Cartas Al Amor De Mi Vida (Jori)

Capítulo Dieciocho: Aclaración Parte 2

POV Jade

Poco despúes de despertar y llegar a mi habitación, decidí escribir una carta más para Vega, poco antes de empezar a hacerlo, comencé a hojear todo el pequeño y plateado cuaderno en el estaban las pocas pero sinceras cartas que había escrito para Vega pero entonces me topé con algo que yo se que antes no estaba ahí, una carta de Cat para mí:

"Querida Jadey:
Se que nunca hago estas cosas, quiero que me comprendas, te adoro, por eso lo hice.
Mereces ser felíz, ella también.

¿Cuidarás de ella?
"Con mi vida", se tu respuesta te conozco mejor que nadie.

Ser felíz es simple, Jadey no lo compliques, le quieres, te quiere, ¿acaso eso no es suficiente?."

Muchos pensamientos pasaban por mi mente después de leer aquello, ¿Como Cat sabía de mis sentimientos por Vega? ¿Había leído mi cuaderno? ¡Satanás, que vergüenza! ¿Tori sabrá al respecto?. Entre todas esas preguntas algo era claro "te quiere", Cat decía que Tori me quería, ¿era esa mi señal?, la señal por la que tanto había pedido, estaba justo frente a mis ojos y entre mis manos, Cat no me mentiría, no a mí.

Decidí ir tomar una ducha hoy todo sería diferente, haré todo bien con ella hoy. Cuando ya había terminado de tomar mi ducha e iba por medio pasillo, alguien chocó contra mi, era Vega. Despúes de ayudarle a levantarse, le agradecí besando su frente para mí ese es uno de los besos más significativos que puedes darle a alguien pero le estaba demasiado agradecida por haber cuidado de mí ayer. Seguí mi camino hacía mi habitación debía aclarar un poco mis pensamientos, hoy debía ser diferente, hoy debía ser valiente, después de organizar algunas cosas en mi habitación en un fallido intento de calmar mis nervios, decidí dar sola un pequeño paseo por la playa.

Después de caminar un rato marqué aquel número que conocía tan bien, un tono, dos tonos y prontamente su voz ronca se hizo escuchar, antes esa voz me hacía temblar pero ahora me hacía sentir fatal, algo era claro debía ser valiente y realista yo no merecía esto, no era él o era yo, éramos los dos, juntos no funcionabamos como alguna vez creímos que lo haríamos.
-Beck , necesito hablar contigo y debe ser ya.- pronuncie nerviosa pero traté de que no se notará. Un par de movimientos se escucharon antes de poder escuchar una respuesta, supuse que estaba cambiándose de lugar.
-Jade ¿Pasa algo?.- <<¡Claro que pasa algo, lo sabes, lo sé!>>.- gritaba en mis adentros.
-Beck escúchame por favor, quiero que me escuches atentamente.- dije con la poca valentía que tenía dentro de mí.
-Claro Jade ¿que pasa?.- preguntó él pacíficamente.
-Beck has sido lo mejor de mi vida, en su momento me hiciste tan felíz y me hiciste sentir tan amada, realmente llegué a pensar que serías el único, no necesitaba a nadie más, solo a ti.
Nadie podía hacerme sentir lo que tú me hacías sentir, un hermoso sentimiento, eso creía, incluso creía que te amaba, pero realmente no, no te amo y quizás nunca lo hice, ¿te quería? Si claro, como loca pero hasta ahí, siempre fuiste un mejor amigo para mí, apesar de ser novios eso siempre se mantuvo y quizá debió quedarse así, debimos solo ser amigos.- Su respiración me indicaba que él seguía ahí pero no decía nada.
-Ya no quiero fingir que te amo, no quiero ser infeliz y creer que eres el novio perfecto cuando se perfectamente que no es así, quiero ser libre y felíz nuevamente, ya no quiero estar contigo Beck.
-Pero Jade.- pronunció finalmente.- No puedes dejarme así como así, ¡no he hecho nada para que me trates así!, Estoy tratando de ser un buen novio...- dijo como si nada y entonces entendí que estaba haciendo lo correcto.
-Robbie llamó a Cat, Ella se dió cuenta de lo que pasaba y me lo contó todo, yo sé que ese "campamento sin chicas" es una gran mentira, no necesito esto Beck, me impides ser felíz y no lo sabía, ya no somos novios y así es mejor.- deje salir el aire que estaba conteniendo y no sabía, Beck quedó en silencio, solo podía escuchar su respiración, colgó poco después. Quizá debí de haber hecho esto hace mucho tiempo, me sentía realmente liberada y apenas era como medio día. Me senté en la arena a la orilla del mar sintiendo como este mojaba mis pies y parecía que se llevase con el, todo lo que estaba mal. Así estuve un rato hasta que alguien se sentó a la par mía y me abrazó.
-¿Estás bien Jadey?.- pronunció la pequeña gatita pelirroja contra mi pecho.
- Terminé con él.- dije suavemente con una pequeña sonrisa en el rostro, Cat se levantó rápidamente y me quedó viendo como si tuviese un mono en la cara.
- Tú... Tú.- decía sin poder terminar su oración.
-Si Cat y debo agradecerte, esa carta que escribiste me ayudó a abrir los ojos, yo no amaba a Beck y ya no lo quería como antes pero quiero a Vega, quiero hacer las cosas bien con ella.- dije un poco apenada con la mirada perdida en el cristalino mar.
-Jadey esta es la prueba más grande que pudiste darme de que de verdad te importa la hermana de mi casi novia, tú nunca dejabas a Beck por el miedo, y hoy lo has hecho.- se acercó a abrazarme y solo podía pensar que era cierto, siempre tuve miedo de dejar a Beck y quedarme sola pero sabía que si Vega realmente me quería, ella no me dejaría sola.-Estoy muy orgullosa de ti, Jadey.- dijo suavemente y solo pude sonreír, hasta que algo rebotó varias veces en mi mente "mi casi novia".
-¡¿Como qué casi novia, Cat!?.- Ella empezó a reír pasamos hablando tamaño rato sobre cómo pasó todo con Trina y como mañana pensaba pedirle que fuera su novia, me pidió ir con Tori pero no podía aceptar y ella lo sabía, tenía un plan y no tenía tiempo que perder.

