prefiero los de _____ -sonrió, haciendo que la pelinegra -en lugar de sentirse avergonzada- se sintiera orgullosa.

-No entiendo de qué hablan -canturreó Peter observándolas a todas. Rieron.

-Cosas de adultos, enano -dijo la pelinegra, revolviendo su cabello. 

-Ya soy un adulto.

-Lo que digas, chaparro.

Bring Me Home (Lauren Jauregui y tú)Where stories live. Discover now