Llegando a Gusu

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Nota del autor: Al fin llegaron a Gusu, me extendí tanto en los capítulos anteriores que creí que jamás llegarían, si bien no esta del todo arreglado LanXichen le está poniendo ganas para que su matrimonio funcione. Disfruten el capítulo.



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HuaiSang se encontraba muy silencioso; después de aquel emotivo momento que tuve en el salón ancestral de los Jin, busque a mi prometido pues quería llegar a GusuLan antes del toque de queda y de ser posible, con el tiempo suficiente para hablar con Shufu y con WangJi; lo encontré en la habitación de invitados que estaba ocupando y por primera vez me siguió sin decir una sola palabra. Agradecimos a Jin Ling las atenciones que tuvo para con nosotros durante nuestra estancia y partimos de Torre Koi.


Durante el vuelo, HuaiSang no se recargó en mí como se había hecho costumbre, en cambio no despegó su vista del frente y permaneció en silencio. Bajamos en ciudad Caiyi para almorzar, sabía que HuaiSang se enfrentaría a la difícil dieta de GusuLan y si bien no quería mal acostumbrarlo, no estaba en contra de hacer algunas comidas fuera de la secta. Llegamos a la posada donde nos recibieron rápidamente y nos asignaron un lugar fresco, cómodo y sobre todo discreto. HuaiSang pidió platillos que ni siquiera se detuvo a considerar y no pidió nada de licor. Pensaba una y otra vez que era lo que había ocurrido y el hecho de que quisiera renunciar al matrimonio me causaba sentimientos encontrados. Un par de veces traté de entablar conversación con él de manera inútil, de momento me rendí en mi cometido y comenzamos a subir el camino hacia la puerta principal del Receso de las Nubes.


Como había predicho tanto WangJi como el maestro Wei nos estaban esperando en la entrada, mi cuñado nos saludó efusivamente y supe que WangJi también estaba feliz de tenernos de regreso. Ambos nos dirigimos hacia el salón de las orquídeas a darle nuestros saludos a Shufu, no fue una conversación larga y nos retiramos pronto del lugar.


- HuaiSang – caminábamos por los pasillos de madera para llegar a uno de los patios adyacentes – te quedarás en una de las habitaciones de invitados ¿necesitas algo?

- Nada, gracias.


Su mutismo continuaba molestándome, pero como tampoco sabía la razón y tontamente creí que solamente estaba cansado. Lo dejé en el cuarto y me dispuse a buscar a mi hermano. Imaginé que podría estar junto a los conejos o bien en el campo de entrenamiento, no tuve suerte con aquellos animalitos esponjosos así que fui al campo de tiro; nada más llegar mi rostro se sonrojó, el maestro Wei se frotaba descaradamente contra el cuerpo de WangJi mientras este le "ayudaba" a acomodar el arco de práctica, mi pobre hermano tenía el borde de las orejas bastante coloradas y traté de ayudarlo a salir de su miseria.


Me acerqué a paso rápido tratando de hacer el mayor ruido posible sin romper las reglas, WangJi tomó una distancia prudente del cuerpo de su pareja y un suspiro fastidiado de mi cuñado fue su respuesta.


- Lamento arruinar tu diversión maestro Wei, y aunque tu carta fue de mucha ayuda y me gustaría platicar más a fondo con ustedes – su rostro se ilumino de manera traviesa y supe que no me gustaría lo que saldría de sus labios.

- Zewu-Jun – se tocó el pecho con una falsa modestia que a nadie convencería - ¿Quieres que te platiqué como me castigó HanGuang-Jun? ¿ya necesitas ideas para castigar a HuaiSang?

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