«¡𝐔𝐧 𝐧𝐢𝐧𝐣𝐚, 𝐮𝐧 𝐨𝐦𝐞𝐠𝐚!» 𝗔𝘃𝗲𝗻𝗴𝗲𝗿𝘀 & 𝗡𝗮𝗿𝘂𝘁𝗼 [ˡⁱᵇʳᵒ 1]

Capítulo 3 -parte I

Naruto se despertó a pocas horas de la salida del sol. Y sorprendentemente no había ni siquiera un solo gorjeo de ave cerca. Cómo por supuesto, ni una luz sobre una ventana que lo despertara. Porque después de todo no había ventana.

Así que solo el repentino golpeteo en la puerta de la habitación lo había sacado de la cama a pesar de su intento por ignorarlo.

Para ese momento, Naruto ya estaba despierto. Disgustado pero despierto.

Un poco abrumado por quedarse dormido, abrió la puerta con su cabello revuelto en picos salvajes. La mujer que estaba detrás de la puerta le dió una mirada penetrante.

Buenos días para tí también, mujer Danzo. Fue lo primero que pensó él Omega. Antes de que pudiera reírse de su propia broma sarcástica, el rostro de Naruto se enegrecio.

No importa que tan amargada fuera alguien. Nunca podría o debería ser comparado con ese vil viejo del demonio.

Ella ignorante de los sentimientos amargados del Omega le extendió un par de archivos que Naruto tuvo que recibir.

"6:00 A.m. Debes dirigirte a la cabina. Fury dispone de su presencia.", los ojos de la mujer se posaron en los suyos mientras le recordaba estrictamente.

Naruto aún medio adormecido asintió repetidamente.

Sin molestarse en mencionar sobre la apariencia del Omega. Ni tampoco en la mueca desequilibrada en su rostro, ella le señaló favorablemente. "Y por favor, vístete."

El mismo Naruto estaba seguro que la forma descuidada de abrir la puerta fue contraproducente. Con solo una camiseta de dormir, pantalones cortos y un gorro de gamakichi en su cabeza. Y por supuesto, la baba colgando de la comisura de sus labios. Pero realmente no estaba esperando que mandarán a llamar por él tan temprano.

"Por supuesto...", fue lo único que pudo decir Naruto antes de que ella lo mirara con esos ojos profundos. Había sido lo mismo desde que estaba bajo su guía. O por lo menos desde que Naruto había apuntado con un arma filosa sobre el cuello del viejo espía. Talvez ella estaba enamorada del viejo, y Naruto había tocado uno de sus nervios con su pequeño juego.

O talvez la lealtad de la mujer era mucho más fuerte que la de cualquier otro humano.

Naruto se encogió de hombros internamente.

Sea lo que sea, realmente no le importaba.

Sólo había una cosa en su mente. Y eso era, buscar un lugar donde pueda comer ramen.

Por el rabillo de sus ojos, Naruto observó el momento en el que ella parecía perder la paciencia con él fuera de foco. Por lo que su expresión hablaba de una mujer ocupada.