TODO TIENE UN MOTIVO

1K 143 20
                                    

Narra _____:

Eran ya las siete de la tarde  y por fin habíamos terminado de mover todas y cada una de las cajas con materiales.

-Por fin Aizawa, estaba comenzando a hacerme vieja- Konoe me esperaba en el punto de inicio junto con el profesor.

-Bien, pueden retirarse y procuremos que no se vuelva a repetir- ambas asentimos y comenzamos a caminar.

-¿Por qué te comportas así? Es sólo tu culpa el que te hayan castigado también- por fin la había confrontado.

-Es tu culpa por dar tanta gracia- sonrió maliciosamente -Y ya deja de seguirme- me ignoró y siguió caminando al frente.

-No te estoy siguiendo, tú me estás siguiendo- reproché dirigiendo mi mirada al frente.

-Genial, vamos a la misma estación- fue la conclusión a la que llegó mientras soltaba un pesado suspiro.

-Realmente no te agradan los del departamento de héroes ¿verdad?- mencioné a la par que cruzábamos una calle.

-No los soporto- dijo sin mostrar emoción alguna.

-Yo tampoco te agrado- expresé imitando su voz monótona.

-No te odio, y  tampoco es que no me agrades, el que seas torpe te vuelve graciosa, no dudo que en  verdad te hayas perdido, pero no se como es que puedes llevarte tan bien con tipos del departamento de héroes- sus palabras resultaban sorprendentes en cierto punto.

-No son solo tipos, los tres son grandiosos amigos, deberías conocerlos- el atardecer ya era muy notorio.

-Paso- respondió cortante.

-Al menos admitiste que te agrado- me miró brevemete y una sonrisa se dibujó en su rostro -¡Lo ves! Tu sonrisa está de acuerdo conmigo- dije triunfante.

-Basta Aizawa- me dio un leve golpe en el hombro aun con aquella sonrisa.

-¿Por qué odias tanto al departamento de héroes?- dije después de un rato caminando en silencio. Ella simplemente desvió la mirada.

-No te incumbe- su rostro había borrado todo rastro de felicidad, estábamos a poco de llegar.

-Tal vez no, pero creo que podrías sentirte mejor si lo hablas con alguien- ella parecía comenzar a molestarse.

-No, no lo comprendes, no sabes como podría llegar a sentirme ¡eres ingenua Aizawa!- se paró por completo, alzó la voz al final y decidí que debía dejar de insistir.

-Perdón- me detuve frente a ella. Repentinamente se escucharon varios gritos muy cerca y  en cuestión de segundos la entrada del edificio frente al que estaba parada Konoe fue destruida por un villano que no tenía forma completamente humana, en su desesperación por huir, el cómplice del villano soltó dos ráfagas de viento enorme a sus costados, sacándonos a volar a ambas con mucha fuerza -¡Konoe!- grité antes de salir disparada.

Noté que al ser lanzada Konoe estaba a punto de chocar con una pared, entonces en un acto rápido hice crecer tantas flores como pude en el lugar donde calculaba que ella iba a caer, no logré ver si había funcionado o no, ya que cuando menos lo  esperaba sentí un fuerte golpe en mi espalda, nuca y parte de mi brazo, era como estar encima de muchos cristales, no pasó mucho para que todo a mi alrededor comenzara a ponerse totalmente negro.

Narrador

-Aaaag- se quejó la joven albina mientras se reincorporaba poco a poco, al abrir completamente los ojos vio que estaba encima de un pila de flores que habían amortiguado su caída.

Sonríe (Mirio x reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora