Capítulo 31

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Hace unos minutos que salí del trabajo, trabajo en una farmacia, estar aquí me ayuda un poco con lo que es mi carrera, en ciertas cosas, empecé a trabajar hace dos meses y me ha ido muy bien, de verdad me gusta, a veces es un poco intenso porque bueno, estudio en la mañana y trabajo en la tarde hasta la noche a veces, todo depende de los turnos que me toquen.

Me despido de mi compañero y salgo de la farmacia, son las 10:10pm según mi teléfono. Espero por un momento pues Maximiliano me dijo que vendría por mi y así es, veo su auto acercarse y toca la bocina, sonrío y me acerco al auto.

Él baja y se dirige a abrirme la puerta del copiloto, él, su educación y caballerosidad, entro y luego entra él.

_¿Qué tal el trabajo?_ Me pregunta empezando a conducir.

_Muy bien, fueron muchas personas pero estuvo bien, ¿Cómo te fue a ti?_

_No pude ir a los juegos, mi padre me llamó diciéndome que lo ayudara con algunas cosas en la gobernación, lo acompañaré pronto a unas exposiciones que dará de cosas que tiene pensado hacer_

_Me parece interesante

_Lo es, la verdad_

_¿No te aburren esos compromisos?_

Él sonríe.

_Sí, un poco, no te lo voy a negar, pero a mi padre le gusta trabajar de eso, le gusta lo que hace, ayudar y gobernar, por eso lo acompaño y lo ayudo porque él me apoya en lo que a mi me gusta_

_Eso es lindo que puedas tener esa conexión con ellos_

_Sí, ¿Tus padres te apoyan en esta carrera, en lo que te gusta?_ Pregunta.

Me tenso de inmedito.

_Bueno, sí, ellos me apoyan en todo_

_Me alegra, me gustaría algún día conocerlos_

Sonrío con nerviosismo y me dedico a mirar por la ventana. Mentir se ha convertido en una rutina, no es fácil decir lo que son tus padres y lo que te hacían, no es fácil hablar de Alex, no es fácil nada, odio mentirle a Maximiliano pues él ha sido muy transparente conmigo, pero no me gustaría que me viese de una manera diferente, quizás con lástima, no soportaría eso.

_He comprado helado_ Dice señalando la parte de atrás del auto.

Sonrío cuando veo el pote de helado y lo miro...

_Amo el helado_

_Lo sé, preciosa_

Frunzo el ceño y muerdo mi labio inferior, él ha sido tan respetuoso conmigo, no sé, cuando lo veo y hablo con él parece un príncipe sin exagerar, su educación y elegancia, caballerosidad de verdad es sorprendente, no había conocido antes a una persona como él.

Maximiliano a sido un chico que desde la cuna a sido de dinero, sus padres trabajan mucho y tienen buenos trabajos, ahorita es que su padre es gobernador, pero antes igual eran personas adineradas.

La educación que le han implementando es intachable, es cortés, se expresa bien, es serio, se da a respetar, me alegra haber conocido esta parte de él, pues todos dicen que como es hijo del gobernador solo es un hijo de papi forrado de dinero y la verdad no es así.

Llegamos a casa y bajamos del auto, entramos y cierro bien la puerta.

Lanzo mi pequeña cartera en el sofá y me tumbo en éste.

_Estoy cansada_ Me quejo.

Él sale de la cocina con el pote de helado y dos tazas, sirve todo en la mesita frente a nosotros y me entrega luego una taza a mi.

_Gracias_ Digo y le regalo una sonrisa.

_¿Sabes una cosa?_ Pregunta y niego, él sonríe y me mira _Nunca había compartido tanto con una persona_

_¿Por qué no?_

_En realidad nunca he tenido tiempo de divertirme como tal, las veces que me divierto es cuando se hacen fiestas con mis amigos de confianza, cuando hay campeonatos de fútbol o baloncesto en la universidad, de resto mis padres me han hecho estudiar mucho, educarme para representar lo que soy y de dónde vengo, a pesar de que siempre me permitieron asisitir a instituciones académicas, igual tenia una institutriz_

_¿Es en serio?_ Pregunto sorprendida.

_Sí, es en serio, no tenía mucho descanso, mi padre me dice que el aprendizaje te hace ser mejor persona, te abre las puertas donde sea y te ayuda a afrontar los obstaculos y tomar buenas decisiones_

_Es muy cierto eso_ Le digo.

_Nunca me he opuesto, pues mi padre es un excelente hombre, respetado e importante, quiere un bien para mi, me gusta aprender, me gusta lo que soy ahorita y todo se lo debo a mis padres, no me considero el mejor, ni el más inteligente, ni el mejor preparado, pero tengo mucho conocimiento de las cosas, de todo un poco y me siento preparado para cualquier cosa, eso me llena como persona, ademas, sé que aún queda mucho por recorrer_

_¿Sabes una cosa tu?_ Digo sonriendo, él niega _Nunca había platicado con una persona de esta manera, quizás sí de esta manera y de estos temas, pero jamás me habían dicho palabras que de verdad te motiven a algo sin ser directamente para uno, admiro la manera en que tus padres te han educado y han estado contigo, admiro tu forma de pensar y de ver las cosas, pocas personas tienen esa capacidad_

_Lo sé, dentro de esas pocas personas estas tu también_

Yo bufo.

_No comparto eso. No soy una excelente persona, puedo ser muy buena al punto de lastimarme a mi misma para satisfacer a los demas_ Él frunce el ceño _Puedo ser inteligente pero no soy capaz de tomar buenas decisiones, no suelo reaccionar a veces de buena manera, me gusta aprender pero no he aprendido a superar. Trato de ser buena para encajar y no lo hago, suelo ser timida, incapaz, débil y muy comprensiva a veces... Nuestras acciones dicen mucho de nosotros y de verdad me han pasado más cosas de lo que yo he hecho

Él me observa serio, se relame los labios y suelta un suspiro.

_A pesar de todo, eres grande, eres admirable_ Dice sin más y sigue tomando su helado.

Sonrío y niego.

Acabamos nuestros helados y salimos al jardín un rato.

_¿Dónde te gustaría trabajar cuando te gradúes? Ya no falta mucho_ Le pregunto en lo que nos sentamos en un banquillo.

La luna alumbra todo el lugar, por lo tanto no hemos encendido ninguna luz.

_Uno de los proyectos de mi padre será mandar a construir un hospital el cuál me pondrá como dueño, será como un regalo prácticamente, me cuenta que será grande y no faltará nada, será algo que me llene a mi, a él y una gran ayuda para el estado_

_Wow, me parece increíble

_Creelo, trabajaremos juntos_

_¿Cómo?_

_Cuando yo esté trabajando ya en mi hospital, tu podrás hacer las pasantías allí, además te quedarás trabajando

_Me anima mucho tu propuesta_

_Es un hecho, es algo seguro, de verdad_ dice tomándome de la mano.

Se acerca más a mi y me hace mirarlo a los ojos.

_No lo sé, Alisson, te veo y siento unas ganas de querer compartir todo contigo, de querer ser parte de tu vida, de poder tenerte y pertenecerte, de que seamos nosotros dos nada más... Me gustas, no, más que eso, siento que estoy enamorado de ti, que te quiero solo para mi, que en vez de darte un beso en la mejilla, pueda besarte en los labios cuando yo quiera ¿Si comprendes?_ Pregunta acunando mi rostro en sus manos.

Yo asiento y solo lo observo directamente a los ojos.

_Quiero intentar todo contigo, quiero que me quieras, quiero consentirte, quiero ayudarte... Alisson, déjame tenerte_

_Tu... ¿Tu quieres que...

_Quiero que seas mi novia, que estemos juntos, de verdad juntos_

Siento mis ojos cristalizarse, solo puedo pensar en él, en lo feliz que fuese sido si él me hubiese dicho todas éstas palabras, en lo feliz que hubiese sido si pudiera ser su novia... Pero no, él nunca me amó y creo que nunca me quizo y supongo que jamás... Volverá a mi.

No le digo nada, no emito ni una sola palabra, solo lo observo y veo desesperación en su mirada, quizás esté nervioso, solo espera mi respuesta, así que solo se la demustro.

Me acerco a él y poso mis labios en los suyos, él se sorprende un poco pero responde mi beso con mucha dulzura y delicadeza, acuna bien mi rostro en sus manos y profundiza el beso, acaricia mis labios de una manera única.

No tardo en comparar el momento con el de Alex y yo, creo que nunca sabré el por qué Alex me besó, el por qué se despidió de esa manera, con aquel beso que aún anoche me quitaba el sueño.

Es un gran momento el que vivo ahorita y quiero hacerlo representativo en mi vida, quizás olvidar aquel beso con mi gran amor y concentrarme en el maravilloso chico que tengo frente a mi, creo que es justo, tanto para él como para mi.

Dejamos de besarnos y él me abraza con fuerza, sonrío con muestra de afecto y cariño y solo respondo el abrazo de la misma manera.

_No te voy a decepcionar_ Dice casi en un susurro y besa mi coronilla.

Lo sé, sé que no lo hará, pero temo en lastimarlo yo a él.

***

_Amor, quiero que vengas un momento_ me llama Maximiliano desde la cocina.

Yo miro a Sander con pereza y este se burla.

_¿Qué sucede?_ Pregunto levantadome y yendo a la cocina.

_¿Crees que necesita más sal?_ Pregunta dándome a probar de una receta que hace.

_No, así está muy bien_ Digo relamiendo mis labios.

_Entonces, está listo_ Dice dándome un beso y luego apaga la cocinan.

Suena su teléfono y lo saca de su bolsillo.

_¿Bueno?... Sí... Estoy en casa de Alisson... ¿Justo ahorita?... Vale, en seguida voy_ Cuelga la llamada y me mira haciendo mohín.

_Mi padre me necesita, voy y vengo, no tardaré mucho, me esperas para comer juntos ¿Si?_ Dice dándome mucho besos en la cara.

Yo río.

_Sí, está bien, ve tranquilo_ Le digo y le doy un dulce beso en los labios.

Él sonríe y sale de la cocina, escucho como se despide de Sander y luego la puerta principal se cierra.

Suelto una exhalación y salgo de la cocina apoyándome en el Marco de la puerta.

Sander me observa y frunce el ceño.

_¿Qué pasa, estrellita?_ Pregunta y me hace una seña de que me siente junto a él.

_Es extraño, me siento extraña a veces con Maximiliano_ Le digo y me siento.

_Vienes diciendo eso desde que comenzaron a ser novios, baby ya tienen 7 meses en una relación, creo que es hora de que te vayas adaptando_ Dice un tanto serio.

Yo bufo.

_Lo sé, es que lo tomo en serio, pero es extraño cuando pienso en... En...

_¿En Alexander?_ Pregunta frunciendo el ceño.

_Sí, en él, me gusta estar con Maximiliano pero no se por qué me viene a la mente siempre Alex_

_¿Aún esperas por él?_

_Supongo que sí, odio sentir esto por él, no quiero sentirlo más_ Digo y mis lágrimas empiezan a salir.

_Te lo dije una vez, siempre vas a esperar por él y ese será tu castigo, amarlo_

_Antes me parecia bien amarlo en secreto, ahorita no lo es, arruina mi estabilidad_

_Bueno, tienes que esforzarte más, tampoco es que me guste mucho que estés con Maximiliano aunque sé que es un gran chico para ti, pero es mejor a que estés desviviendote por Alex_

_Siento que el tiempo a pasado muy rápido y no se ha llevado nada con él_

_¿Quieres a Maximiliano?_ Prefunta mkrandome.

_Sí, lo quiero, lo quiero mucho_

_Podrás acostumbrarte a ello, solo dale tiempo al tiempo

_Extraño a Melany_ Digo limpiando mis lágrimas.

Él rueda los ojos, Melany se fue hace más de un par de meses a terminar su carrera universitaria y hablamos pocas veces por wed cam por la falta de tiempo.

_¿Cuándo le contarás la verdad a Maximiliano, creo que tiene derecho a saberla Dice

_No lo sé, no quiero contarle_

_Debes hacerlo

Muerdo mi labio inferior y miro a Sander.

_¿No sabes nada de él de verdad? Siento que debes de saber algo, tienes comunicación con personas que odian a Alex_

Él me mira y resopla.

_¿Quieres la verdad? Bien_ Dice y se acomoda en su puesto _Todos los días me entero de cosas de Alex, todos los días_

_¿Y por qué no me dices nada?_ Pregunto molesta.

_No es sano para ti, no es bien que sepas de él estando como estás, no mereces eso_

_¿Él está bien?_

_Aparentemente sí y muy bien_

_¿Él... Está en esos malos pasos?_

Sander se pasa la mano por el cabello y resopla.

_No, Alex cambió ese tipo de vida, él está bien_

_¿A qué se dedica ahora?_ Pregunto ansiada.

_Basta, solo está bien y ya, es un multimillonario, solo eso, de él hablan muchos periódicos, en la noticia lo tienen como uno de los millonarios más jóvenes_

_¿Hay noticias sobre él?_ Pregunto frunciendo el ceño.

_Alisson, tu no ves noticias, ni redes sociales, ni titulares, ni periódicos, revistas, nada_

Aún no lo ceo.

_Mientes_ Le hago saber.

_Buscarlo en google, estrellita, es un hombre importante ahora_

Siento las emociones revueltas, ¿Cómo es posible?

_Lo que sé es que aquí no hablan mucho de él, la última vez su padre tuvo problemas en este país y tuvo que irse, Alex es más sonado en otros, pero como es de aquí, lo relacionan

_No puedo creerlo, en serio_

_A hecho cosas buenas, en serio, pero lo sigo odiando_ Dice.

_¿Por qué?_

_Por lo que siempre ha sido, es mi hermano, Alisson, en algún momento lo llegué a querer como uno, pero estoy consiente que nuestras acciones nos llevaron a ser enemigos. Y lo odio más por haberte dejado acá, está bien, al principio entiendo sus razones, era peligroso, ¿Pero y ahora? Él está bien, ya no corre peligro según me dicen, se alejó de todo esos caminos de su padre, ¿Por qué no ha venido? ¿Por qué no te habla?_

Mis lágrimas salen una tras otras.

_Porque nunca me quiso como decía que lo hacía_

_Quizás, no lo se, se preocupaba mucho por ti_

_Tu lo has dicho, se preocupaba, tiempo pasado_

_Ay estrellita_ Dice soltando un suspiro _Me tengo que ir, mi padre me envió a hacer unos negocios, queda a la otra punta de la ciudad_

_¿Negocios de qué?_ Pregunto.

_Es mejor que ni sepas_ Responde, me da un beso en la coronilla y se va.

Inmediatamente busco la laptop que me ha dejado Alex y busco su nombre en google.

<Alexander Watson>
-
Magnate, millonario de 20 años dueño de una reconocida marca de auto y hombre de negocios, ha realizado distintos proyectos que han ayudado a millones de personas, como la construcción de edificios para ayuda humanitaria, para aquellas personas necesitadas y es fiel donante de recursos y dinero a quellas campañas de recaudación de fondos para paises en crisis. Próximamente se encontrará elaborando hoteles que para últimos de este año aspira estén terminados para huéspedes de cualquier clase social. A pesar de que Watson no da declaraciones de su vida privada, sabemos que su dinero no era del todo por su buen trabajo, siendo hijo del narcotraficante que intimidó por años al gobierno de distintos países, todo se puede esperar, el poder que le concilio su padre lo ha invertido de buena manera y ha asegurado su futuro con la nueva marca de autos último modelo que ha sacado a flote, ha dado mucho de qué hablar y ha sido visto de manera comprometedora con artistas reconocidas en el espectáculo.

Leo y releo las páginas que hablan acerca de Alex, veo sus fotos y ya no parece el chico que se despidió aquella vez de mi, es un hombre, prácticamente es un hombre, 20 años, un magnate, ¿Quién lo diría?

Me contenta el hecho de que se que está muy bien y no siguió los pasos de su padre, ha hecho cosas buenas y eso lo admiro, pero ¿Y yo?

Cierro la laptop y me recuesto al sofá, yo ya no existo para Alexander Watson.

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