Charla amarga

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Pasaron exactamente tres horas desde que Deku envió el vídeo hasta que Lemillion apareció en la puerta del almacén.

-Vaya, mira a quien tenemos aquí-comentó el peliverde mirando las cámaras de seguridad.

Mizuki apretó las manos, realmente su novio era tan cazurro como para ir él solo a la reunión. Dejó entrar al otro chico, que abrió la puerta del hangar e inspeccionó el lugar, cuando localizó a su novia, su mirada se fue dividiendo entre ella y Deku, sabiendo dónde estaban ambos en cada momento.

-Me alegro mucho de que hayas decidido aparecer, Lemillion-habló Izuku acercándose a Mizuki.-Por un momento pensaba que ibas a avisar a otros héroes, pero no, has sido bastante fiel.

-Bueno, en cierto modo,-interrumpió el otro con una mirada seria,-yo soy un héroe, así que no creo que hayas actuado bastante bien trayendo a un héroe a tu guarida.

Aquello hizo que Deku soltara una escandalosa carcajada, tocando el brazo de Mizuki.

-No me dijiste que era tan gracioso-dijo calmandose, haciendo como si se quitara las lágrimas por haber reído mucho.-Pero que más puede esperarse del sucesor de All Might.

Mirio se tensó, esperando la mirada perdida de Mizuki al no saber de qué hablaban. Sin embargo, esta siguió manteniendo su misma expresión neutra.

-Ah, no te preocupes, te he hecho un favor-comentó Deku como si no fuera nada.-La he explicado todo eso del One for All, el sucesor y bla bla bla. Ah, por cierto, ¿no se supone que la base de una buena relación es la confianza?-acabó sonriendo el joven.-Porque si es así, no lo estás haciendo muy bien, Lemillion. Oh, y como olvidar aquella vez que impidió que tu te quedaras sin el One for All, ¿eh?

El corazón de Mirio cayó al recordar los eventos de la batalla con Overhaul. En cierta forma, todo era su culpa. Si no se hubiera metido en medio, Mizuki podría haberse protegido y la bala nunca la hubiera golpeado.

-Tanto trabajo, y el siguiente sucesor de ese gran poder estaba a punto de malgastarlo. Años y años evolucionandolo, ¿para qué?¿para perderlo a la mínima de cambio?-continuó Deku pinchando en la herida.-Respondeme a esto, Lemillion. ¿Eso es actuar cómo un héroe o cómo un completo inútil?

Mientras Mirio se hundía más y más con sus palabras, hubo una voz que lo salvó de toda aquella desesperación.

-Un héroe.

Los dos chicos dirigieron su mirada a Mizuki, que esta tenía los ojos clavados en los de Mirio, como si pudiera verle el alma.

-Arrisgar lo más preciado que tienes, algo que es una parte de ti por otra persona, es ser un héroe. Puedes acabar en la desesperación, pero hay una forma de salir de allí: con tu gente apoyándote. Esa es la definición de ser un héroe, estar allí cuando la otra persona te necesita, hasta el punto de arriesgar todo por el bien de la otra.

Aquellas palabras llenaron el corazón de Lemillion, sabiendo que eran verdad. Deku, en cambio, siguió con su misma actitud.

-Sinceramente, sigo pensando que eso es ser un completo inútil. Hay que analizar la escena y actuar acorde a eso. Pero vosotros héroes, solo actúas por el bien de vosotros mismo. Eso es lo que se ha convertido esta sociedad.

-¿No te tomaba por un seguidor de Stain?-comentó Mizuki atrayendo su atención hacia ella.

-Ni yo tampoco te tomaba por alguien que es capaz de recibir una bala, perdiendo sus poderes-la acallo.-Dime, ¿qué tal se siente ser alguien sin una peculiaridad?¿qué tal se siente estar por debajo de todos?-cuestionó con una sonrisa macabra.

Mizuki sonrió de una manera pícara.

-Pues bastante bien porque la ostia te la vas a ganar-comentó mirando hacia donde estaba Lemillion. Estaba, porque había desaparecido de su lugar.

Entonces, Deku miró al suelo en el momento exacto en el que Mirio se expulsaba del suelo y le golpeaba en la barbilla, lanzandolo hacia atrás, hacia la mesa, donde los utensilios cayeron al suelo.

