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Capítulo 17

Harry iba a tener un ataque de ansiedad

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Harry iba a tener un ataque de ansiedad.

No le gustaba, no quería enfrentarse a lo que sea que debía de enfrentar. Deseó volver a la casa del profesor Snape y hacer pociones con la tranquilidad de que nada malo iba a suceder.

Tragando saliva y sacando "el coraje Gryffindor que todos los Potter tienen" palabras de su padre no Harry por supuesto, se acercó con pasos lento y vacilantes a la puerta para finalmente dar dos golpes firmes.

Merlín que alguien lo salve.

La puerta se abrió dejando ver a una Lily Potter. Su cabello rojizo y ondulado estaba atado en un desordenado chongo alto, llevaba medias y ropa de andar por casa aunque encima tenía una túnica descuidada.

—Ah, eres tú. Quisiste aparecer después del espectáculo del otro día. —Dijo su madre con los brazos cruzados.

Harry se balanceó en su lugar y tragó saliva.

—L-lo sient...

—¡No quiero oír tus vagas excusas! ¡Entra a la casa! —Lily se hizo a un lado y Harry entró a la casa, su casa. Aunque, ¿Por qué se sentía tan ajeno? Era la casa en la que creció y sin embargo era tan frío por dentro, sin pertenecer allí.

—¡Así que volviste, muchacho! —Gritó su padre enfurecido. Harry se encogió ante el sonido de su grave voz.

—Y-yo papá...

—¡No! Basta Harry. Eres una molestia desde que naciste. No haces más que traer problemas a la familia

Harry sintió que su vista se nublaba por las lágrimas sin derramar.

—Los últimos meses con tía Petunia y Tío Vernon te debe bastar para empezar a comportarte. A ver si estando lejos del mundo mágico aprendes un poco más —Dijo Lily con tono severo y que decía que no iba haber discusión al respecto, pero Harry no podía ir.

—¡No! Mamá, me voy a comportar pero no me mandes a Surrey por favor —Dijo y odió que su voz haya sonado tan rota en la última súplica.

—¡Te escapaste! ¿¡Qué hubiera pasado si viniendo hacía aquí un mortifago te hubiese perseguido!? ¡Aiden hubiera estado en peligro

Las mejillas de Harry se sonrojaron con rabia.

—¡¿Qué hay de mí?! ¡No te importaría si estuviera muerto!

—¡No seas tonto, hijo! ¡Nos importaría un poco más si aprenderás a no meterte en problemas!

Solitario, Harry | drarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora