Capítulo 25

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Evan preparó junto a Elena algunos bocadillos para cuando llegara Roni a pasar la tarde con él. No se encontraba nervioso, pero le entusiasmaba la idea, quizás demasiado, de que ella pudiese pasar tiempo con él.

Sabía que luego tendría que hablar con Benjamín pero estaba dejando pasar ese tema por los momentos.

— ¿Qué película verán? —preguntó Elena, Evan  se encogió de hombros, no había pensado en ello, creyó que lo mejor sería que Roni escogiera algo que le gustase.

—La chica escoge—sonrió, Elena rió por el intento de Evan de mostrarse coqueto—. ¿Conocerán a tus padres?

—No, por ahora no—respondió—. No quiero apresurar las cosas, y conocer a los padres es algo serio. Mis papás solo conocen a Sierra como la única mujer en mi vida, y necesito que permanezca así hasta que Roni sea mi novia.

—Entonces piensas pedirle que sea tu novia.

—Luego de hablar con Benjamín, necesito hacer las cosas bien—respondió—. Por lo poco que queda del código.

Sacó su celular para ver la hora y percatarse que ya le quedaba poco tiempo para ver a Roni. Decidió escribirle un mensaje para ir a buscarla.

Evan_3:23pm:

¿Cuánto te falta de clases? Voy a buscarte.

Caminó hasta la sala para tomar las llaves del auto y su billetera y regresó a la cocina con Elena.

—Iré a buscar a Roni, regreso en media hora—le dijo y besó su mejilla. Elena asintió y lo vio alejarse hasta salir de la casa.

Evan manejó unos quince minutos o quizás un poco más, hasta llegar a la entrada de la Universidad que se encontraba cerca de la Escuela de Leyes, en donde se encontraba Roni. Le mandó un mensaje informándole que se encontraba ahí y se puso a ver sus redes sociales para distraerse mientras tanto.

Sintió un golpeteo en la ventana y notó a Roni con una sonrisa, se acomodó y se bajó del auto.

—Se me hizo un tanto difícil saber cuál eras tú porque nunca me describiste tu auto—dijo ella, Evan sonrió y le dio un beso en la mejilla.

—Ven—tomó su mano y le dio la vuelta al auto para abrirle la puerta de copiloto Roni sonrió ante eso, se sentía extraña porque nunca antes le habían hecho ese gesto—. ¿Qué tal tus clases hoy? —preguntó encendiendo el auto para comenzar a manejar.

—La verdad que estuvo bien—dijo—. Estuve haciendo un trabajo con Mike y quedamos reunirnos luego para terminar todo, es sobre el análisis de un caso de divorcio.

—Oh genial, ¿simulan ser los abogados?

—Algo así—respondió ella—. ¿Y a ti cómo te fue?

—Estuve práctica en la mañana y luego clases de psicología deportiva, que sé que no te sorprenderá, pero es mi área de la psicología favorita—sonrió, Roni asintió, le gustaba que Evan hablase de su carrera porque se le notaba que le gustaba, era simplemente fascinante escucharlo.

—Me parece genial—le dijo, miró la radio y sonrió—. ¿Puedo colocar algo de música? —Evan asintió y ella se dispuso a buscar la estación perfecta.

Radio Stardust era su estación de radio favorita, tendía a escuchar el programa de Verne, un chico de la radio, en la noche pero sabía que a esa hora colocaban un buen listado de canciones.

Al llegar, Evan le abrió la puerta nuevamente y caminó tomando su mano hasta entrar a la casa, en donde Elena se encontraba en el sillón de la sala doblando algunos manteles recién lavados.

—Hey, regresé—le dijo acercándose—. Ella es Roni—la presentó, Elena se levantó del sillón y la saludó.

—Un gusto Señora Brown.

—Oh no, cariño, no soy la mamá de Evan —aclaró—. Sus padres no se encuentran en casa en este momento.

—Ella es Elena, nuestra ama de llaves y parte de la familia—la presentó, Roni sonrió y asintió un tanto avergonzada por el incidente de hace un momento.

—Un placer Señora Elena—ella negó.

—Sólo Elena—le dijo—. Me llevaré estos manteles para ir a buscarles algunos bocadillos.

Evan asintió y se sentó en el sillón, le hizo señas a Roni para que sentara con él. Pasó una mano por el cuello de la chica y encendió el televisor para buscar alguna película en Netflix.

— ¿Qué quieres ver? —le preguntó a Roni.

—Mmm...es un poco vieja pero me gustaría ver The Breakfast Club—le dijo, Evan asintió y buscó la película.

—Amo esa peli, la he visto un montón de veces y nunca me aburro—Roni asintió.

—Sí, es de las pocas películas para adolescentes que realmente te mantienen pendiente todas las veces que la ves—respondió.

Elena llegó con los bocadillos y se los entregó a Evan, este le agradeció y se colocó la bandeja en las piernas para darle play a la película. Evan recostó su cabeza en el hombro de Roni y ella sonrió ante la confianza que le estaba dando.

Agradeció mil veces en su mente a Mike por decirle que fuera a La Clave de Sol ese día, porque si no fuese así, quizás no estaría en ese momento sentada junto a Evan Brown, con su respiración un tanto agitada por los nervios mientras veían una de sus películas favoritas.

—Puedes tomar uno con confianza—dijo Evan en su oído, se refería a los bocadillos—. Están muy ricos, yo ayudé a Elena a hacerlos.

Roni sonrió y tomó uno, no sabía que era, pero era un trocito de tostada con alguna crema que no reconocía de qué era. Se lo llevó a la boca y tomó mostrándole a Evan que le habían gustado, ella no sabía qué eran pero realmente estaban buenos.

—La crema es una receta de mi papá, a veces le gusta cocinar y hacer sus propias cosas—le explicó—. La creó hace mucho, cuando estaba en la universidad y nos la ha enseñado a todos pero a nadie le queda igual de bien que a él—explicó—. Elena y yo hacemos nuestro intento—rió.

—Está muy rico, mis respetos a tu papá—él sonrió y se acercó a ella para darle un beso en la mejilla.

—Le diré que tiene otra admiradora de su receta—ella asintió y miró la película mientras comía un poco más de ello.

Evan se levantó del sillón y se dirigió a la cocina para buscar algo para tomar, sacó del refrigerador una gaseosa que se encontraba por la mitad y tomó dos vasos para echarle hielo y llenarlo de ello. Regresó con Roni y le entregó uno de los vasos para beber del otro.

— ¿Qué tal va la tarde? ¿Te gusta?

—Sí, es cómodo estar así contigo—bebió un poco de la gaseosa, él sonrió y se acercó a ella para darle un pequeño beso en los labios.

Se separó y tomó la bebida de sus manos para colocarla en la pequeña mesa frente a ellos y volvió a acercarse para besarla bien. Se acomodó un poco en el sillón para estar cómodo y continuó besándola.

—Me gustas Roni—le dijo y la besó—. Me gustas mucho.

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H O L A A A !

Evan le dijo a Roni que le gusta, repito, Evan le dijo a Roni que le gusta. No es un simulacro señores, está pasando realmente.

xd

¿Cómo están? Se que en muchos lugares hay cuarentena, so...quiero saber cómo les está yendo #LávenseLasManos

#DomingoDeCodigos 


Los códigos de EvanWhere stories live. Discover now