Siempre serás tú.

Capítulo 38

_Gracias por todo, Miguel_ Le agradezco a mi compañero de trabajo.

_No pasa nada, Aliss_ Me dice con una bonita sonrisa _Necesitas descansar, trabajaste toda la noche_

_Sí, me tocaba ese turno igual_

_Solo ve a descansar, mañana nos veremos_

Le sonrío y me despido de él.

Anoche me tocó trabajar toda la noche en la farmacia, normalmente no me toca este turno, pero mi otra compañera está enferma y me ha tocado, me correspondía parte de la mañana pero Miguel se ha apiedado de mi y me ha rescatado esta mañana.

Cruzo la calle con flojera, pues no duermo desde ayer y el cansancio que siento es horrible, llego a la parada de autobús y espero el indicado, siento que en cualquier momento me quedaré dormida, además, tengo un horrible dolor de cabeza.

A los minutos veo que viene mi autobus y lo detengo, entro en éste y pago al conductor, me siento y lucho para no dormirme y hacer el ridículo, así que busco mi teléfono y veo que tiene algunos mensajes y llamadas perdidas, creo que soy la persona mas desactualizada del mundo, realmente la tecnología no es lo mío.

Veo que son mensajes de Sander y Melany, y me extraña ver uno de Alex, es de hace muchos días atrás ¿Por qué nunca estoy pendiente de mi teléfono?, me dice que quiere hablar conmigo, que estará esperándome en el restaurante que está fuera de la universidad, Dios, no vi éste mensaje y se quedaría esperándome.

A la mierda, días después lo vi en aquél restaurante con la tal Laura, su prometida, luego anunció el compromiso como algo oficial.

Siento una punsaba en el pecho al recordar todo, él no es el mismo, él no es mi Alex.

Bajo del autobús cuando llego a la urbanización donde queda mi nuevo departamento y me dirijo a éste, frunzo el ceño cuando veo un auto negro afuera.

Trago grueso, estoy segura que es Alex, ¿Quién más podría ser?

Paso por delante del auto casi ignorandolo y en lo que me acerco a la puerta  del departamento, escucho la puerta del auto abrirse y por acto reflejo, volteo.

Lo veo de pies vestido de traje mirando con cierta extrañeza, todo entre él y yo se ha vuelto extraño, parecemos dos desconocidos.

_Buenos días, Alisson_ Me saluda.

_¿Qué quieres?_ Le pregunto ignorando su saludo.

_¿Podemos hablar un momento?_

_Ya estás aquí_ Digo obvia.

_¿Podemos entrar?_ Pregunta.

_Lo que tengas que decirme me lo dices aquí y rápido, no quiero que entres a mi casa_ Le respondo.

_No me hables de esa manera_ Me pide _Me imagino las razones por la cuál tú comportamiento conmigo_

Frunzo el ceño.

_Mira Alexander, he tenido una noche bastante larga, estoy muy cansada, tengo sueño, un insistente dolor de cabeza, quiero dormir y descansar, lo que menos esperaba era encontrarte aquí, así que si me quieres decir algo te lo pido por segunda vez, que sea rápido, verte no es muy agradable_ Le digo firme.

_¿Por qué? ¿Por qué estás siendo tan dura conmigo cuando no he hecho nada para lastimarte? ¿Por qué estás tan odiosa y tratándome de esa manera? ¿Merezco que me trates así? Explícame, porque no he hecho más que cuidarte todo este tiempo, que estés bien y nada te involucre con lo que hice en algún momento, he querido siempre lo mejor para ti, parecias entenderlo, ¿Ahora qué es lo que pasa? He estado buscándote como un estupido y de verdad me estoy hartando de este sin sentido, ¿Qué es lo que te pasa?_ Habla acercandose un poco a mi, su aspecto es de pura molestia y su tono de voz no es la excepción.

_Tengo mis razones por las cuales estar así, ahora vete_ Le digo dándome la vuelta y metiendo la llave en la cerradura de la puerta.

Me coge del brazo y me hace voltearme con delicadeza, siento de todo al estar tan cerca de él y sentir su tacto en mi piel.

_Quiero saberlas y no me voy a ir de aquí hasta que me las digas, Alisson, ya basta de todo este desastre, quiero que me hables claro_

Maldita sea, como si fuera tan fácil que todo lo que está pasando es porque lo amo y lo odio al mismo tiempo.

Sus ojos me observa con desesperación y quisiera sólo poder hacer eso, mirarlo, perderme en aquellos ojos que por mucho tiempo fueron mi consuelo, mi paraíso, mi salvación.

