Beso (PT. 1)

756 91 29
                                    

Izuku se quedó inmóvil, mirando directamente a los ojos a Shōto sin casi poder respirar.

Nervioso, se rió— No bromees, jaja...

—No estoy bromeando.

Su corazón latía rápido y bombeaba sangre a toda velocidad por su tembloroso cuerpo. No se creía que las palabras del muchacho fueran reales.

—No es gracioso, Todoroki, no me gusta que te burles de mí.

—No me burlo de ti. Lo digo en serio.—La rabia y la tristeza empezaban a acumulársele al pecoso en el pecho, mirando los acuosos ojos de Shōto, esperando un "es broma" de su parte, pero nada...

El chico de cabello verde apretó los puños y se mordió con fuerza los labios. No quería empezar a llorar y que Shōto lo viera así.

—...Entonces, ¿es en serio?... ¿De qué estás hablando?...¿así que ahora estás enamorado de mí?

—Si.—Las palabras salieron de su boca sin titubear, sin miedo, pero la expresión amarga que tenía parecía engullirlo.

—...¿Y? ¿Qué planeas hacer? ¿Por qué me dices esto ahora?— A cada palabra alzaba más la voz.— Tú tienes novia. Cuando me declaré claramente me rechazaste... por fin te pude dejar ir y... ¿¡ahora si te gusto!? ¿¡A qué estás jugando!?

No quería llorar, pero era prácticamente inevitable que sus ojos enrojecieran y se llenaran de lágrimas, sin embargo, aún no las derramaba.

Todoroki sintió como la sangre se le congeló en el pecho cuando Izuku le dijo esto. No sabía que hacer.

—Midoriya, yo, no quería rechazarte, me gustas desde que empezamos las clases. Y-Yo no pude decirte nada porque-

—¿De qué estás hablando?—Las emociones lo abrumaban—Durante meses busqué una señal, al menos una, de que yo pudiera gustarte... Si te gusto desde hace tanto, ¿por qué nunca te acercaste a mí? ¿Por qué coqueteabas con Momo frente a mí? ¿Por qué me pediste que te acompañara a comprarle algo?...Tú me dijiste que estabas enamorado de ella.

—Mentí, estoy con ella porque mi padre sospechaba que soy gay, y creí que podía tener una relación con ella... No tenía el coraje de acercarme a ti, y al igual que tú estuve buscando una señal contigo. Creía que te gustaba Uraraka...

Cuando el pecoso vio las lágrimas rodando por las mejillas de Shōto, pareció que algo en su corazón empezaba a oprimirle con fuerza el pecho.

Todoroki estaba como nunca se lo había visto, completamente conmocionado y preso de un sollozo que le dificultaba el habla, pero como pudo, continuó— Cuando te declaraste, ni siquiera supe qué decir... No podía hablar, sentí que me estaba desmoronando. Me sentí estúpido, cretino y un completo idiota. Fue una estupidez no haberte dicho nada, pero te juro que no miento.

Ambos callaron mirándose, dándose cuenta de que esa noche no podrían terminar esa conversación. Si seguían alzando así la voz despertarían a todos.

Entonces, Shōto se aproximó lentamente a Izuku, quien al principio retrocedió, dudoso, pero volvió a quedarse inmóvil.

—...Dame, una oportunidad... por favor... te lo ruego.—La voz le temblaba ligeramente, y aproximó sus labios hasta los de Izuku. Sus respiraciones chocaban nerviosamente y pronto sus alientos se mezclaron en un corto beso. Shōto tan solo posó sus labios delicadamente sobre los de Izuku, temblando y respirando agitadamente.

Izuku sintió todas sus emociones correr a lo largo de su cuerpo. No pensaba con claridad. Estaba eufórico, colérico, asombrado y dolido, pero rápidamente volvió en sus casillas.

Se separó con brusquedad de Shōto.

—Momo si está enamorada de ti, tú lo sabes... y no voy a ser partícipe de esto, no voy a estar con alguien que tiene pareja, y menos si la está usando de tapadera porque tiene miedo.

—No, espera, Midoriya... No solo fui yo quien no hizo nada nunca. Por favor entiéndeme, mi padre estaba a un pelo de darse cuenta, él me habría matado, estaba desesperado. Si, soy un cobarde, pero ya no lo seré más. Dejaré a Momo, le pediré perdón, pero ya no quiero seguir jugando... Me gustas de verdad.

—...Vamos a dormir, hablemos de esto mañana. Si seguimos así vamos a despertar a todo el mundo, y yo, no sé qué pensar ahora.

Síndrome del corazón rotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora