Obsesión »FxM«

15

Mangle.

Una gran sonrisa se planto en mi cara. ¡Lo había logrado! conseguí que Springtrap me llevará a él. 

−Pero...−la voz de Spring fue dudosa−, ¿qué harás cuando estés con él?−balbucee mi respuesta, más él no me dejo terminar−. Tendrías que quedarte con él definitivamente. 

−Bu-bueno, ehm...

−Y no eres tan egoísta para desaparecer así de simple, ¿o sí?−inquirió, con una sonrisa de burla. 

−Yo, no lo sé−mordí mi labio inferior, nerviosa−. ¿De verdad tendría que quedarme, no puedo sólo verlo e irme?

Yo sí quería quedarme, pero Spring tenía razón; yo no era una egoísta. Joy se volvería loca al no saber nada de mí y tal vez sospecharía a dónde fui, por ende también se sentiría muy decepcionada y Bon...mi mejor amigo, estaría demasiado preocupado. 

−Nop, no puedes. Así que decide−tomó asiento lejos de mí, el sillón rechinó un poco y vi cómo blanqueaba los ojos. Tragué saliva. 

−Demonios...−susurré, indecisa.

Tenía tantas ganas de verlo, de volver a estar juntos. Sentí mi celular timbrar sobre mi muslo derecho, lo saqué del bolso de mis jeans y lo revisé, mi corazón pegó un salto y sonreí un poco, era un mensaje suyo. "No te preocupes por mí, estoy bien, ¿cómo estás tú?". 
Sabía que Springtrap aún me miraba, pero no le tome importancia y escribí una respuesta.  "¿Cuándo podré volver a verte?" Sé que evadí su pregunta, pero no podía escribirle que no me encontraba bien, no quería preocuparlo o algo así, suficiente debía tener con la policía detrás de él. Foxy no huiría siempre. Si en algún momento lo atrapaban...¿qué sucedería con nosotros? aquella pregunta me daba mucha inquietud. 

−¿Y?, ¿ya tienes una respuesta?−presionó. Hice una mueca y negué.

−¿Tú que harías en mi lugar?

−Por suerte no estoy en tu lugar, pero respondiendo tu pregunta...soy lo suficientemente egoísta para irme y mandarlo todo a la mierda−se encoge de hombros.

−Lo imaginé. −me crucé de brazos, pensativa.

−Mira, mejor regresa otro día y con más calma me das tu respuesta, ¿bien?, es demasiada tentación tener a una persona y no hacerle nada−sentí un pequeño escalofrío, Spring sonrió de lado−. Considérate afortunada, eres la primera a la que no siento necesidad de comer.−carraspee incómoda, él soltó una risotada.

−Ya, ya...¿tengo que darte las gracias?

−Cómo tú quieras.−fue su turno para encogerse de hombros.

Se levanto y camino hacía la puerta, yo le seguí. La abrió y ambos salimos del lugar, en completo silencio me llevo nuevamente a mi apartamento. 

Al día siguiente, me desperté gracias a Joy quién me mando a alistarme, pues en unos minutos de nuevo tendría que recibir a Freddy. Era un poco molesto, mi psicólogo, sigo preguntándome porqué rayos necesito uno. Me encuentro mucho mejor a cómo estaba antes.

Cuando terminé de bañarme, me vestí casualmente y salí, oí la voz de Joy y la voz de él. 

−Buenos días−saludé un poco seria, Freddy sonrió sin mostrar los dientes.

−Mangle, muy buenos días−contestó él, dándole un sorbo a la taza humeante de café.

−Ven−pidió Joy, palmeando el asiento a su lado.

−Sí, claro...−musité sentándome de mala gana, observé el paquete surtido de galletas y otra taza de café, supuse que era la mía.

−¿Cómo has estado, Mangle?−preguntó amable el chico.

−Perfectamente.−respondí neutral.

−Me alegro−le dio otro sorbo−, Joy, ¿podrías dejarnos a solas?

Joy me miró y luego asintió, parándose. 
Esa mirada había sido claramente un: Compórtate.

Cuando la delicada silueta de Joy desapareció por la puerta de su habitación, Freddy volvió a hablar.

−¿Dormiste bien?−fruncí el ceño. ¿Que clase de preguntas eran aquellas?, titubeé mi respuesta, esto era confuso.

−Creo que sí.

Él asintió.
−No dormiste bien.−afirmó.

−Ahm, bueno, supongo que si lo hice.

−No, estás dudando. Anteriormente me respondiste sin titubear, pero ahora respondes no muy segura, así que es un no definitivo−quise hablar pero él se adelanto−. Tranquila, es totalmente normal. No todos los días se duerme de maravilla.

−Pues sí, no todos los días.

−Háblame de él.−pidió sin verme.

¿De él?

−Sea más detallado.

−De él, Foxy.

−Ah...

¿¡Por qué demonios quiere que le hable de él!? si piensa que le daré más razones para mandarlo a las rejas, esta muy equivocado.

−No tengo nada que decir respecto a él.

−Claro que tienes que decir. Conviviste un tiempo con él y además...lo amas−musitó, esta vez viéndome fijamente, me estremecí.

−No vuelva a molestar con ese jodido síndrome.−solté de forma tosca.

−Oh, claro que no Mangle, calma−me sonrió con simpleza−. Sé que no lo tienes, y si no me quieres contar de él por miedo a que llegué a perjudicarlo, lo entiendo. 

−Uhm...−murmuré de mala gana.

−Puedes contármelo cuando te sientas lista. 

−Ajá...−lo pensé un poco, después le dije−, ¿cree que es buena idea arriesgarse por amor?−necesitaba la respuesta de alguien más, Freddy lo pensó.

−Siempre será buena idea mientras sea recíproco. Si no sabes sí lo es, arriesgarte también resultaría bueno−le presto suma atención a sus palabras.

−¿Por qué?−entrecierro un poco los ojos, él vuelve a sonreír.

−Es obvio el hecho de que la vida se compone un poco por los riesgos, si vives siempre con miedo a lo que sucederá, nunca podrás sentir que vives realmente, el hecho de que te arriesgues por lo que tú consideres amor de verdad, es algo sensacional, ¿o no?−quise decir algo, pero no se me ocurrió qué. 

−Parece que sí.

−Siempre dudando, eso es algo que no quiere cambiar en tu persona−suspiró con suavidad−. Si piensas arriesgarte por amor, deberías hacerlo, claro qué también hay sus repercusiones, analízalas y detalla que tan buenas son, el egoísmo luego va de la mano con ello.

 −Bien...−fue todo lo que dije.

Claro que iba a ver repercusiones con esto.
Así que debería de hablar antes de comenzar a actuar. Sólo espero que lo entiendan.