Jodiendo a mi ex [Taekook]

Capítulo 16

Gracias por leer y por los 2.42 k que me emocioné cuando lo vi. Las quiero mucho.

Quería abrir mis ojos pero mis parpados se encontraban pesados, no se escuchaba nada a excepción del sonido de los pájaros y entendí que ya había amanecido. Me encontraba abrazando un peluche pero mi ceño se frunció cuando sentí algo sobre mi cintura.

Con el corazón en la garganta abrí los ojos y parpadeé para acostumbrarme a la intensa luz que se colaba por las cortinas. Levanté un poco la cabeza y había un brazo musculoso abrazándome.

¿Cómo es que no recuerdo nada? ni siquiera recuerdo haber bebido...

Volteé lentamente con cuidado de no despertar a mi acompañante y casi suelto un grito cuando vi que era Taehyung .

«Bien, Jungkook, es hora de refrescar la memoria». Me dije a mi mismo mientras miraba a todos lados nervioso.

De inmediato levanté un poco la cobija y solté un suspiro de alivio al ver que me encontraba con ropa. Al observarlo mi mente quedó en blanco. Se veía tan pacifico durmiendo, su respiración era lenta. Su pecho subía y bajaba con lentitud, inconscientemente mis manos fueron a su rostro, delineando sus facciones con la yema de mis dedos, con cuidado, como si fuera un cristal.

Mis dedos pasaron por cejas para luego bajar por el puente de su nariz y recorrer su mejilla hasta parar en sus labios. Sentí el calor en mis mejillas al recordar el beso de anoche, es una lástima que no lo va a recordar.

Sonreí al ver la hermosa imagen que tenía solo para mi.

—No, no—entrecerré los ojos—, no.

Rápidamente retiré mis dedos de su rostro, fruncí el ceño y bufé.

—Esto no debe ser así, no debe —dije, rápidamente me paré sin importar despertarlo y en un mal calculo mis piernas se enredaron con la cobija y caí de cara al suelo—. Auch.

Me quejé mientras sobaba mi nariz y escuché un gruñido de parte de él. Me quedé quieto unos segundos hasta que decidí levantarme. Observé con cautela y había cambiado de posición. Luego recordé lo que había sucedido.

—Dios —me revolví el cabello y estornudé—, jamás volveré a hacer una fiesta.

Me paré y caminé con lentitud al baño. Me mire en el espejo y suspiré. Necesito hablar urgentemente con Harin. Si mis padres se enteran de que casi me ahogo de seguro y me ahogan ellos mismos por mi pendejez.

Definitivamente fue la peor noche de mi vida.

Me cepillé los dientes y me lavé la cara. Salí de la habitación y no di ni dos pasos cuando tropecé con un cuerpo tirado en el suelo. Y así estuve hasta bajar abajo que habían un montón de personas dormidas. Busqué con la mirada a mis amigos y al primero que vi fue a Nam que estaba abrazando una botella y estaba hecho bolita.