_Estás muy cambiado, entiendo todo lo que te ha tocado pasar_ Digo casi en un susurro _Te he esperado por tanto tiempo aún sin saber si te iba a volver a ver o no, siempre esperé aquél chico fiestero, reservado, fuerte, dulce y egocéntrico, siempre esperé a mi mejor amigo_ Miento, siempre esperé algo más _Pero ahora que estás aquí a pesar de lo orgullosa que estoy por tus grandes logros, no dejo de sentirme decepcionada, porque no eres ese chico que estuve esperando, no eres aquél mejor amigo que un día se marchó sin explicarme nada, ahora eres un hombre por así decirlo, con tantas cosas por hacer, eres un hombre que toma sus propias decisiones, está claro que ahorita te riges por tus mismas órdenes y pensamientos, ya no tienes a tu padre que era quién te decía cosas, ahora todo lo haces por ti. Ya no hay la misma confianza entre nosotros, tu te vas a... Casar... Serás un hombre de familia, yo ya no tendré cavidad en tu vida, Alex, es una perdida de tiempo el que estés aquí hoy conmigo, he tratado de alejarme de ti porque se que yo en tu vida no soy nadie ya, ya no juego ningún papel y aunque tengo cosas que agradecerte por el bien tuyo y el mío lo mejor es que esto se quede como un bonito recuerdo de lo que fuimos algún día, de la hermosa amistad que pudimos tener... Ya no somos esos chicos, las experiencias nos han hecho cambiar, tu necesitas vivir tu vida, tu compromiso... Sé feliz con esa chica, aunque no la conozca y me sorprende la idea de que vas a casarte porque nunca me dijiste ni parecía que fueses un hombre de compromiso, espero que ella sepa cuidarte y valorarte, que sepa el gran hombre que eres... Alex yo...

_¡No!_ Exclama _No, Alisson, calla, no digas más, no quiero oír nada más de eso... Las cosas tienen una explicación, Laura, ella... Dios, Aliss, no quiero alejarme de ti, no quiero perderte, sé que no soy el mismo, pero mis sentimientos siguen siendo iguales, lo que siento por ti, mi confianza hacía ti, las ganas de querer vivir a lo loco contigo como solíamos vivir, aún crecen dentro de mi. No quiero perderte y aunque quieras alejarte de mi, no lo voy a aceptar porque sé que desde muy dentro de ti tu no quieres alejarte de mi, tu me quieres como yo te quiero y lo único que quieres es hablar bien conmigo, es pasar un tiempo conmigo, es revivir cada momento a mi lado, lo sé Alisson, lo sé porque es lo mismo que yo quiero, así que no me voy a ir de aquí, voy a entrar a tu casa y vamos a pasar el día juntos te guste o no, porque tu eres mi mejor amiga, porque eres mi pequeña, porque eres aquella chica que desde que era una niña me ha traído loco y me ha hecho quererla hasta más no poder, maldición, olvidate de lo que haz visto de mi, de lo que sabes, de lo que te han dicho, soy yo, Alexander, aquél idiota que te hacía pasar dolores de cabeza, sigo siento el mismo muy dentro de mi y solo contigo puedo serlo, no me apartes de tu vida Alisson Moort porque con más insistencia apareceré en ella, sin más qué decir, puedes abrir la puerta, aquí afuera hace frío_

Lo miro con sorpresa, cada palabra me ha dejado en shock, realmente perpleja, trago grueso y me doy la vuelta para abrir la puerta completamente, puedo sentir su respiración en mi cuello y eso solo hace que mis nervios crezcan más.

Abro la puerta y me adentro al departamento, él pasa sin decir nada y doy una vista a la afuera de la urbanización, al menos nadie estaba por ahí y no vio ni escuchó mi escena con Alex, veo el chofer de éste recostado en el auto y termino de cerrar la puerta.

Resoplo y siento mis ojos pesados, me doy la vuelta y dejo mi suéter en la mesita junto con mis llaves.

Alex observa mi departamento con cierta diversión en su rostro...

_Sigues teniendo los mismo gustos_ Me hace saber y sonríe.

_No he cambiado mucho, la verdad_ Digo encogiéndome de hombros.

Él me mira.

_Y así eres perfecta_

Trago grueso y siento mis mejillas calentarse, sus ojos me miran como haciéndome una radiografía y me siento realmente muy nerviosa.

_Es mentira, Alisson_ Me dice y no logro comprender.

_¿Qué es mentira?_ Pregunto.

_Mi compromiso con Laura Dupé, es mentira_ Responde.

Mi corazón siento como florece por aquellas palabras y no tardo en sentir tranquilidad.

Deja lo tonta, Alisson, no te dejes llevar.

