Puede ser completamente ridículo o tonto, pero realmente soy incapaz de notar cualquier tipo de manipulación, chantaje emocional o malas intenciones, es por eso que me va tan mal en las relaciones de cualquier tipo: porque no sé discernir entre una buena y una mala intención por parte de los demás. Es decir, para cualquier persona es fácil saber cuando le están queriendo manipular con alguna cosa o la otra, pero para mí resulta extremadamente difícil, por esto cuento con mis amigos, les suelo mostrar fragmentos de conversaciones que tengo con gente malintencionada y ellos me comunican si me están manipulando, chantajeando o viendo la cara de tonta.
Es decir, una persona puede decirme en plena discusión: "¿sabes qué? Si no haces esto, aquello o lo otro, entonces me tendré que ir de tu vida o alejarme", y para mí eso no es un caso de manipulación, hasta que le muestro a mis amigos y me dicen que sí que lo es.
Si a mí alguien me dice: "si no haces esto, haré tal cosa y no te va a gustar", yo me lo tomo muy pero muy mal y me angustio por obvias razones, pero no lo considero manipulación o chantaje emocional, soy completamente incapaz de saberlo.
Miles de veces me han sentenciado con una consecuencia de por medio, como expliqué en el párrafo anterior, pero la verdad es que no sabía que eso era manipulación hasta hoy mismo.
Mis amigos odian que gente con malas intenciones llegue a mi vida, porque ellos no siempre tienen la manera de ayudarme a discernir entre buenas o malas intenciones.
Muchas personas se aprovechan del hecho de que tengo sentimientos e intenciones muy puros, cristalinos y sinceros, y eso es algo que maldigo muchísimo, porque yo jamás trato mal a quienes quiero, por más que muchos sí me traten pésimo a mí, y no suelo decir cosas que hieran a la otra persona.
Pero la verdad es que siento demasiada tristeza al pensar en que seguramente mucha gente me engaña y porque se aprovechan de mis nulas capacidades para notarlo.
A esta altura ya no sé en quién confiar, no sé quién dice la verdad o miente, no sé quién tiene buenas intenciones o malas.
Porque si una persona se aprovecha de mi situación y mi posición, ¿qué me hace pensar que otras no lo harán? De hecho, hay gente con la que me discuto y ya quieren enviar todo al diablo y reaccionan de manera muy extremista, pero no sé si lo hacen para que les ruegue, para manipularme y tenerme atada a ellos o si tal vez yo no tengo reacciones tan malas con quienes me importan.
Yo odio las palabras, porque las entiendo mucho menos que los actos en sí. Yo sé que una persona me quiere cuando se preocupa por mí, cuando lo da todo por mí o cuando es obvio que le importo; cuando la gente me muestra indiferencia, simplemente creo que no les importo, porque así funciona mi cabeza, mi estructuración y mi vida: si realmente le importo a alguien, lo va a demostrar no solo con palabras, sino con hechos visibles de los cuales yo seré consciente. Ahora, si a alguien le doy exactamente igual, me mostrará indiferencia, frialdad y dureza. Y nadie me va a quitar ese pensamiento, porque así, tal cual lo pienso, es.
Porque si alguien te quiere, lo demuestra sin dudarlo, por más miedo que tenga, y yo soy de esa gente que cuando quiere, lo da todo.
Ahora, también me sucede que en muchos de esos casos no existe reciprocidad, en el sentido de que yo recorrería mil océanos por una persona, y ella no recorrería ni siquiera un charco por mí, y eso sí que duele al notarlo o cuando un tercero me lo hace saber desde su perspectiva.
Conozco mucha gente desalmada que dijo quererme, e incluso amarme, pero sus palabras no iban acorde a sus acciones, entonces ahí comencé a dudar de todo lo que hasta aquel entonces esa persona me había mostrado. Porque yo digo "te quiero" o "te amo" y mis palabras van acorde a mis actos, porque yo lo demuestro, lo doy todo, tal vez no con actos dulces o con ternura de por medio, porque soy una persona bastante fría, pero sí que es notorio cuando yo lo doy todo por una persona.
Cuando alguien dice algo pero sus acciones no concuerdan, comienzo a dudar demasiado de esa persona y eso no se me quita nunca más.
Dicho de otra manera, considero que si alguien me quiere, me ama o me aprecia, jamás se irá de mi vida, por más difícil que sea la situación y por mucho que nos cueste ponernos de acuerdo. Si se va, pues entonces me confirma que no me quería, o por lo menos su cariño no iba en serio. Tal vez no entiendo por ese lado a las personas neurotípicas o que padecen otros trastornos, porque honestamente yo analizo toda la situación y me doy cuenta cuando hay algo que no encaja.
Y además, mil personas dijeron quererme y amarme, pero se fueron. Entonces yo me cuestiono: ¿cuánto me quisieron o amaron? Porque yo los quise lo suficiente como para quedarme, como para luchar y como para no rendirme en cuanto al tipo de relación que teníamos.
Si a mí una pareja me deja -como ya me ha sucedido en casos anteriores- y todo porque es incapaz de cambiar algunas actitudes por su parte, cuidar de mí o luchar por ese amor, me da a entender que no me quiso ni un poquito, porque yo puedo batallar contra los mil infiernos cuando quiero a alguien o cuando alguien me importa, pero los demás son incapaces de hacer exactamente lo mismo por mí y, es más, a veces hasta me pagan con frialdad e indiferencia.
Y ustedes dirán: "pero son personas inestables, inseguras, cambiantes o incluso temerosas", y yo les diré: cuando quieres a alguien, sin importar tus mil guerras internas, la vas a luchar, no te vas a rendir, porque de eso se trata la vida: de una constante competencia y batalla, y si dices querer a alguien pero te vas de su vida así como así, déjame decirte que eres una muy mala persona o literalmente no has querido ni un poco a esa persona.
Dejando esta discusión tonta conmigo misma y yendo al asunto verdaderamente importante para acabar al fin, también jamás distinguiría entre muecas o expresiones normales, o diferentes tipos de reacciones faciales, pero esto es en cuanto a lo no verbal, y lo mismo me sucede con ademanes.
Eso también es algo que maldigo, porque cualquier persona es capaz de entenderlo, pero yo no.
ESTÁS LEYENDO
Diario de una chica Asperger. ©
RandomEn este diario hablaré sobre lo difícil que es ser yo, convivir día a día conmigo misma, tener que ver las mismas personas, soportar porque no tengo opción. ¿Quién dijo que ser diferente era divertido, que sentirte la oveja negra o verde de la famil...