Incendio // Karmaland 4

Capítulo 13

Luzu
Se habían designado las rutas de expedición, le había tocado a dirección izquierda, cruzando a su casa y bordeando la montaña en la.que residía su compañero policia amante de los Star Wars.

Dos pueblerinos de Karmaland le seguían, los tres armados y cada uno con sus correspondientes armaduras de hierro, aunque el único con espada de diamante, era el castaño.

Deseaba ir con Muerte, pero Fargan tenía razon, tenían que ir lento para poder visualizar todo lo posible, aunque eso llevará mas riesgo. Mataba con su arco a cualquier monstruo que se acercara o intentará acercarse, quemandolos con los hechizos que le había puesto a su arma, pues era mejor enfrentarlos a distancia.

Después de cruzar sus terrenos e ir más allá, atravesó su montaña rusa, y un río que pasaba por detrás de la casa de Alexby. Comenzaba a acercarse a una zona totalmente inexplorada, hasta que uno de sus acompañantes le detuvo.

—Señor Luzu, mire en el cielo- sin mucho interés dirigió su vista a donde señalaba el hombre detrás de él.

Las luces del fuego artificial adornaban el cielo en las lejanía.

Lo habían encontrado.

—Tenemos que regresar, andando- su Auroncito... rezaba a los Dioses que estuviera bien.

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Alexby
Como policía, había pedido cubrir más terreno siendo correspondido con Fargan, pues además de buscar el cuerpo de Auron, él cual, esperaba que estuviese bien, tenía que buscar marcas de algún extraño que hubiese cruzado la zona, evidencia de que le habían secuestrado.

Sería algo difícil de investigar, pero para ello, había ensallado arduamente con Fargan.

Le habían asignado la zona izquierda con dirección a su casa y la casa de Mangel, casi cruzando con el area que a Luzu le había tocado recorrer, pero trataría todo lo posible con que no fuera así.

Intentaban llegar a su casa, pues no sabían si Auron había ido a pedir ayuda, desviando hacia la derecha, pues la parte trasera de su casa era un acantilado.

Bajando hacia donde los arboles venenosos rodeaban el camino entre las montañas, encontraron escondida la casa de Mangel, paseando un momento por la pradera que rodeaba el lago, el aullido de los lobos les distrajo, buscando la causa que les había alterado, pudieron escuchar la nitida explosión que era casi imperceptible a causa del movimiento del aire en las hojas.

—¡Son fuegos artificiales!, lo encontraron- aclamo Alexby emocionado, pues no tendrían que preocuparse, ya cansados por todo el movimiento que habían tenido durante el día, caminaron de regreso, animados pues su amigo quien al parecer, ya había sido encontrado.

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Lolito
A petición de la mayoría, le habían asignado con dirección hacía el lado izquierdo, donde alguna vez había estado su casa, pues él mejor que nadie, conocía la zona.

El gran prado que había dejado sin arboles, gracias a la bondad de los Dioses, ahora se encontraba cubierto por maleza, flores y frondosos robles.

Llegaron a la montaña, de la cual, una cascada de lava iluminaba y caía con gracia sobre el lago, creando roca cuando se hacía contacto.

Él, junto a los hombres que le acompañaban, subieron por las rocas, hasta llegar a la cima de dicha montaña y una vez arriba, con una vista panoramica de Karmaland, miró las estrellas, preguntándose donde estaría su Auron.

—Alcalde, miré, una luz- sus ojos con rapidez bajaron, para que la polvora en colores, explotara y le llenara de emoción.

Alguien había encontrado a Auron, solo esperaba que estuviera con vida.

—¿Y qué estamos esperando? Hay que bajar- brincaba con gusto de piedra a piedra, confiaba firmemente en que su segunda mano estuviera bien.

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Fargan
Decidió tomar la ruta hacia su casa, solo iban dos en su burrito sabanero, pues en principio tenian que atravesar el pueblo, después su casa y por fin, podría cubrir una importante zona, pues hacía esa dirección se encontraba otro pueblo.

Mientras que el pueblerino, tomaba las riendas de su burro, él disparaba las flechas a los enemigos que intentaban dañarlos.

Su primera parada fue su casa, encontrándose con un pacífico panorama y sin un Auron esperando en su entrada. Sin darle mucha importancia, siguieron cabalgando hasta que a lo lejos, pudieron divisar las chimeneas en las cornizas de las casas del pueblo vecino.

—Frena, Fernando, que al parecer, ya encontraron a Auron, tenemos que regresar- sonrió bajando el arco, pues podía ver las hermosas luces de los fuegos artificiales en el cielo, intercambiaron lugares, y sobreesforzando a su burrito, fueron marcha atrás.

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Hoy es una ocasión especial, pues llegamos a los 2k!!!

Para mí, es un gran logró, el que tantas personas me lean y les guste lo que escribo.

Es el mejor regalo de San Valentín que pudiesen darme ❤

Espero me sigan leyendo hasta el final de la historia e incluso, en mis futuros proyectos.

Yo me esforzare para darme contenido de calidad ❤