Completamente Mio

¿Profesor Adrien?

-Odio los lunes –Alexandra bosteza con pesadez mientras entramos a nuestro salón.

-Es como cualquier día –Laura ríe, pues Alexandra abre demasiado la boca.

-No, los días maravillosos son aquellos en los cuales no debo pararme a las 6:00am –Se cruza de brazos como una niña.

-Al menos duermes, yo estoy despierta desde las 4am por las náuseas –Suspiro agotada.

La profesora llega y comienza la clase, es algo aburrida, siento mis parpados pesados, estos comienzan a cerrarse, debo estar agotada por la falta de sueño además de mis problemas de tensión.

-Marie, Marie –Abro los ojos y veo Alexandra moviéndome para despertarme.

-La profesora te mira enojada –Esta vez habla Laura.

-Marie, que estés embarazada no es motivo para dormir en mi clase, debes comportarte, sé que te cuesta hacerlo y por eso estar en ese estado, pero en mi clase, debes hacerlo –La profesora habla con un tono irónico, la clase ríe.

-No creo que deba hablarle así a una estudiante –Una voz ronca interrumpe las risas, veo a Adrien entrar al salón en traje.

-Señor Adrien ¿Qué hace aquí? –Pregunta la profesora comiéndolo con la mirada.

-El director me pidió que de la clase de Negociación Internacional mientras consiguen alguien apto para el puesto –Para un momento, mira a todos los estudiantes hasta que su mirada conecta con la mía, volteo mi rostro para no verlo – Vine a presentarme y avisarles que hoy habrá clases, nos vemos en un rato –Sonríe de forma amable para después salir del aula.

-No te escapas de el –Laura ríe.

-No estoy huyendo –Ruedo los ojos fastidiada.

-Yo no huiría, es un papi –Alexandra lo mira.

-Cierra la boca que tienes baba –No puedo evitar reir cuando esta se pasa la mano por la boca para limpiarse.

-Mentira –Me golpea el brazo suavemente.

-Clase, silencio, presten atención –La profesora interrumpe, al parecer no éramos las únicas hablando, las otras estudiantes también estaban alborotadas.

Cuando la clase acabo, nadie se movió de su puesto, pues la otra clase era en esta aula, Adrien entra puntual, algunas alumnas se levantan para hablar con él, se le acercan de forma provocativa intentan agarrarlo del brazo o acariciarlo, él se ve incomodo, me mira, pero vuelvo a esquivar su mirada, al final le dice algo a las chicas que hace que estas se sienten en su puesto, empieza la clase, explica detalladamente, es fácil entenderle, su clase pasa rápido, no fue tan tediosa como las otras.

-Vamos a la cafetería –Se siente bien que todo volvió a la normalidad, Alexandra nos hala a Laura y a mí como hacia siempre.

-Marie, espera –Adrien nos detiene- Quiero hablar contigo

-Vayan, yo las alcanzo –Las chicas se marchan no sin antes guiñarme el ojo y sonreír de forma picara.

-Disculpa que te detuviera –Me mira apenado- Quisiera saber si te gusto la clase, no sé si lo hice bien –Se rasca la cabeza dudoso.

-Es la mejor clase que he tenido, explicas extremadamente bien –Sonrió para tranquilizarlo.

-Gracias, me hiciste falta, hice todo lo posible para volver rápido –Sonríe acercándose a mí.

-Yo... Debo ir a la cafetería antes que se acabe el descanso –Me excuso para intentar salir, pero alguien me toma de la muñeca con fuerza.

-¿Qué haces aquí? Vámonos –Luke me hala con fuerza, noto como Adrien me mira preocupado, pero Luke me saca del salón y me lleva a la cafetería.