Capítulo 3.

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Wei Ying sentía algo cálido debajo de su cuerpo, estaba realmente cómodo, además de que el olor a sándalo lo rodeaba por completo. A pesar de estar medio dormido podía sentir movimiento.

«Un momento ¿Cómo podía estarse moviendo si estaba dormido?, y aún más importante, ¿Cuándo se quedó dormido? ¿Qué no iban rumbo a las montañas del clan Lan?»

Con eso en mente el omega abrió rápidamente los ojos. Fue ahí cuando notó que todo ese tiempo el alfa había cargado con él en su lomo. Los bosques verdes quedaron atrás hace mucho tiempo y ahora la nieve blanca era la encargada de cubrir todo a su alrededor. Incluso el cielo había dejado de ser oscuro para mostrarse de un azul claro y brillante.

De un salto bajó lo más rápido que pudo del gran lobo blanco y empezó a observar su alrededor.

—¿Cuándo?...

«¿Qué fue lo qué pasó?»

—Después de avanzar por el bosque caíste inconsciente debido al cansancio, pero parece que ya estás mejor.

El omega se sintió extrañamente avergonzado, si estuviera en su forma humana de seguro estaría rojo por la humillación. Y es que acababa de decirle al alfa que estaba bien. ¡Incluso le dijo que podía seguir corriendo!

Que gran mentira.

Realmente su cuerpo ya no pudo más y colapsó. Lo bueno es que aparentemente el alfa parecía ignorar eso.

—¿Seguro que puedes continuar?

—¡Estoy bien! —se apresuró a decir Wei Ying, realmente no se podía volver una carga.

—No eres ninguna carga.

El alfa parecía haber leído su mente. Eso lo puso nervioso, sólo un poco.

—Dije que estoy bien, perfecto de hecho, sólo necesitaba un poco de sueño, así que gracias —aseguró el omega empezando a avanzar, el lobo blanco no dijo nada y también siguió caminando.

Wei Ying estaba impresionado, todo se veía tan inmaculado, el blanco por doquier, incluso el lobo que iba por delante de él se camuflajeaba perfectamente, lo único molesto era que no estaba impuesto a caminar sobre la nieve, se sentía algo torpe.

Cansado del silencio el lobo negro prefirió empezar una plática, después de todo era mejor llevarse bien ¿no?

—Y...¿Cuál es tu nombre? — Ciertamente en ningún momento intercambiaron sus nombres, si bien sabía que pertenecía al clan Lan, realmente desconocía más allá de eso. El alfa le dirigió una mirada, pero no contestó, o al menos no le dejó tiempo suficiente para hablar cuando el omega siguió con su parloteo. —¡Yo soy Wei Ying, WuXian de cortesía! Crecí con los lobos de la manada Jiang en Yunmeng, corrí varias veces en la Cacería aunque no lo creas

—Lo sé —interrumpió el alfa. 

Al escuchar esa voz Wei Ying sintió su cuerpo temblar como gelatina. Ambos se detuvieron y se quedaron mirando mutuamente.

Y es que el alfa sabía quien era.

Justo el año pasado, cuando su hermano participó en la cacería lo vio por primera vez. El omega sin duda era el más hermoso de todos. Ese año el menor de los Lan no participaría en la cacería, por lo tanto tuvo que esperar en el acantilado con el resto. Fue ahí cuando lo vio salir corriendo del bosque; un omega, negro como la noche, se vea feliz, daba vueltas junto a otros miembros de su manada, y volteaba varias veces en dirección al bosque, parecía esperar a alguien. Poco después el lobo blanco vio a su hermano salir junto un pequeño lobo gris claro, notó como en ese momento el lobo negro dejó de agitar su cola y bajó las orejas, se veía triste ahora. El alfa se sintió mal al ver aquella escena. No sabía porque su corazón dolía por ver como su clan era el responsable de dañar a una criatura tan inocente, sentía la necesidad de protegerlo. 

Noche de CaceríaWhere stories live. Discover now