Le tomo de sorpresa la inesperada visita de uno de sus amigos.
Traía en sus manos una tarta de calabazas. Indiferente dejo que pasará a su hogar.
-No ha cambiado nada desde la última vez que vine.
-No haz venido desde que...
El castaño interrupio su hablar mostrando enfrente la tarta.
-Lo cocine yo, con ayuda de Vegetta, bueno él lo cocino yo solo busque los materiales, pensé que te gustaría.
-Gracias déjalo en la mesa ¿Solo venías por eso o...?.
-Se acerca la fecha, y quiero, bueno todos queremos, que estuvieras con nosotros en una pesca, para que pudieras olvidar y estar feliz con nosotros.
Al finalizar miro el rostro de enojo del contrario sabía que algo malo sucedería.
-¿¡VOSOTROS QUERÉIS QUE OLVIDE UNA FECHA TAN IMPORTANTE, POR UNA PUTA PESCA!?.
-¡AURON!, Has estado todo este maldito tiempo aquí encerrado, y cuando sales solo es para pasear a Frederick y Manolo, a él no le gustaría que estuvieras gastando tu tiempo en una pérdida, por lo contrario desea que salgas y te diviertas, no estancado en el pasado, y haciendo nuevos recuerdos con nosotros. Por favor.
Fue la última gota que rebalso su vaso, enojado empujó a su amigo castaño fuera de su casa, indignado por cada palabra que decía cerro la puerta de su casa con fuerza llendo rápido a tirarse a su cama.
Por otra parte Rubius estaba algo asustado por la actitud que había tomado el pelinegro, esperaba que se mejorará lo más rápido posible.
Ya había pasado 3 años desde que no iba a esa casa, 3 años desde lo sucedido.
Se dirigió a su nuevo hogar, esperando que estuviera su amado para reconfortarlo por la pequeña pelea que había tenido.
Necesitaban pensar.
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