❝Too Repressed❞ ↝ Stanley Uris ↜[Cancelada]

𝙘𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧 𝙤𝙣𝙚

La renta había llegado a manos de Stan, y se dio cuenta que no podía financiar por sí solo su departamento. En cuanto vio la notificación de pago, supo que terminar con su novia no sólo fue una molestia por la humillación que sufrió y los complejos que tuvo desde ese día en adelante, sino que también era algo poco conveniente en lo monetario. 

Sarah era una chica preciosa, rubia, de buen cuerpo, nariz fina y ojos azules. Una personalidad alegre y transparente, sabías lo que estaba pensando de ti y del resto, y la mayor parte del tiempo eran cosas buenas, claro, siempre y  cuando no le pidieras que te ahorcara mientras tenían sexo. 

Stan jamás olvidaría su expresión cuando le pidió ese pequeño favor. Salió corriendo de la sala, y ni siquiera hizo el esfuerzo de disimular un poco su disgusto. Vamos, habían cosas peores ¿no? Uris estaba seguro de ello, pero en cuanto la chica llegó al día siguiente al departamento, diciendo que no quería seguir con un pervertido, todas esas cosas se le olvidaron, y el chico se sintió como el cerdo más grande del mundo.

Cuando le contó a Richie, el chico de lentes se rió de él hasta que el estómago le dolió, y le dijo que estaba acabado, ya que Sarah le contaría a sus amigas, y ellas al resto de la universidad, y Stan se convertiría en el judío pervertido de Derry. 

Poco a poco, eso se fue volviendo realidad, y todos sabían quién era Stan, y por qué lo abandonaron. El chico se cerró, y no habló con nadie más que Mike, Eddie, y el ya mencionado Richie hasta el día en el que, con calculadora en mano, se dio cuenta que sin un compañero de piso, perdería el departamento. 

Pero seamos claros, ningún chico querría vivir con él, ya que después de que ese rumor se esparciera, comenzaron a decir que era homosexual, que obligó a Sarah a ser su novia para que nadie se diera cuenta. También dijeron que era un degenerado que, además de gustarle que lo ahorquen, le tomaba fotos a las chicas por debajo de las faldas, o cosas aún peores, por lo que ni una sola mujer estaba dispuesta a vivir con él luego de eso.  Nadie jamás iba a querer compartir piso con él. 

—¡Stan!—escuchó a sus espaldas. Caminaba por los pasillos de la universidad, dirigiéndose a la puerta para ir a la biblioteca de Derry. 

Se volteó. Mike corría hacia él con su radiante sonrisa, y con un papel en la mano. 

Las cosas habían cambiado bastante para el moreno en Derry. Cuando Henry fue arrestado, su abuelo lo dejó ingresar a clases normales. Se dio cuenta de que era muy inteligente, y que era realmente bueno para socializar, además de que en los deportes le iba excelente.  Se había convertido en el único de los perdedores que le agradaba a todo el mundo. 

—¿qué sucede?—preguntó Stan sonriendo ligeramente al ver a uno de sus amigos tan energético. 

—te conseguí compañero de piso—dijo dándole una hoja con un número y un nombre.—Arabella Brown—sonrió intentando sonar lo más optimista posible. El semblante de Stan palideció.