VIVIENDO CON LORI

La visita inesperada

Nuestra historia tiene comienzo en la época de otoño en donde dos hermanos aprendieron a convivir juntos y en armonía.

Nueva York 5:30 pm

Una tarde Lincoln  Loud regresaba a casa, quien ahora tenía veinte años, a su edad, había logrado entrar a trabajar en una desarrolladora y editorial de cómics muy reconocida en el Estado de Nueva York y del País, fue su logro por todas sus buenas creaciones desde su niñez y a la vez estaba terminado sus estudios de diseño gráfico.

Todo iba bien en la vida de Lincoln, hasta un día llego algo que lo hizo cambiar dando un giro completo.

Mientras llegaba a su hogar, rápidamente pudo ver a una chica rubia que estaba esperando sentada en la puerta de su hogar con una gran maleta.

Durante el tiempo que La chica lo esperaba, muchos de los vecinos quienes vivían cerca del hogar del peliblanco pensaban que de seguro aquella hermosa mujer rubia seria la novia del peliblanco.

Ya cuando estuvo cerca de la vivienda, Lincoln rápidamente se dio cuenta que aquella mujer era nada menos que su hermana mayor Lori.

El albino estaba impresionado de que su hermana mayor halla venido sin siquiera avisarle de su llegada.

Estando a pocos metros, Lori vio a su hermano y al saber que era él, se levanto.

-Hola Lincoln, literalmente es bueno volver a verte después de tanto tiempo - dijo la chica mientras se ponía de pie.

-Ah, hola Lori, realmente tu llegada me tomo por sorpresa, nunca había imaginado que vendrías - hablo el chico tomándose la nuca.

-Lo siento Lincoln, perdón por no decirte de que vendría, se que primero debía de llamarte, debes estar molesto, pero... -  no pudo terminar debido a que el chico la interrumpió.

-¡No Lori, descuida, no es molestia, al contrario, me alegra mucho saber que viniste a visitarme.

-De verdad? Entonces, literalmente no estas enojado por haber venido sin darte la noticia?

-Ya te lo dije Lori, no es molestia, además ya me hacia falta algo de compañía en estos últimos meses, ya que vivir solo se siente tan vacío.

-No digas eso nunca Lincoln, sabes que toda tu familia siempre estará pensando en ti hermanito - hablo la rubia con una sonrisa.

-Gracias Lori, bueno mi querida hermana, estas en tu casa, déjame que te ayude con tu equipaje - dijo el peliblanco abriendo la puerta y tomando la maleta de su hermana.

Ya cuando ambos estuvieron dentro de la casa del peliblanco, Lincoln le ofreció a su hermana ponerse cómoda.

-Siéntete cómoda, mientras te traigo un jugo de frutas Lori.

-Wow, literalmente tienes una bonita casa Lincoln - hablo la rubia observando todo su alrededor.

-Si que es una vivienda bonita Lori y con lo que gano, me llega a alcanzar, pero hay momentos en las que debo de economizar para pagar el arriendo.

La chica se sentó en la mesa y se puso a disfrutar del jugo de frutas que su hermano le trajo.

Mientras Lori bebía el jugo, Lincoln llevaba la maleta de su hermana a la habitación de vacía de la casa que por cierto tenia una cama, un armario y una agradable vista por la ventana.

Luego de dejar el equipaje de su hermana en la habitación, el dejo sus cosas en su habitación y bajo a dialogar con su hermana a la cocina.

-Y bueno Lori, cuéntame que tal estuvo tu viaje - preguntó el peliblanco sentándose en frente de su hermana.