Ya entrada la tarde Cat fue a caminar con Trina y a mi solo me quedaba algo por hacer. Regresé a la casa de los Vegas, buscando a la Vega menor, quien veía alguna serie rara, de esas que les gustan a los jóvenes ahora. Me senté a su lado y la miré, Vega era única en su especie, tan preciosa y fuerte pero a la vez tan tierna y delicada, sin duda yo estaba jodida.
-¿Quieres ir a caminar conmigo?.- le pregunte suavemente esperando una negativa como respuesta y en dado caso me quedaría viendo series con ella. Fue entonces cuando la sentí ponerse de pie y caí en cuenta de que me había perdido en mis pensamientos.
-Claro, ¿vamos ya?.- Dijo una sonriente Tori.
Afirme con la cabeza, mientras me ponía de pie y salimos de la casa. Empezamos a caminar hablando de cosas triviales, dejándonos llevar por la extraña comodidad que ahora teníamos al estar juntas, era como si los demás no existieran y fuéramos solo nosotras ahí, pero algo seguía rondando mi cabeza y debía sacarlo de mi pecho justo ahora.
-Me gustas.- dije totalmente de la nada y con la poca valentía que me quedaba, Vega se quedó inmóvil, tratando de saber si escuchó bien o no.
-¿Que?.- pronunció una sonrojada Vega, ahora me miraba a los ojos, me sentía apenada, desvíe la mirada, solo Victoria Vega podía tener ese efecto en mí. << 30 segundos de valentía, solo eso necesito>>.- me repetía una y otra vez, entonces tomé sus manos entre las mías y la vi directamente a los ojos.
- Me gustas Tori, me gustas mucho y llevo demasiado tiempo guardandome esto.- Tori empezó a sonreír.
-Me llamaste Tori.- dijo sonriente y con una mirada cargada de ternura, ella sabía que eso rara vez, sucedía.
-Te diré un secreto.- agregó nuevamente Tori.- También me gustas pero a diferencia tuya, no hace mucho que lo descubrí.- me sonrió, fue entonces cuando no pude más y besé sus manos, mi corazón latía como loco, no debía arruinar esto.
- Entonces, Tori ¿Irías a una cita conmigo? Pero esta cita, no será como la que tuvimos en el Nozu, lo prometo.- sonreí hacía ella, a como se que nunca lo había hecho y ella me sonrió de vuelta antes de  besar mi mejilla.
-¿Eso te responde?.- preguntó coqueta y yo moría de risa.
- Claro que no jajaja dime ¿Porque me besaste en la mejilla?.- pregunté dejando que mi curiosidad saliera a flote.
-No beso en la primera cita, y como dijiste nuestra primera cita es mañana, Jade.- dijo mientras sonreía con autosuficiencia.
-No seas rara, Vega ya me has besado antes jajaja.- dije mientras reía y ella se me unió, entonces ella empezó a acercarse a mí y me miraba como si pudiera ver mi alma, yo la miraba de la misma manera porque podía ver la suya, lentamente nos acercamos, sin dejar de vernos, fue como si habláramos, tan intenso, tan genial, tan único. Nuestras narices se tocaban y un par de nuevas sonrisas nos brotaban del alma, entonces sus ojos se cerraron, mis labios se posaron sobre los suyos  y mis ojos automáticamente se cerraron dejándome llevar por la hermosa sensación de besar a Vega y que ella me correspondiera.

¡Gracias por los 10k!  Sinceramente estoy muy emocionada porque jamás pense que esto lo llegaría a leer tanta gente, gracias por leer, no se olviden de comentar y votar por este capítulo, si quieren también pueden recomendarla para hacer más conocida la historia, nos leemos la próxima.