_¿Cómo qué es mentira? No entiendo_

Él suelta un suspiro pesado y sonríe pequeñamente.

_Alisson, supongo que tú y yo debemos de tener una extensa charla de mejores amigos, ¿Tienes palomitas de maíz? No vendrían mal para la caótica corta historia que te quiero contar_ Dice y no puedo evitar reírme.

Este sin duda si es mi Alex.

_¿Es en serio?_ Pregunto aún riendo.

_Necesito sentirme normal_

Mi sonrisa se esfuma.

_Solo contigo puedo ser yo mismo y desde que llegué y logré verte de nuevo fue que empecé a sentir tranquilidad, una pequeña tranquilidad que se había esfumado cuando me marché y te dejé aquí, todo ha sido un desorden mental horrible, te he necesitado muchas veces para que me hicieras salir de ese hueco en el que me encontraba, ¿Sabes? Ahora siento que mis problemas son mas grandes_

Me acerco a él a paso acelerado y lo abrazo con fuerza, éste no tarda en rodearme con sus enormes brazos y esconde su rostro en el hueco de mi cuello.

_Todo estará bien, yo te voy a escuchar ¿Sí?_ Digo alejándome un poco de él y acunando su rostro en mis pequeñas manos, nos miramos fijamente a los ojos _No prometo darte una solución a todo, pero estaré aquí todo el resto del día y los demás días si es posible, te escucharé y te acompañaré, seré tu consuelo si eso quieres, tu pañuelo de lágrimas si es que quieres llorar, veremos películas en este sofá que he robado de tu casa y comeremos palomitas y comida italiana hasta que tengamos ganas de vomitar, pero te aseguro que este día seremos solo tu y yo, yo te lo prometo, ¿Tú me lo prometes?_ Pregunto perdiéndome en su mirada.

_Te lo prometo_ responde con una sonrisa.

_Bien, iré a preparar las palomitas, tu pide la comida italiana para almorzar mas tarde, si la pides a hora pico, esperaremos demasiado_ Digo y me alejo de él.

Éste me toma de la mano y me hala de nuevo apretándome a su pecho, volviendo a profundizarme en un caluroso abrazos.

_Eres única, Alisson, no puedo imaginarme una vida sin ti_ Dice en un susurro en mi oído.

_Sí, sí_ Digo alejándome, porque siento que si me quedo más tiempo a su lado, mis sentimientos empezarán a salirse como emojis alrededor de mi _Soy la mejor, lo sé_

Éste suelta una carcajada y me suelta completamente, así que entro a la cocina a hacer las palomitas.

Siento mis nervios de punta, él está aquí, él vino a arreglar las cosas conmigo, eso quiere decir que aún le importo, que aún confía en mi, espero no esté fingiendo.

Mientras preparo las palomitas, escucho la voz de Alex...

_Sí, solo déjalos en mi escritorio, luego los veré... Después me comunico con él... Por favor, cancela todos mis compromisos de hoy, estaré ocupado en algunas cuestiones personales... No, no te preocupes, hasta mañana_

Me atrae la manera en las que se expresa Alex, es nuevo, es decir, su voz es mucho más madura, adulta, aunque siempre tuvo la voz gruesa y varonil, muy sexy, pero ahorita tiene un acento por así decirlo que le hace tener superioridad a como era antes.

_Buenos días, para hacer un pedido... La especialidad de la casa... Sí, con todo... A eso de las 11:30am estaría bien... Muchas gracias_ Acaba de pedir la comida italiana.

Echo todas las palomitas en un recipiente y salgo de la pequeña cocina, lo veo de espalda y admiro un poco su ancha espalda, lo grueso de sus brazos y lo apuesto que se ve.

_Listo, aquí están las palomitas Digo y éste voltea.

Me sonríe de apoco.

_¿Te molestaría si esperas unos cortos minutos a que me dé un baño y vuelva? Estoy cansada y me gustaría relajarme un poco_

_¿Sabes? ¿Estás segura de querer hablar? Porque es cierto que debes descansar, puedo venir mañana o más tarde, si tu quieres_

Él canceló todo sus compromisos por hablar conmigo.

_Estoy bien, solo necesito darme un baño_ Digo entregándole el recipiente.

_Bueno, entonces ve, yo te esperaré acá_

Le sonrío y subo las pequeñas escaleras para llegar a mi habitación, me desvisto y entro al baño, me ducho por unos 15 minutos y salgo con la toalla enrollada en mi cuerpo, saco la ropa que me colocaré, unas leggins y un suéter blanco, me pongo la ropa interior y luego la ropa.

