Noche de Cacería

Capítulo 37.

—¿Qué?—el omega sintió su corazón latir con fuerza.

—Dije que estás embarazado, tienes dos meses—la doctora no se veía sorprendida, al contrario lucía bastante divertida por la reacción del omega—Por esos tienes tantos malestares. Me sorprende que no te hayas dado cuenta antes.

Wei Ying seguía procesando la información, pero seguía sin creerlo.—¡¿Pero cómo?!

La mujer alzó una ceja—¿Enserio me preguntas cómo? Tienes un hijo, estoy segura que sabes cómo se hacen los bebés.

El omega se quería jalar los cabellos—¡No me refiero a eso! ¡Se supone que no debería estar embarazado! ¡Para eso vengo por la inyección!

—La inyección no siempre es efectiva, tiene sus excepciones y parece que esta vez algo falló. Son accidentes que nadie puede prevenir.

—¡Claramente algo falló!—gritó el omega tratando de entender que había salido mal. Había sido responsable «dentro de lo que cabe» y había ido a la mayoría de sus citas. ¡Incluso Lan WangJi le recordaba asistir!

—Con el paso del tiempo los cuerpos cambian, al igual que las hormonas—la doctora empezó a explicar—En ocaciones provocan este tipo de cosas. Los anticonceptivos se tienen que modificar ya que dejan de tener efectividad.

—¡Y hasta ahorita lo dices!

—¡Yo ya lo había dicho! ¡Y que iba a saber que tu cuerpo reaccionaría así, esto no tiene fecha establecida, puede ocurrir en cualquier momento!

Wei Ying suspiró—No lo entiendo, me he sentido normal, incluso mi celo pasado estuve tranquilo.

—¿Y qué hay del celo de HanGuangJun?—Wei Ying se quedó mudo—Si mal no recuerdo fue exactamente hace dos meses y apenas si sobreviviste.

Wei Ying se llevó las manos a la cara—¡Lan Zhan esto es tu culpa!

—Que yo sepa para hacer un niño se necesitan dos, no de uno—dijo la doctora como si le estuviera regañando.—Oye no es el fin del mundo, sé que no querías otro hijo, pero asume las consecuencias de tener una vida sexual tan activa, además de saltarte citas médicas. Soy una beta, no hago milagros.

—Pero... yo... A-Yuan...

—Wei WuXian pon atención—los ojos grises la miraron, el rostro del omega tenía un puchero—Lan SiZhui estará bien, tiene cinco años, casi seis, tampoco es un niño de brazos. Además HanGuangJun ha estado de tan buen humor desde que se enteró. Lo mejor será que hablen entre ustedes.

Algo hizo clic en la cabeza del omega.—Lan Zhan ya lo sabe ¿cierto?

La doctora asintió—¿Que clase de alfa no se daría cuenta que su pareja está en espera? Por lo regular son los primeros en notarlo. En cuanto lo supo me pidió que estuviera atenta a tu estado de salud.

Wei Yign no dijo nada, con el rostro agachado se levantó y dió las gracias a la doctora por atenderlo. Salió del consultorio con un sólo pensamiento en mente. Encontrar a Lan WangJi.

A paso rápido Wei Ying empezó a recorrer la residencia, pero por más que buscaba no daba con su pareja e hijo.

—¡MianMian!—llamó a la omega que iba pasando.

—¿Sí?—preguntó la omega mientras sostenía en brazos a una niña de apenas un año.

—¿Has visto a Lan Zhan?—trató de parecer normal aunque era obvia su ansiedad.

—HanGuangJun salió de la montaña junto al pequeño SiZhui, me parece que iban a practicar la transformación de pequeño SiZhui. Creí que estaría con ellos... ¿Todo bien?