Mirio aprovechó y soltó a Mizuki rompiendo sus cadenas.

-Lamento no haberte contado nunca lo del One for All-se disculpó este cogiendo sus mejillas.-Tenía pensado contártelo, pero todo empezó a ir patas arriba y pensé que lo mejor era que no lo supie-

La peligris lo cortó de forma eficaz plantandole un beso en los labios.

-No te preocupes. Lo entiendo-sonrió con cariño, luego dirigió la mirada hacia la mesa, donde Deku estaba apuntándoles con una pistola.-¡Al suelo!-gritó empujando a ambos al suelo, evitando la bala por poco.

-Venga, venga, salid a dar la cara-habló el peliverde con voz cantarina, cogiendo tres de las balas que había en el suelo sin dejar de mirar a los otros dos.

-Usame como escudo-pidió ella a Mirio.-Yo ya no tengo peculiaridad, así que a mi no me afectara.

El rubio asintió colocándose detrás de ella. Izuku disparó un par de balas golpeando a Mizuki, pero apenas hacían daño y como ella no tenía nada que perder, se quedó en su sitio.

Al crear un punto ciego, Mirio se metió en el suelo, logrando por segunda vez golpear a su enemigo. Mizuki aprovechó el momento y corrió hacia Deku, intentando quitarle la pistola, pero este se libró de ella empujandola al suelo y colocando una mano en su brazo. Casi al instante, la peligris sintió que su energía estaba siendo drenada.

-Yo que tu no me movería, Lemillion-recomendó Deku cuando el otro volvió a salir del suelo.-Si no lo haces, Sea Witch muere. ¿Entendido?-preguntó antes de seguir hablando.-¿Sabes? Eres bastante bueno, el perfecto sucesor del One for All. No me cabe ninguna duda.

El peliverde se estaba despistado a causa de su charla. Mizuki, al estructurar el suelo, se dio cuenta que cuando Deku cayó contra la mesa, los cajones se habían abierto, dejando caer una segunda pistola que se encontraba en el rango de visión de la joven.

Con mucho cuidado, cogió la pistola, acercándosela a ella. Miró las balas y agarró una roja, como las que la habían disparado a ella. Cargó la pistola e intentando no desmayarse por culpa de la energía perdida, disparó a Deku. Este se quedó en shock, como si no supiera qué acababa de pasar.

El peliverde movió su brazo y cogió la bala que le había disparado. Casi al instante, este empezó a hiperventilar. Se había quedado sin el poder que le había dado All for One. Volvía a ser una persona sin don.

En un acto de rabia, sacó un cuchillo de su traje, listo para asesinar a Mizuki.

-¡No!-gritó Mirio al ver aquello con puro temor, sabiendo que a la distancia en la que estaba no llegaría a tiempo.

La chica abrió los ojos, alzando los brazos encima de ella. De repente, la humedad que había allí se convirtió en agua, colocándose encima de ella, como si fuera un escudo protector.

Todos se quedaron estupefactos, Mizuki fue la primera en salir de ese estado y envió a Deku hacia la pared, golpeandolo tan fuerte que este de quedó inconsciente. Después lo congeló allí.

Mizuki, se miró las manos, sin saber cómo había ocurrido aquello. Pero al mirar los objetos que había en el suelo, se dio cuenta de que no solo había balas rojas, sino que había mezcladas balas de color azules. Y Deku, al no mirar cuales estaba disparando, disparó una de las azules a la chica.
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Bien, vamos a volver a explicar algo. En el estuche caben 5 balas. En las que quitan los poderes a la gente, Overhaul había usado una contra Mizuki. Midoriya había cargado con una bala la pistola. Quedaban 3 más en el estuche. Cuando todas las balas se mezclaron, cogió tres sin darse cuenta de que estaban mezcladas.

Disparó por lo menos 3 veces a Mizuki, con la casualidad de que 2 de ellas eran azules (las últimas que disparó). Queda 1 bala de las que quitan los poderes. Mizuki cogió la última y disparó a Deku.

Lo sé, lo sé. Lógica aplastante.

Dark Waters (Mirio Togata/Lemillion y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora