ᴇʟ ᴇɴᴄᴀʀɢᴏ ᴅᴇ ᴜɴ ᴀ́ɴɢᴇʟ // ᴊᴏᴇʀɪᴄᴋ

《 Capitulo O5 》

—No entiendo nada—dije

—Claro, nunca entiendes nada—me contestó—eres un bobo

—Explícame todo ¿por qué soy tu encargo?

—Escucha niño. Yo era un famoso cantante feliz y exitoso hasta que un accidente de auto acabó con mi vida; Desperté en el cielo y dijeron que yo había muerto y que era un ángel de la guarda, yo tipo: orale pues chingón ¡Pero no! Para ser un ángel de la guarda tenían que enviarme a un estúpido para cuidar y.. ¡Ay!—se quejó de dolor y se sobó su muñeca

—¿Qué tienes?—pregunte confundido

—Mira, ¿ves este brazalete con piedras azules?—me lo enseñó y asentí—me da toques cada vez que insulte a la persona que tengo que cuidar

—Se supone que eres un ángel, no deberías decir malas palabras mucho menos insultar a las personas

—Bueno, pues soy único en mi clase. Un ángel cool con un encargo estúpido—se colocó unos lentes oscuros y el brazalete le volvió a dar toques.

—Ja, baboso—reí y me miró mal

—Te diré algo, cuando estaba vivo mi fantasía siempre fue morirme, convertirme en un ángel y bajar a la tierra para poder ver como las personas se vuelven locas con sus vidas.. y mírame aquí estoy viendo como tu vida es un desastre—suspira— soy el éxito papi

Me cruzo de brazos y lo miro de mala forma. Me apoyó en la pared, pienso bien lo que voy a decir y hablo

—¿Vienes a cuidarme o a criticar la vida que llevo?

—Las 2 cosas. Tu vida es... como te lo digo para que no suene tan mal. Tu vida es..

—¿Una mierda?—lo interrumpo 

—No. Tu vida es como alcantarilla llena de ratas

—Que asco—me quejé

—Pues así es tu vida, no la ofendas. Pero si prefieres usar la palabra mierda...por mi está bien

—¿Quién rayos eres?

—Soy Joel Pimentel, un gusto en haberte conocido

Este chico no podría ser mi ángel de la guarda, el es solo un muerto y tal vez tengo el don de  mirar a las personas difuntas o mejor dicho su espíritu. No le digo nada y el tampoco, el silencio incomodo se hace presente y mis ganas de salirme son demasiadas. Si el era mi ángel de la guarda y se supone que tiene que cuidarme; se me acaba de ocurrir una idea, le pondré una prueba.

Me levanto de la tapa del inodoro y busco en la puerta con un espejo arriba del lavado, el rastrillo y le quito la navaja. Volteo hacia donde esta el chico y me mira con el seño fruncido 

—¿Sabes que es esto?—le pregunto y le muestro lo que tengo en mis manos

—Es una navaja ¿que crees que soy, un tonto?—me pregunta en tono molesto y pongo los ojos en blanco

—Bueno, ¿y sabes que voy hacer con ella?

—Cortarte—contesta frío

—¿Como lo sabes?

—Por desgracia hay personas que padecen lo mismo que tu padeces y hacen la misma cosa que estas a punto de hacer. Creen que cortándose se acabaran sus problemas, pero esa no es la solución, solo te provocas mas dolor y lo que ganas es una adicción por tener marcas en tu piel

—¿Como sabes todo eso?

—Me han contado...

Este chico es sabio, por lo menos usa su cerebro para pensar y su boca para hablar cosas claras, buenas y precisas. Wow, y yo que pensé que los famosos eran unos babosos... eso rimo, debería ser compositor.

—Y bien lo vas hacer o solo la sacaste por que si—me dice y reacciono

—Me voy a cortar—le aviso y parece no interesarle—me voy a cortar—repito y vuelve a mirarme sin interés—me voy a..

—¡Si escuche!—grita molesto—hazlo.

Me dijo que lo hiciera ¿que clase de ángel es este? ah claro, único en su clase como el dijo. Saque la navaja para fingir que me corto para que evitara que lo hiciera, pero no pensaba cortarme realmente. Ahora si no lo hago quedare como un tonto.

Dirijo la navaja hacia las venas de mi muñeca, lo miro y el hace una seña de que lo hiciera, bajo la mirada hacia mi muñeca e intento clavarme la navaja y hacerme una cortada pero por mas que intento no lo logro.

Hasta para matarme soy un pendejo.

Intento, intento e intento y no puedo. 

—Creo que la navaja no tiene filo—digo como excusa y librarme de quedarme como un tonto.

El toma la navaja y se la clava en su muñeca, se hace una cortada y sale sangre de ella. Yo me quedo quieto y sorprendido a la vez, se acaba de cortar, su  muñeca esta sangrando y el esta como si nada. 

—Ya me morí y no me puedo morir otra vez, tranquilo—me dice y caigo al suelo.

Me desmaye.

Me morí.

Reviví.

Y volví a desmayarme.

Desperté y estaba en mi cuarto, Zabdiel estaba ahí y Joel también. Los dos se acercan hacia mi y me siento en la cama mientras me sobo la cabeza, me duele tanto que hasta parece que me hubieran golpeado con un sarten.

—Por fin despiertas—dice mi amigo—¿Que te paso? aun no entiendo el porque te desmayaste

—¡Todo esto es tu culpa!—me dirigí a Joel y Zabdiel frunció el seño 

—Eh... ¿A quien le hablas?—me pregunto Zab

—Anda, dile, ¿A quien le hablas?—me dijo Joel

—A mi ángel de la guarda, míralo esta a tu lado—le digo a Zabdiel, este voltea a los lados y vuelve a verme confundido

—Erick...no hay nadie mas.. solo tu y yo

—Como que no hay nadie si lo estoy viendo, esta a lado tuyo y te esta poniendo cuernos con sus manos

—Oye tu amigo tiene buenas nalgas—dijo Joel tocándole el trasero a Zabdiel

—¡Voy a matarte otra vez!—digo y trato de abalanzarme contra el pero Zabdiel me detiene

—Erick, Erick ¡tranquilo! ¡¿Con quien diablos estas hablando?!

—¡Con el idiota este que te toco las nalgas y provoco mi desmayo!

—Ya ya Erick contrólate—me calmo—. Le voy a marcar a la psicóloga a ver si esta en su consultorio para llevarte con ella

¿Que? no, con la psicóloga no por favor

—Creo que el golpe te hizo daño—me dejo en la cama y fue hasta su celular para marcarle a Karla. Se coloca el teléfono en su oreja y veo que Joel esta detrás de el—Ay, como que sentí un pellizco en mis nalgas 

Hijo de pu...