THE END.

10K 929 971
                                    

Era hora de volver a Londres.

Después de dos semanas que estuvo el rizado en el hospital y que por cierto tuvo una muy buena recuperación, ya podían marcharse.

Como aún no habían ido a la comisaría pues Louis se iría a despedir de sus amigos que había hecho ahí. Además de que todos sabían que él también era policía. Aunque obviamente no dirían que Harry también lo era, ya que él tenía una vida en New York y podría ser el blanco de muchos delincuentes.

Bajaron de la camioneta y empezaron a caminar hacia la comisaría cuendo escucharon el grito de Ian, ¿pero qué diablos?

—Hola chicos.—dijo Ian acercándose a ellos y tratando de recuperar el aliento—. Como ya saben que hoy nos vamos pues quise venir a ver el lugar y la familia que tenía aquí.

Eso también era otra cosa. Ian había decidido que ya no tenía nada que hacer en New York y no quería correr el riesgo de que alguien más lo vea por eso había aceptado la proposición del ojiazul de irse a Londres con ellos. Ahí tendría una nueva vida, podría trabajar de policía o fácilmente conseguir otro trabajo. Mientras que en New York su identidad ya no sería posible ya que como "esta muerto" no podría estar en un lugar estable además de que todos los policías de New York lo conocían.

—¿Por qué estás vestido así?—preguntó el ojiazul sorprendido por la ropa que llevaba puesta su amigo.

Ian estaba vestido con un pantalón muy ajustado, una camisa que tenía figuritas de gatos, una peluca que le llegaba hasta los hombros y unos lentes oscuros.

—Es muy simple. No podría entrar a la comisaría sin disfrazarme antes.—explicó Ian señalando su atuendo—. Aunque cero que fue una mala idea los pantalones, me aprietan demasiado.

—Eso se puede ver.—dijo el ojiverde con una sonrisa burlona—. ¿Por qué no comprastes algo que no se te va a romper con dar un solo paso?—preguntó el rizado mirando a Ian.

—Ya no habían menos ajustados.—dijo Ian algo incómodo ya que le apretaban demasiado los pantalones—. ¿Y si mejor entramos? Estas cosas me van dejar sin movilidad mis piernas.

—De acuerdo, solo no quiero que llames mucho la atención.—dijo el ojiazul como advertencia para luego agarrar la mano del alfa y caminar hacia la estación de policías.

Ian caminó más rápido y fue el primero en entrar siendo seguidos por los otros dos chicos.

—Hola mis buenos amigos los azules.—dijo Ian sacando una bolsa de confeti de quien sabe donde y empezaba a tirar confeti a los policías, mientras hablaba con su intento de español.

—Lo bueno es que le pediste que no llamara mucho la atención.—dijo el rizado señalando a Ian quien seguía aventado confeti.

—No se por que le dije si sabia que no me haría caso.—dijo el omega negando por las payasadas que hacia su amigo.

—¡William! ¿Es cierto que ya se van?—preguntó Tobias acercándose al ojiazul.

—Si, Londres nos espera.—dijo el ojiazul dejándose abrazar por Tobías.

—Fue un gran honor trabajar con usted joven William y sabia que no me fallaría.—dijo el director de la policía acercándose al ojiazul con una bolsa de regalo—. Un pajarito me contó que estas embarazado así que me tomé la libertad de traerte un detalle.

—Muchas gracias jefe.—dijo el ojiazul agarrando la bolsa de regalo—. Creo que nunca le presente a mi novio, Él es Edward Johnson.—dijo el ojiazul señalando al alfa que estaba a su lado.

—Una gusto, mi nombre es Alfred.—dijo el director de la policía saludando al rizado—. Veo que no me he equivocado y que aún se siguen amando.

⚓Interpol⚓ Larry Stylinson. [Omegaverse]Where stories live. Discover now