Con Cada latido

4

Jhonathan:

Antes soñaba con caída libre, ya sabes, la sensación de caer de una gran altura y levantarse antes de tocar el suelo.

Pero desde esa noche lo único que aparece mientras duermo son pesadillas, recurrente y horribles pesadillas.

Despierto agitado y con el cuerpo sudoroso, la imagen se repite una y otra vez en mi cabeza y quedo recostado con la mirada en el techo hasta normalizar mi corazón.

¿Cuánto más vas a estar ahí?

—¡Mierda!

No puedo dormir más, me levanto y voy hacia la laptop, quizás algo de trabajo pueda borrar de mi mente el mal rato.

(*)

—¿Salir?.

Samanta sonríe.—Para despejarte un poco, creo que nos vendría muy bien una salida de amigos ¿No lo crees?

—¿Amigos?

Ella se sonroja.—O como tú quieras que sea.

Mis ojos se abren.

—Creo que después de todo este tiempo, podríamos por fin hacerlo, tu y yo..—Me responde.—Tener una cita.

Una cita..

—¿Qué dices, Jhonathan?

Niego despacio.—Lo siento, Samanta.

Su rostro ilusionado cae.

—No estoy..—Me detengo.—Todavía no estoy listo para salir con nadie.

Sus cejas se alzan.

—Lo lamento.

—Pero cuando lo estés.. ¿Prometes que seré la primera a la que le aceptaras una salida?

Nunca lo estaré.

Es por eso que respondo.—Lo haré.

Allison:

—Y eso es todo lo que pasó esta semana.—Concluye Karen.—No te perdiste nada realmente.