Me peino el cabello dejándolo suelto y me coloco unas medias, pues hace un poco de frío, me aplico perfume porque... Porque sí y salgo de la habitación.

Bajo las escaleras y veo a Alex sentado en el sofá.

_Pensé que jamás te vería en ese sofá otra vez_ Digo llegando hasta él y sentándome a su lado.

Éste sonríe.

_Supongo entonces que es una de tus imágenes favoritas de mi_

Dios, es una de ellas.

_No, la verdad no_ Miento.

Éste niega con la cabeza y se torna serio, me mira y me agarra de la mano.

_Dime, ¿Qué es lo que sucede, Alex?_ Le pregunto.

Éste suelta una exhalación y entrelaza sus dedos con los míos, se siente tan bien.

_He sido amenazado_ Habla, presiono su mano para que tenga el apoyo de continuar, siento mi corazón latir muy rápido con solo eso que me ha dicho _Ernesto Dupe me ha amenazado_

_¿Es el padre de tu prometida?_ Pregunto.

Él me mira mal y me encojo de hombros.

_Sí, él es el padre de Laura, mi padre tuvo cierta amistad con ese hombre, así que hicieron como un contrato donde estipulaba que cuando tuviéramos la edad suficiente, Laura y yo nos casariamos para así unir ambos poderes y hacernos más poderosos económicamente, hace unos meses antes de venir aquí, Ernesto me lo hizo saber, me negué totalmente a pesar de que el contrato parece real, tiene la firma de mi padre, pero rechacé todo lo relacionado con ello. Cuando llegué aquí y me reuní con el gobernador, Ernesto Dupe me encaró nuevamente diciéndome que si no me casaba con su hija él se iba a encargar de hacerle saber a todos sobre los negocios que tengo en los juegos, además de hacer saber que el dueño de dicho lugar, soy yo_

Pongo mis ojos como platos.

_¿Que las personas se enteren de los juegos qué consecuencias te acarrea a ti?_ Le pregunto.

_Si ese lugar sale a la luz, todos pensarán que soy igual a mi padre, que manejo los mismos negocios de mi padre y que soy un criminal como lo era él, cosa que no es así, yo puedo ser el dueño, pero eso es un negocio independiente, cada quién hace lo suyo, si los demás se enteran, entonces nadie querrá hacer negocios conmigo, trabajar conmigo porque no confiarán_

_¿Entonces?_

_No puedo permitir que ese hombre me divulgue como quiere, así que acepté casarme con Laura, una mujer de la cuál conozco solo el nombre y el apellido, de resto más nada_

_¿Por qué no simplemente olvidas los juegos de una vez? Vende ese lugar o destruyelo, nunca me ha gustado y siempre lo vi como algo malo para tu vida, ahora mira como te tienen amenazado_ Digo con rabia.

_No voy a dejar los juegos, no vendere ese lugar, me gusta, puedo ser yo mismo allí, cuando quiero salir de todo este protocolo de lo que es ser un millonario con mil cosas por hacer, suelo ir allá y ser algo diferente a un magnate, ser diferente, ser lo que era y dejé de ser_

_Puedes ser tu mismo de otras maneras, Alex_ Digo tomando sus dos manos y haciendo que me mire _Eres muchisimo más que ese lugar, tu no eres como eso, por favor, te vas a casar, ¿Eres capaz de pasar el resto de tu vida con esa mujer a querer vender ese maldito lugar?_

Él aparta sus manos de mi y se levanta del sofa.

_Es lo que voy hacer, no me queda de otra_

_No puedo creer lo que estás diciendo_ Digo poniéndome de pies _Es un lugar peligroso, es un lugar que... Se trata de ti, ¿Te vas a casar con esa mujer entonces?_ Pregunto.

_Sí, aunque no sienta ni una pizca de cariño ni quiera verla, lo haré, es un lugar que construí por medio de mi dinero, mi esfuerzo, fue lo primero que hice, no lo dejaré así de fácil_

Dios, eso está mal.

Mientras está de espaldas hacía mi, pienso en algo para poder ayudarlo, tiene que olvidarse de ese lugar, tiene que desaparecer ese lugar de su vida, no voy a permitir que se case, no, me niego a eso. Ya se lo que tengo que hacer.

_Es tu decisión_ Digo con simpleza.

Este se voltea y me mira extrañado.

_¿No dirás más nada?_ Preguta.

_No, es tu decisión_ Digo acercándome a él _Si quieres hacerlo así, hazlo... Yo podria ser la madrina de boda, solo dímelo_ Le hago un guiño.

Me mira perplejo y me siento nuevamente en el sofá, agarro las palomitas y empiezo a comer.

_¿No vas a comer?_ Pregunto.

Me observa y luego se acerca a mi.

_¿Y qué? ¿En todo este tiempo como te ha ido en el amor?_ Le pregunto y él se sienta junto a mi.

Bufa y empieza a comer palomitas.

_El amor no se me da, lo sabes_ Dice y siento una punzada en el pecho.

_Que triste, el amor es muy bonito_

_Tu porque te va muy bien con Maximiliano_ Dice con cierta rabia.

Yo no digo nada.

_¿No has tenido ninguna chica entonces?_

_He estado con muchas chicas_ Responde _Chicas que no llegue a ver ni dos veces_

Trago grueso.

_Lo tuyo solo es sexo_ Le espeto molesta.

_No me queda de otra_ Ríe.

_Quisiera que algún día te enamoraras_ Le digo y éste me mira

Aunque no sea de mi.

_Para que te des cuenta que amar es muy bonito_

_Tu cabello es muy bonito_ Me dice y empieza a tocarlo.

Yo lo miro entrecerrando los ojos.

_Oh vamos, te estoy hablando en serio_ Le digo dándole un pequeño empujón.

_Yo también te hablo en serio, pequeña, siempre me ha gustado tu cabello, van a la perfección con tu rostro, tus hermosas mejillas y esos ojos... Dios, esos ojos son lo mejor, debería ser un delito verlos_ Dice mirándome fijamente.

No puede ser, no me puedo resistir, es tan... Perfecto.

_Adoro verte sonrojar_ Sonríe.

_No estoy sonrojada_ Me quejo.

_Lo estás_

_Claro que no_ Digo cubriéndome con las manos.

_No_ Dice quitando mis manos de mi rostro _No me prives de verte_

_Dijiste que tenía que ser delito_

_Sí, para los demás, yo puedo cometer este delito, una y otra vez y seguiría cometiendolo_ Suelta un suspiro y agarra mi mano posando un beso en ella.

Dios, ¿Por qué me castigas de esta manera?

_Bueno, ¿Vemos una película?_ Pregunto y él sonríe.

_Está bien_

_Vayamos a mi habitación_ Le digo levantándome.

_¿Sabías que muchos de los que van a ver películas nunca terminan de verla?_ Dice poniéndose de pies también.

_¡Pervertido!_ Le grito y éste se carcajea.

Subimos a mi habitación y éste se quita el saco y lo coloca en la peinadora, se sienta en la cama y busco qué película colocar...

_¿Vemos buscando a Doris?_ Le pregunto.

_Alisson, ¿Es en serio?_ Pregunta.

Yo volteo apenada.

_Tengo solo de esas, es muy bonita, podríamos ver la bella y la vestia, es hermosa_

Él me mira sin expresion.

_Que infantil_ Me dice.

_No me jodas, saldrás siendo un niño de aquí_ Le digo y coloco Coco y apago la luz.

Él resopla y me tumbo en la cama, éste se acuesta luego de quitarse los zapatos, sentimos cierta incomodidad, pero decido romperla cuando me acerco a él y me acuesto en su brazo, muy cerca de su pecho, aunque tampoco quiero llegar allí.

Siento como se sorprende pero de igual manera no se queja, como que agradezco, sería muy vergonzoso, aunque de esta amnera siempre veíamos peliculas él y yo y de otras maneras muy penosas.

La película comienza pero siento su mirada en mi, giro mi rostro hasta mirarlo y mis nervios crecen a millón.

_¿Por qué cuando te marchaste me besaste?_ Le pregunto casi en un susurro.

Él me mira con mucha atención.

_Quería hacerlo_ Responde.

_¿Pero por quee?_

_Porque me atraía la idea de cómo lo hacías, de cómo besabas, quería sentirlo porque no estaba seguro si te volvería a ver_

Trago grueso y siento su mano en mi cintura, me voltea pegándome más a él.

_De todos los demas, yo tengo mucho más derecho sobre ti, ¿Sabías?_ Me dice.

Yo niego.

_Pues enterate, y si yo quiero besarte de nuevo, lo hago, no me importa si tienes novio, las cosas entre tu y yo son distintas y como te dije, si yo quiero besarte, lo hago_

Quiero protestar pero simplemente las palabras no me salen y es que me gusta como me habla aunque no debería de ser así.

_¿Tienes algún problema con eso?_ Pregunta muy cerca de mi.

Yo niego.

_Perfecto, porque justo ahorita quiero besarte_

Mi corazón late rápidamente, siento que se detendrá y moriré justo aquí, delante de él.

_Te reto_ Le digo.

Éste se relame los labios y sonríe.

_No tenías que hacerlo_ Dice y lo hace.

Joder, me besa.