La Fea Más Bella: Y Llegaste Tú

Capítulo 22: Felicidades.

Fernando miró su reloj, ya habían pasado más de los cinco minutos. "¿Estas lista?" Fernando la tomó de la mano.

"Míralo tú, esta fue tu idea." Leticia intentaba controlar sus nervios, pero ellos la controlaban a ella en este momento.

Fernando tomó la prueba en su mano, pero la confusión era clara en su rostro.

"Bueno, habrá sido mi idea, pero yo no leí el folleto. No sé qué significa esto." Se lo enseñó a Leticia.

Leticia miró la prueba, y lágrimas se formaron en sus ojos.

Fernando no la quería interrumpir, pero no aguantaba la ansiedad. "Eh, Lety, ¿Qué quiere decir?"

"Felicidades, mi amor. Vas a ser papá." Leticia le regaló una hermosa sonrisa mientras se tocó el vientre.

Después de un momento, Leticia levantó la mirada de la prueba al rostro de Fernando y vio que él también tenía lágrimas en sus ojos. Fernando salió del trance, y envolvió a Leticia en un fuerte abrazo.

"Felicidades, mi amor. Vas a ser mamá; vas a ser la mejor mamá del mundo. Te amo Leticia Padilla Solís."

"Yo también te amo Fernando Mendiola." Leticia lo besó suavemente.

Fernando y Leticia se quedaron abrazados un momento en el baño absorbiendo la notica.

"Creo que es mejor que nos vayamos a trabajar, no tardan en empezar a buscarnos." Dijo Leticia al separase de Fernando. Leticia le volvió a dar la prueba a Fernando quien la veía atentamente. Ella se puso a recoger todos los rastros de la prueba y echó todo en la bolsa de papel que habían traído de la farmacia antes de ponerlo en la basura.

"Hay mi Lety, yo no voy a poder trabajar hoy." A Fernando no se le borraba la sonrisa de oreja a oreja que tenía.

"Yo tampoco, pero por lo menos debemos de estar en nuestros lugares de trabajo." Leticia se miró una vez más al espejo y acomodó su cabello. Meses atrás, hubiera evitado el espejo a toda costa.

"Sólo porque tú lo dices." Fernando recogió su saco de donde lo había colgado y se lo ponía a la vez que seguía a Lety a presidencia. "Oye mi Lety, espero que ahora si no te opongas a que..." Fernando no iba mirando su camino y chocó con Lety quien se había quedado congelada a pocos pasos de la entrada del baño. Fernando miró alrededor de su oficina, y vio lo que hizo que Lety se detuviera en sus pasos.

Ahí en presidencia, sentada en una de las sillas en frente del escritorio de Fernando y mirándolos directamente, estaba Marcia Villaroel.

"Marcia, ¿Qué haces aquí?" Fernando salió rápido de su shock metiendo la prueba en el bolsillo de su saco, pero Leticia parecía paralizada.

"Te estaba esperando. Necesito hablar contigo, pero no pensé que estuvieras aquí ya." Marcia miraba a Fernando y Leticia de arriba abajo.

"Eh, bueno es que..." Fernando no sabía que decir, pero necesitaba decir algo. "Nosotros, eh..."

"Fernando tu ya no me debes explicaciones. No quiero ser grosera, pero me urge hablar contigo. Tengo un vuelo a Los Ángeles en dos horas."

"Con... eh... Con permiso Doña Marcia, con permiso Don Fernando." Leticia caminaba hacia su oficina, cuando Marcia le habló.

"No Lety, quédese. Lo que tenemos que hablar es de negocios y usted es indispensable para eso." Marcia no podía dejar su prepotencia de un lado, y se negaba a comentar del cambio tan acertado de apariencia de Leticia.

"¿Qué pasa Marcia? ¿Estás bien?" Fernando se dirigió a su silla, y le señalo a Lety que se sentara, y él se recostó del mueble a las espaldas de la silla cruzándose de brazos. "¿Cómo esta Ariel?"